La que nos espera…

Pasan los días y Feijóo no da el sí a los debates. Le hemos oído decir que su único objetivo es gobernar, pero todavía no le hemos oído ni una palabra sobre “para qué quiere gobernar”. 

La ciudadanía tenemos derecho a conocer qué nos espera tras las elecciones del 23J. ¿Vamos a retroceder hacia posiciones “negacionistas del cambio climático o de la violencia de género”? ¿O por el contrario avanzaremos hacia la mejor España? El PP se resiste a clarificar sus posturas pero, afortunadamente, todo depende de nuestro voto. Nada está escrito.

De momento, en la comunidad valenciana, el Partido Popular ha demostrado que lo único que le importa es gobernar, tener poder institucional a costa de lo que sea. Aunque haya que abandonar principios y objetivos asumidos por su partido hasta ahora, como la lucha contra la violencia de género. Cambian cargos por principios sin pudor ni complejos.¿Van arenunciar al pacto de Estado contra la violencia de género? El Estado no puede retorcer en la lucha contra la violencia machista y el próximo 23 de julio lo debemos impedir con un gobierno central progresista liderado por los socialistas.

En Castilla y León, donde mantienen un vicepresidente de VOX sin funciones, han relajado los controles sanitarios alimentando la incidencia de la tuberculosis bovina hasta multiplicarla por siete. Una relajación fruto del negacionismo que promueve este gobierno autonómico y que supone un grave peligro.Hay ganaderos que protestan pidiendo al gobierno autonómico que cumpla con promesas electorales que ponen en riesgo la salud. ¿Van a continuar engañando a los ganaderos?¿Nos van a seguir poniendo en peligro a los consumidores? De momento, el gobierno central ha puesto freno a esta irresponsabilidad.

En Madrid, la gran apuesta de Ayuso contra el cambio climático es poner una planta en cada balcón. Y niega que la gente muera prematuramente por la mala calidad del aire, cuando mueren por la contaminación 20 000 personas al año en España. Como dice la ministra Teresa Ribera, ni una broma con esto.

El Estado no puede retroceder en la búsqueda de soluciones a los problemas, en hacer frente a las plagas. Debemos continuar afrontando desde el gobierno central los desafíos con responsabilidad y el próximo 23 de julio podemos avanzar en ello. Nada está escrito.

Problemas y soluciones

Feijóo ha apostado en su breve trayectoria como líder de la oposición por el negacionismo, las descalificaciones y la sobreexposición de los problemas. Sánchez ha apostado por el diálogo, la convivencia y la defensa de políticas que dan soluciones.

En 2020, el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia fijó los ejes fundamentales de nuestro proyecto de país. El Plan marcaba como horizonte la recuperación y el crecimiento de nuestro país en el 2023, un objetivo que se está cumpliendo a la vista de los datos económicos. Los últimos datos del INE nos confirman que ya hemos recuperado el PIB prepandemia y el primer trimestre del año ha disparado el PIB a un 4.2% en tasa interanual, cuatro veces más que la media europea. Tenemos récord de afiliación a la seguridad social y hay 1,4 millones de personas más trabajando que al principio de la legislatura.

Las reformas incluidas y aprobadas en el plan, constituyen compromisos con Europa que posibilitan los fondos europeos por lo que un cuestionamiento de las aprobadas, o un retroceso en los avances conseguidos, amenaza los futuros desembolsos. Ya ha pasado en Italia. Y el Partido Popular ya ha dicho que pretende derogar la reforma laboral, pese a la oposición de la patronal y los sindicatos, pese a que esto supondríaponer en riesgo los fondos europeos. 

El presidente del Gobierno en funciones no lo ha tenido fácil en esta legislatura, pero sí sabemos que con él “la que nos espera” es que siempre se adoptarán medidas para protegernos ante la adversidad; como ante la pandemia, el volcán, los fenómenos meteorológicos adversos o las consecuencias de la guerra en Ucrania. Pedro Sánchez ha conseguido salvar vidas con las restricciones y vacunas. Ha conseguido salvar millones de empleos con los ertes y ayudas. No ha dudado en movilizar recursos, buscar soluciones donde hiciera falta para conseguir lo mejor para España.Y sabemos también que impulsará cuantas medidas sean necesarias para continuar avanzando contra el cambio climático, en digitalización, en cohesión social, territorial e igualdad de género.

Con el liderazgo de Sánchez hemos conseguido fondos europeos por un importe de 160.000 millones de euros que continuarán ejecutándose en los próximos años.La pandemia nos dejó como lección la necesidad de profundizar en la seguridad y la autonomía europea estratégicaagroalimentaria, industrial, tecnológica, digital y energética. El desarrollo de los proyectos estratégicos (Pertes) suponen la gran apuesta por la reindustrialización en España a la que no podemos renunciar como país.

Un Gobierno de Sánchez continuará apostando por la movilidad sostenible, segura y conectada. Apostará por lamejor educación, por la suficiencia y sostenibilidad del sistema público de peEnsiones.Insistirá en la defensadel mejor sistema nacional de salud, el refuerzo de las políticas de inclusión, en un mercado de trabajo dinámico, resiliente e inclusivo. 

Seguirá revalorizando y protegiendo la industria cultural. Persistirá en la prevención y en la lucha contra el fraude fiscal, desarrollando un sistema impositivo ajustado a la realidad del siglo XXI.

Un Gobierno de Pedro Sánchez no cejará en el empeño de conseguir una cogobernanza útil y eficiente con las comunidades autónomas. Nunca se han realizado tantas conferencias, comisiones sectoriales, reuniones de foros de alto nivel, de consejos consultivos y de mesas de diálogo social como hasta ahora. Véase, por ejemplo, el plan de recuperación enviado a Bruselas.

En definitiva, con Pedro Sánchez, “la que nos espera” es la mejor España, en la que cabemos todos y todas. Porque España es diversa y nadie sobra. 

“La que nos espera” depende de nuestro voto. Nada está escrito. De ti depende.