IDEAS
La trampa cinco estrellas
Lucía Lijtmaer
Periodista
Lucía Lijtmaer
Leo con sorpresa el siguiente titular: "Italia hará obligatorio el estudio del cambio climático en los colegios". Así lo ha anunciado el Ministro de Educación Lorenzo Fioramonti: Italia se convertirá en el primer país que enseñará a sus estudiantes el cambio climático y el desarrollo sostenible de manera obligatoria en todas las escuelas públicas. Estas dedicarán 33 horas al año, casi una hora de la semana escolar, a cuestiones sobre el cambio climático desde el comienzo del próximo año académico en septiembre.
La sorpresa no deriva del titular en sí, sino de algunas de las declaraciones posteriores de Fioramonti: el firme defensor de las tasas para los billetes de avión, para los materiales plásticos y para los alimentos con azúcares añadidos ha articulado su discurso como una respuesta a Salvini: "Quiero representar a la Italia que se opone a todo lo que hace Salvini. Tenemos que construir una narrativa diferente y no tener miedo de decir algo que no le guste a Salvini, porque para eso existimos".
En las escuelas se enseñará desarrollo sostenible, pero no el fracaso de la lucha antifascista
Fioramonti omite, por supuesto, la historia del Movimiento Cinco Estrellas (M5S) al que pertenece: desde el 2014 y hasta el 2018 el M5S formó parte del grupo Europa de la Libertad y la Democracia Directa (EFDD) con el Partido de la Independencia del Reino Unido (UKIP) de Nigel Farage y Demócratas de Suecia, ambos de extrema derecha.
La paradoja en la que nos sitúa la realidad contemporánea, parecida a tantas series distópicas que la gente ahora nombra e identifica como una evidente posibilidad: un futuro cercano en el que se enseñe en las aulas un desarrollo sostenible pero que no contemple cómo las décadas de lucha contra el racismo, la esclavitud, el imperialismo, la vigilancia contemporánea se quedaron cortas para narrar un fascismo nuevo y extremo que surge ahora como respuesta al agotamiento de recursos naturales. Una respuesta antipolítica, que dice hablar en nombre del pueblo y contra las élites gobernantes. En definitiva: una respuesta que se lee como ecológica pero que falla en la identificación de causas y consecuencias. Es decir: una respuesta tramposa.
- Cambio de horarios en los colegios de España: malas noticias para los padres
- El apellido de origen gitano que tienen más de tres millones de españoles
- Barcelona suspende el 'Correfoc' de las fiestas de Gràcia 2024 por una grave desavenencia entre 'colles
- El Mundo Today | Cierra un club cannábico de Barcelona porque sus clientes son incapaces de recordar dónde está
- Buenas noticias para los consumidores: este es el precio del butano en el mes de agosto
- Los Mossos creen que los agentes detenidos abusaron de su 'conocimiento' en 'protección de personalidades' para facilitar la fuga de Puigdemont
- Una vaguada de aire frío amenaza con traer fuertes tormentas y una bajada de las temperaturas en las próximas horas
- Carlos Sobera, sorprendido tras conocer el trabajo de una soltera de 'First dates': 'Espero no verte más