La vida poslaboral
Elogio del ocio jubilar
Algunos piensan que son lo que hacen y confunden la actividad profesional con su vida
Ramon Folch
Socioecólogo. Presidente de ERF.
Socioecólogo. Presidente de ERF.
RAMON FOLCH
No doy abasto. Desde que me jubilé, no paro de hacer cosas, los innumerables temas que habían ido quedando pendientes, aplazados a causa de una vida laboral intensa y absorbente, desde lecturas hasta viajes, asuntos personales o encuentros con amigos. Es muy gratificante rescatar tiempo para uno mismo. O para la gente que amas. Ahora puedo escribir, pensar, oír música, conversar o pasear. O sea: vivir.
Muchos no se lo creen. «No te jubilarás nunca, tú», te dicen. Y acto seguido pretenden darte trabajo. Cuando lo declinas, a veces se lo toman mal. No admiten que no les dediques a ellos el tiempo que has recuperado para ti. Suponen que, ahora que tienes tiempo, les atenderás con más celeridad que nunca. Seguramente confunden la vida con la actividad profesional. Dan por hecho que si no produces o gestionas, mueres. Resulta que no.
«Soy médico» o «soy albañil», suele decirse. No: haces de médico o haces de albañil. Es distinto. Ser es una cosa, y hacer de esto o de aquello, otra. Pero algunos piensan que son lo que hacen. La vida profesional suplanta su vida personal. El propio movimiento feminista ha incurrido en el error, en mi opinión, de emular a veces los vicios existenciales del hombre y aspirar a un modelo femenino basado en la profesión. En el triunfo profesional, para ser más exactos.
Trabajar es un castigo bíblico, a ver si nos entendemos. Hemos aprendido a conllevarlo por la vía de la sublimación y hemos acabado creyendo que era una bendición. Hacer lo que te apetece sí que gratifica. Algunos, sobre todo los artistas, tienen esta suerte. Pero la mayoría, para ganarse la vida trabajan en cosas que no les interesan. He tenido la fortuna de hacer cosas que me apasionaban, pero aun así nada me satisface tanto como decidir libremente, en cada momento, a qué dedico mi tiempo. La jubilación, si tienes salud y recursos, te permite hacerlo. Necesitas el trabajo, como la droga, solo en la medida que dependes de él. Dicen que dignifica. Puede. En todo caso, mata.
- Cambio de horarios en los colegios de España: malas noticias para los padres
- El apellido de origen gitano que tienen más de tres millones de españoles
- Barcelona suspende el 'Correfoc' de las fiestas de Gràcia 2024 por una grave desavenencia entre 'colles
- El Mundo Today | Cierra un club cannábico de Barcelona porque sus clientes son incapaces de recordar dónde está
- Buenas noticias para los consumidores: este es el precio del butano en el mes de agosto
- Los Mossos creen que los agentes detenidos abusaron de su 'conocimiento' en 'protección de personalidades' para facilitar la fuga de Puigdemont
- Una vaguada de aire frío amenaza con traer fuertes tormentas y una bajada de las temperaturas en las próximas horas
- Carlos Sobera, sorprendido tras conocer el trabajo de una soltera de 'First dates': 'Espero no verte más