Entrevista

Eva Amaral: “No soy una persona que desee que hablen de ella. No deseo estar en el candelero”

El dúo zaragozano integrado por Eva Amaral y Juan Aguirre es una de las atracciones, este viernes, del festival Cruïlla, mientras, aprovechando los descansos en su actual gira de verano, da los últimos toques a su esperado nuevo álbum, que verá la luz en noviembre

El grupo Amaral en una imagen promocional

El grupo Amaral en una imagen promocional / CRUÏLLA

Jordi Bianciotto

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Tienen una nueva canción, ‘Rompehielos’, que comienza diciendo: “Siempre hay gente que habla, tienen tanto que contar / Y lo suyo lo callan, para hablar de los demás”. ¿Crítica a las redes, a ciertos medios…?

Eva Amaral: Siempre ha pasado que hay gente que tiende a juzgar la vida de los demás, y eso con las redes se ha intensificado. Ahora tienes que estar pendiente de lo que opinan desconocidos, y hay que tener la cabeza fría para que todo eso no te influya. No todo es malo en las redes, pero eso sí que hace que tu vida sea un poco más complicada. Hay que poder decir “mi vida es mía y voy a hacer lo que quiera”.

¿Esta canción marca el camino al nuevo álbum, cinco años después de ‘Salto al color’ (2019)? ¿En qué punto está este nuevo trabajo?

E. A.: Pues sí, aquí se abre una puerta hacia un nuevo álbum y hacia un nuevo espíritu de vivir la vida que se va a transmitir en las nuevas canciones.

Juan Aguirre: Ya están todas las canciones terminadas. Estamos acabando las mezclas. Saldrá en noviembre. Al título todavía le estamos dando vueltas.

¿A qué se refiere con eso del “nuevo espíritu”?

E. A.: Aún es pronto para hablar de ello, pero el disco transmite una nueva actitud ante la vida. Algo que hemos sentido los dos en estos últimos años.

J. A.: No hemos hablado mucho de eso Eva y yo, pero creo que tiene un punto de vivir el aquí y el ahora. Estamos haciendo el álbum a la vez que estamos de gira, y tiene que ver con disfrutar de las pequeñas cosas. En medio de una gira, de los conciertos abarrotados, a lo mejor disfrutas de una parada para tomar un café o de una charla con tu técnico de guitarras. Se trata de disfrutar del momento, no tanto de esperar lo que vendrá. Hemos tenido algún momento de retiro en un pueblo pequeño y está ahí la experiencia de levantarte y no escuchar coches, y de escribir canciones alejados del ruido de la ciudad.

Hace unas semanas vio la luz una canción de Love of Lesbian, ‘¿Qué vas a saber?’, dueto de Santi Balmes con Eva Amaral. Un tema que habla de la amistad de largo recorrido.

E. A.: Bueno, del conflicto que surge dentro de la amistad, ¡nada que ver con nuestra relación con Love of Lesbian! Habla de que la amistad no es tan sencilla como parece, que las relaciones humanas son complicadas y que aparecen cosas por gestionar. Ya hace años habíamos cantado juntos ‘Segundo asalto’, que para mí es un himno, y me hizo ilusión volver a colaborar con ellos.

También han publicado un dueto con Pedro Guerra, con un tema de él, ‘El otro’, y luego esa carta de amor a Zaragoza, ‘ZGZ’, para la película ‘Menudas piezas’, de Nacho G. Velilla.

J. A.: Ha sido un regalo poder aprender de un compañero como Pedro, que es muy sabio contándote cosas de la rítmica, los instrumentos y el carácter de la música de su tierra canaria, él que conoce tan bien el folclore y la música de raíz.

E. A.: Respecto a ‘ZGZ’, el director también es zaragozano, y es una canción que refleja esa sensación de los que nos fuimos de Zaragoza de jóvenes y que, cuando hemos vuelto a la ciudad, nos damos cuenta de las cosas que dejamos atrás, la gente querida que ya no está, los lugares que ya no existen…. Todo eso, solapado en la nueva realidad de la ciudad. Está esa relación con el pasado y el recuerdo, el vínculo de amor y… no odio, pero sí ese punto agridulce.

El dúo Amaral cumplió 25 años en 2023. Muchas cosas han cambiado en la escena musical desde entonces. Ahora hay muchas realidades paralelas. Se dice, por ejemplo, que las guitarras están de capa caída, pero luego sale una Olivia Rodrigo triunfando con ellas.

J. A.: Las escenas se han multiplicado y conviven, aun aludiendo a espacios temporales muy diferentes, porque el ‘streaming’ permite que alguien pueda escuchar el primer álbum de alguien y luego, con un golpe de ratón, música de los años 70 o de los 50. Y una cosa no sustituye a la otra. Luego, como guitarrista creo que no hemos vivido un tiempo tan excitante como ahora, porque las guitarras se pueden utilizar del modo clásico y también formando parte de los procesos de edición, como si fueras un programador de música electrónica. No estoy de acuerdo en que las guitarras estén en desuso.

Y ahí están los chicos de Carolina Durante, con esa versión de uno de sus temas, ‘Marta, Sebas, Guille y los demás’.

E. A.: Fue una sorpresa. Nos pidieron autorización para cambiar un poco la letra y nos pareció maravilloso, mientras respetasen al personaje que curra sin contrato y al que echan del trabajo. Que no cambiasen lo del “imbécil de tu jefe”. Me temo que no les costó mantenerlo, porque más o menos la vida sigue igual.

El 12 de agosto se cumplirá un año de aquella noche en el festival Sonorama, cuando Eva se quitó la camiseta, y el intenso y furioso debate posterior. ¿Con qué se queda de todo aquello?

E. A.: Prefiero quedarme con la sensación de libertad que sentí en el escenario. Había una intención de representar la libertad, pero parece que todavía no está muy bien vista. Para algunas personas.

¿Pero cree que hubo más rechazo que aprobación?

No, pero las voces negativas siempre hacen más mella que las positivas. En el momento, la reacción fue increíble. Fue muy bonito ver que la gente, en las primeras filas, se comenzó a quitar las camisetas. Allí pensé: “esta noche hay esperanza, mañana no voy a mirar las redes sociales porque probablemente será distinto”. Yo no pensaba que tendría tanta repercusión. Me sorprendió que se viera incluso como algo violento, pero está bien para ver qué terreno pisamos.

También se podía pensar que Amaral estaba sin disco nuevo, un poco fuera de los canales de promoción, y que aquello fue un gag para que se hablara del grupo.

Si miras mi Instagram verás que no soy una persona que desee que hablen de ella. Subo una foto al mes, y es de pájaros y de fauna ibérica. No deseo estar en el candelero en absoluto. Yo sentí que eso debía hacerlo por motivos que no son ese. No necesito más repercusión de la que tengo. Ni Juan ni yo. Estábamos actuando en el festival como cabezas de cartel y me siento muy realizada con la vida que tengo.

Cuando hace cuatro años, en plena pandemia, actuaron en el Camp Nou, en el pequeño Cruïlla XXS, en el repertorio colaron guiños a New Order, Paco Ibáñez, Ennio Morricone, Roberto Carlos… Ahora vuelven al Cruïlla, el grande, un festival muy abierto, en el que tocan desde Óscar d’León a Pet Shop Boys. Parece que ese contexto se parece a lo que representa Amaral.

J. A.: Es verdad, ya no me acordaba. Eso en esta gira no lo hacemos. Yo me alegro mucho de que actualmente la música sea tan diversa y que convivan los géneros. Ha habido una separación un poco artificial entre el pop-rock y lo latino, por ejemplo, y ahora eso es absurdo plantearlo. Nos gusta la apertura de miras de este festival. De hecho, creo que me quedaré un día más para ver a Johnny Marr, a quien no he visto nunca en un escenario, y a otros artistas que me interesan, como Pet Shop Boys o Calexico.

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