Gladiadores, esclavas y senadores de la Antigua Roma reviven en el Museu d’Arqueologia del siglo XXI

"La libertad se la pueden meter por donde les quepa. Ni la tengo ni la quiero. Encontraré la muerte antes. Yo quiero ser el entretenimiento, el espectáculo", dice celoso de perder la fama y la popularidad ganada sobre la arena, el gladiador Leontius, interpretado por un actor del Institut del Teatre desde una gran pantalla. En otro vídeo, también extrapolable a los tiempos que corren, los ciudadanos romanos Titus y Cornelia, matrimonio de clase media, exponen sus prejuicios contra los extranjeros. Más allá, Claudia, esposa de un comerciante de esclavos, afirma que los odia y, sin embargo, empatiza con uno, una madre a la que le quitan a su hija.

Son tres de las 11 "historias romanas" que vehiculan ‘Imperivm’, la novísima e innovadora exposición permanente del Museu d’Arqueologia de Catalunya (MAC) que reivindica la colección de la Antigua Roma que guarda el centro ubicado en Montjuïc. Recién inaugurada, concebida para conectar con un público generalista y del siglo XXI, combina acertadamente además unas 200 piezas arqueológicas, la mitad nunca expuestas, con ‘videomappings’ y proyecciones sobre ellas, como la que permite seguir una carrera de cuadrigas a través de un espectacular mosaico del circo romano de 7x3 metros -la joya de la corona; solo existen una decena de esas dimensiones-, o una inmersión de 360 grados que con unas gafas de realidad virtual permite sobrevolar a vista de pájaro la Tarraco del siglo II aC.    

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Primera piedra de la renovación

‘Imperivm’, comisariada por los conservadores Mario Cervera y Arturo de la Oliva, significa la primera piedra de la renovación del museo y la materialización de la apuesta de su director, Jusèp Boya, por su modernización, utilizando nuevas tecnologías para revisar y acompañar el relato, buscando una vuelta de tuerca a la tradicional exposición de piezas sin más. El proceso de transformación museográfica, en el marco del plan estratégico MAC 2030, continuará con la inauguración de la permanente que ofrecerá la revisión de la colección de Prehistoria, prevista para finales de 2025, que coincidirá con los 90 años de la inauguración del MAC, y, para 2026-2027, de la de piezas iberas.  

Precisamente algunos de estos objetos forman parte de la exitosa muestra ‘El enigma ibero’, que tras verse en el MAC está ahora en el Antikenmuseum de Basilea (Suiza) y de la que se está ultimando que viaje a Austria. Es otra prueba del enfoque de Boya por exportar producciones propias y convertirse en una institución museística de referencia nacional e internacional al que puede sumarse en breve otro ejemplo: la muestra ‘Naufragios. Historias sumergidas’, prorrogada hasta el 24 de noviembre, podría itinerar luego por diversos centros de CaixaForum si las conversaciones se cierran pronto. 

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Y, tras las necesarias rehabilitación del tejado del edificio y nueva climatización, el MAC también trabaja con la idea de lograr sinergias con otros museos europeos para compartir pequeños espacios inmersivos (como el de su sede de Ullastret), y por tanto sus costes, dentro de los recorridos expositivos.  

Mientras tanto, ‘Imperivm. Historias romanas’, que ocupa 1.000 metros cuadrados (la planta baja del museo y la recuperada galería circundante de la segunda que antes era hemeroteca), refleja una visión más íntima de la sociedad y la vida en la Antigua Roma con el acento en las personas que había tras los objetos que se exponen y que, al margen de los avances tecnológicos, no eran tan distintas a las del siglo XXI.

Corrupción, enchufes y "mujeres incapaces"

Como ejemplo, bustos de Juli Séneca (importante cargo municipal de Barcino), de Nerón o Augusto que evocan que la corrupción o las políticas de favores y enchufes no han nacido hoy. O las mujeres, por ejemplo, que en algunos textos eran definidas como "débiles" o "incapaces", lograron llegar en algunos casos a puestos de prestigio e influir en la sociedad. Las había comerciantes o propietarias de navíos mercantes, apuntan los comisarios. 

Un legionario, una sacerdotisa...

En los distintos ámbitos -que tratan del latín, lengua del Imperio; la ciudad; el poder; el pueblo; la religión; la mujer o los negocios y el ocio (de los espectáculos al sexo)- se suceden los vídeos, donde hablan hasta 11 personajes ficticios encarnados por actores. Entre ellos, un niño y una niña de rica familia, dos esclavas, un legionario que no esconde su miedo a morir, una sacerdotisa o un senador, que cuentan sus historias, escritas en un lenguaje actual por el dramaturgo Eduard Olesti y los comisarios. 

El visitante puede escucharlos con una audioguía que sirve para todo el libre recorrido de ‘Imperivm’, con banda sonora del músico Ubaldo y voces del dueto Tarta Relena, y que tiene una versión pensada para el público infantil, que puede seguir el icono del conejo Rufinus, que evoca un surtidor de agua rescatado de los fondos del MAC.  

De ellos ahora relucen otras piezas restauradas que los comisarios no dejan de reivindicar. Además del retrato de Damia Flavia, una mujer de clase alta de Empúries que es la imagen de la muestra, destacan la catapulta de Empúries, "la más antigua que se conserva de este modelo portátil, un ‘scorpio’, del que solo quedan las partes metálicas". Un vídeo-render muestra cómo era completa y manejada por un soldado. 

Otros objetos estrella son un ánfora, "la única en el mundo que se conserva con una inscripción pintada, no grabada, que dice que contenía aceite dulce"; un tintinábulo, una campanilla en forma de falo cabalgado por una mujer, que era en realidad un amuleto contra el mal de ojo; un delicado mango de marfil de una navaja plegable en forma de gladiador, o la Venus de Empúries. Y, sobre todo, el imperdible y bello sarcófago del rapto dela diosa Proserpina, con un más que ilustrativo ‘mapping’ sonoro que explica el mito coloreando cada escena esculpida en él.

Próximas iniciativas

No se limita el MAC a su sede de Barcelona, sino que también ultima en la de Empúries (L’Escala) la apertura, el próximo 27 de julio, de la permanente ‘Empúries, puerto de culturas’ mientras trabaja en las de Girona, Ullastret y Olèrdola. Y, para este noviembre, prepara una pequeña exposición y una jornada internacional para conmemorar los 50 años de la muerte de su primer director, Pere Bosch i Gimpera, que antes de tener que exiliarse a México tras la Guerra Civil fue el primero en dar ideas para construir un museo de arqueología moderno. Un legado que se está haciendo realidad.