Districte Cultural

Alquileres, espacio y proximidad: ¿por qué L'Hospitalet es un imán para los artistas?

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Rosalía trabaja en instalar su estudio musical en L'Hospitalet de Llobregat

El club cultural que lo peta en el distrito donde Rosalía montará su estudio

La exposición 'Tengo el pelo de punta' de Rodrigue Mouchez

La exposición 'Tengo el pelo de punta' de Rodrigue Mouchez / CREA 2022

Alba Giraldo

Alba Giraldo

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El mundo de la cultura y el arte en Barcelona ha huido de la gran ciudad en busca de refugio en L'Hospitalet de Llobregat. Algunos lo definen como el Brooklyn de Nueva York, distrito en el que la creatividad encontró su lugar lejos de la saturación de Manhattan. O el Shoreditch de Londres. Manchada por los prejuicios, pocos conocen el talento que en realidad esconden las calles de la ciudad del área metropolitana. Los proyectos artísticos se han trasladado a la urbe escapando de la capital, donde han encontrado un consistorio que les da facilidades, espacios para desarrollar todas sus ideas a precios más asequibles y una nueva comunidad de creativos de la que formar parte. El arte callejero puede coexistir con los edificios y pisos altos. El entusiasmo es tan grande que hasta Rosalía quiere plantar su estudio musical allí.

El llamado Districte Cultural -integrado principalmente por la zona industrial de Carretera del Mig-Cobalt y el barrio de Santa Eulàlia- fue una iniciativa del ayuntamiento de L'Hospitalet. El proyecto convierte antiguas naves industriales radicadas en la ciudad en estudios de artistas de diversas ramas. Hasta el momento, más de 500 creativos, colectivos y empresas culturales se han instalado en el polígono de hasta 25 hectáreas. Su efecto en los últimos años ha propiciado que los creadores se muden también a otros puntos del municipio, como los barrios del Centre, Bellvitge y Sant Josep.

Salida de Barcelona

Cuando los precios de los alquileres de locales en Barcelona empezaron a subir, muchos creadores se trasladaron a otras partes del territorio atraídas, en gran medida, por unos precios más económicos. Tras ello, el ayuntamiento hospitalense impulsó el llamado Districte Cultural, un proyecto estratégico de ciudad que tiene la cultura como “motor de transformación y crecimiento social y económico, para convertir L'Hospitalet en una ciudad líder del área metropolitana”.

El espacio alberga estudios de artistas y creativos, como pintores, escultores y músicos, locales de ensayo y música en vivo, galerías de arte, espacios de producción audiovisual, estudios de diseño, gabinetes arquitectura y publicidad, talleres de diseño de moda y joyas, entre otras especialidades, que se han instalado en espacios industriales en desuso y antiguos talleres en los barrios. Incluso el aclamado Cirque du Soleil coloca sus carpas en la zona y ensaya sus espectáculos en una de las naves cuando visita la ciudad.

El de las artes visuales es el principal sector local, en torno al 32% del total; seguido del diseño y las artes gráficas, con un 30%; y las artes escénicas –especialmente música y danza–, con un 23%. Este sistema se complementa con los equipamientos de la ciudad, los casi 60 festivales que se celebran y los espacios y lugares de interés patrimonial, como la Fàbrica Godó i Trias. La ciudad cuenta también con un tejido de fábricas y espacios de creación o 'hubs', como el Edificio Freixas, Salamina, Miquel Romeu, Isaac Peral y la Nau Tonal'h, entre otros.

Estudio musical de Rosalía

El Districte Cultural de L'Hospitalet ha ganado interés en las últimas semanas después de que la emisora RAC1 informara de que la cantante Rosalía instalaría su estudio musical en esta ciudad. Un edificio que ha encargado a un despacho de arquitectos barcelonés y que se unirá al resto de proyectos de artistas que ya han encontrado su lugar de inspiración en la metrópoli.

Arte urbano en la Torrassa con Mina

Arte urbano en la Torrassa con Mina / AYUNTAMIENTO DE L'HOSPITALET DE LLOBREGAT

"Si algún día tengo pasta, no seré Warhol, pero montaré un sitio que haga honor a ese espíritu donde los artistas se puedan encontrar y crear", escribió Rosalía hace ocho años en sus redes sociales. Un proyecto que ahora puede hacerse realidad. Desde el Ayuntamiento de L'Hospitalet quieren que las nuevas iniciativas "permitan la interacción entre agentes artísticos y escuelas, asociaciones y empresas". De esta manera, la ciudad se convierte en un "laboratorio de innovación social". 

Artistas en todas sus disciplinas

Uno de los habitantes del Districte Cultural es Sergio Caballero, codirector del festival Sónar, que llegó a la calle Cobalt en abril de 2018. "Es un barrio donde los alquileres son asequibles y puedes encontrar espacios grandes. Para un artista es un lugar fantástico para buscar un taller", declara Caballero. "Pero lo más importante es que no hay locales 'hipsters' como en Poblenou", confiesa. "Además, contamos con el Ayuntamiento de L'Hospitalet ayudando y dando facilidades para instalarte", asegura. Caballero celebró el 25 aniversario del festival de músicas avanzadas con la exposición sobre su imagen gráfica 'Ni flyers ni pósters. 25 anys d’imatge Sónar' en el Centre d’Art Tecla Sala del municipio catalán. 

En el barrio de Santa Eulàlia se encuentra Vitralls Bonet. Fundada por JM Bonet en 1923, ha sido la encargada de construir las vidrieras de la Basílica de la Sagrada Familia. Un negocio familiar que ha ido pasando de generación a generación con un "espíritu que contempla un escrupuloso respeto por las técnicas y métodos tradicionales, así como un interés constante por el desarrollo de nuevos procedimientos", detallan desde la empresa. Aunque en un primer momento el taller se encontraba en el barrio de Gràcia, la familia decidió trasladar su fábrica a L'Hospitalet al ver que los artesanos habían desaparecido de la capital.

Exposición ‘Vitralls Bonet,1923-2023. Cien años al servicio de la luz’, en L'Hospitalet.

Exposición ‘Vitralls Bonet,1923-2023. Cien años al servicio de la luz’, en L'Hospitalet. / Elisenda Pons

El pintor Carles Gabarró fue uno de los primeros en instalarse en la zona. Gabarró rehabilitó un edificio de seis plantas de la calle del Cobalt para situar su nuevo taller en 2016. Él se quedó en el ático y abrió la puerta a que otros proyectos culturales pudieran instalar sus estudios allí.

Los artistas Lúa Coderch y David Bestué también han compartido taller en un edificio de la calle Salamina. Los dos han colaborado con la ciudad para potenciar el arte. Coderch presentó su proyecto videográfico 'Palau de vent' en el Centre d'Arts Tecla Sala de L'Hospitalet, mientras Bestué comisarió en la plaza Can Colom de L'Hospitalet 'La Plaça', una exhibición al aire libre que exploraba las relaciones de la escultura con el espacio público. 

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