Juan Ramon Lucas homenajea en 'Melina' a las mujeres fuertes de la posguerra

"Una novela de mujeres que se abren camino en un mundo de hombres; mujeres independientes y tenaces, que actúan y avanzan desfiando hábitos y cambiando poco a poco actitudes. La mayoría, desconocidas, y a veces sin una conciencia clara de lo que estaban haciendo, más allá de defender sus derechos y sobrevivir en ambientes hostiles". Así define el periodista y escritor Juan Ramón Lucas el tema principal de ‘Melina’ (Contraluz), su tercera y más personal novela, que presenta en Barcelona este jueves 30 de noviembre (19.30 h., Librería +Bernat).

Inspirada parcialmente en la figura de su propia madre, el popular presentador televisivo y locutor de radio se remonta en ‘Melina’ a la posguerra, donde, a través de la mirada de la protagonista, que da título al libro, retrata las inquietudes de una generación de mujeres, muchas anónimas y silenciosas, que sufren y se revuelven contra el machismo imperante en la sociedad franquista. 

La trama empieza en Mieres, ciudad natal de Melina, con la revolución de Asturias de 1934, y allí vuelve tras unos años de exilio en Buenos Aires huyendo de la represión tras la Guerra Civil. A pesar de las circunstancias hostiles con que se topa, tanto en América como en España, la protagonista conseguirá progresar. 

Como la madre de Lucas, Melina fue una mujer adelantada a su tiempo, rodeada de mujeres fuertes, valientes e inconformistas que la ayudaron a forjar su camino. Así, en la ficción está su maestra, que le enseña a decidir por sí misma; su tía Lita, que la crió junto a su madre en las ausencias de su distante padre; Adelina, la guisandera, que le inculca su pasión por la cocina, o la actriz Ana del Río, que la apoya en sus momentos de soledad. 

Rechazo del padre revolucionario

A Melina, desde el momento de su nacimiento, la acompaña el rechazo del padre, machista y déspota con su familia mientras fuera de casa es visto como un héroe que lucha por los derechos y libertades del pueblo. Él responde a un prototipo de revolucionario durante el alzamiento de los mineros en Asturias, donde las mujeres eran el apoyo en casa y las encargadas de sostener a la familia si los hombres morían o caían presos. 

Según Lucas, “las revoluciones, como los progresos o las batallas, eran hasta hace nada cosa de hombres. Incluso entre personas consideradas progresistas. El propio parlamento de la República reflejaba esa realidad, como bien denunciaron Clara Campoamor y Victoria Kent”.  

Cicatrices

Con más de 40 años de carrera periodística, con dos premios Ondas en su haber, entre otros reconocimientos, quien presentó el programa ‘La Brújula’ en Onda Cero había escrito dos novelas antes de ‘Melina’ -‘La maldición de la Casa Grande’ y ‘Agua de Luna’-. También es autor de los ensayos ‘Inmunofitness, la salud también se entrena’, ‘Diario de vida’ y ‘Hablemos sobre felicidad’.  

Ante las cicatrices de la Guerra Civil, el periodista opina que “mirar al futuro no es olvidar ni fingir que no pasó nada y todos son iguales”. “Cada cual explicará lo suyo a su manera, pero hay que seguir buscando que quienes sufrieron puedan algún día encontrar compensación a su dolor y al de los suyos -señala-. Es una cuestión de justicia. Justicia universal”.