Arte contemporáneo y memoria

El arte da voz a los silenciados del franquismo en el Born

Una exposición rescata la memoria de los represaliados por la dictadura a través de 22 obras de 19 creadores contemporáneos como Francesc Torres, Pep Agut, Concha Jerez, Carles Guerra y Maria Amparo Gomar

Barcelona 17/11/2022 Exposición Un altre fi. LA RESTA. Art i antifranquisme en el Born Foto de Ferran Nadeu

Barcelona 17/11/2022 Exposición Un altre fi. LA RESTA. Art i antifranquisme en el Born Foto de Ferran Nadeu / FERRAN NADEU

Anna Abella

Anna Abella

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Una corbata con estampado de rombos y el nudo hecho en la que aún se ven las manchas de sangre. La llevaba José Alba cuando fue fusilado el 14 de enero de 1941 en Paterna, víctima del franquismo. Era chófer de la Campsa de València y no estaba afiliado a ningún partido ni sindicato. Pero fue delatado por encubrir a un compañero. Su cuñado pudo recuperar la prenda de la fosa y su viuda, Serafina, la custodió. Su hija la guardó y hoy la conserva su nieta, María José, que ante este objeto de la memoria familiar, ahora mostrado en una pequeña vitrina en una de las pasarelas del Born Centre de Cultura i Memòria, dentro de la exposición ‘Otro fin. EL RESTO. Arte y antifranquismo’, dice con voz temblorosa: "Todos son mi abuelo". A su lado, Concha, nieta de Salvador Tortajada, también asesinado por el régimen en Paterna, ha cedido las humildes cuerdas, con el nudo solo medio deshecho, que usaron para atar las manos de su abuelo antes de fusilarle. Reposan en otra urna cristalina. El delito de Salvador fue estar afiliado a la CNT. Su viuda, Vicenta, fue al cementerio con sus seis hijos y recuperó esas cuerdecitas del cadáver antes de que lo sepultaran en la fosa. "Quería conservar algo suyo... Solo pido que la verdad de lo que les hicieron salga a la luz, que se sepa para que no pase de nuevo", reclama Concha, que añade cómo una de las hijas de su abuela murió de hambre en sus brazos. "Fue a la cola de racionamiento y le negaron la comida porque no supo responder de qué color llevaba la casaca el cura aquel domingo", añade emocionada.

Cuerdas con las que fue atado de manos Salvador Tortajada antes de ser fusilado en Paterna en 1941. Las recuperó de la fosa su mujer, Vicenta. Su nieta las ha cedido para la exposición del Born.

Cuerdas con las que fue atado de manos Salvador Tortajada antes de ser fusilado en Paterna en 1941. Las recuperó de la fosa su mujer, Vicenta. Su nieta las ha cedido para la exposición del Born. / FERRAN NADEU

La corbata y las ataduras son dos de las piezas de ‘Objetos (Des)aparecidos’, obra de Maria Amparo Gomar Vidal, una de los 19 creadores contemporáneos que convierten en 22 obras de arte la memoria de los silenciados del franquismo y la reivindicación de la resistencia colectiva y cultural en esta muestra que podrá verse gratuitamente en el Born CCM hasta el 16 de abril. 

"Represión brutal"

No es una exposición historicista sino que "reúne miradas del mundo del arte que exploran el pasado para construir el futuro, muestra una feroz dictadura cuyas consecuencias aún sufrimos y denuncia la falacia de la Transición", recalca Nora Ancarola, cocomisaria junto a Amanda Cuesta. Han puesto el foco tanto en "la biopolítica totalitaria y la represión brutal del franquismo como en los nuevos imaginarios posibles para las nuevas generaciones". 

'Amnesia-Memoria', instalación de 1991 de Francesc Torres que rinde homenaje a  13 maquis que lucharon contra el franquismo.

'Amnesia-Memoria', instalación de 1991 de Francesc Torres que rinde homenaje a 13 maquis que lucharon contra el franquismo. / FERRAN NADEU

El recorrido se despliega por los distintos espacios del Born, desde las salas expositivas al propio yacimiento arqueológico de los restos de la Barcelona del 1700, donde Pep Agut ha adaptado su instalación ‘Meridiano de Madrid: sueño y mentira de Franco’, que realizó para el Reina Sofía en el Palacio de Cristal, y que desperdiga entre las ruinas blancas columnas de yeso desplomadas como crítica al pasado colonialista español. 

Homenaje a los maquis

Además de los fusilados (según el censo del juez Baltasar Garzón, podría haber aún más de 140.000 desaparecidos en fosas comunes), una instalación de Francesc Torres, ‘Amnesia-Memoria’ (1991) rinde homenaje a 13 maquis, resistentes que lucharon contra Franco tras la guerra y que fueron criminalizados como simples bandoleros. También los reivindica la serie fotográfica por Levante y Aragón de Jaume Serra Torelló (fallecido el año pasado) y Joan Anton Serra.  

'Meridiano de Madrid: sueño y mentira de Franco', instalación de Pep Agut de 2021 realizado para el Palacio de Cristal del Retiro y el Reina Sofía, cuyas columnas de yeso blanco ha recolocado entre los restos de la Barcelona del 1700 que pueden verse habitualmente en el Born.

'Meridiano de Madrid: sueño y mentira de Franco', instalación de Pep Agut de 2021 realizado para el Palacio de Cristal del Retiro y el Reina Sofía, cuyas columnas de yeso blanco ha recolocado entre los restos de la Barcelona del 1700 que pueden verse habitualmente en el Born. / FERRAN NADEU

Otras obras hablan del exilio interior, sufrido con autocensura y silencio, y del exterior, con la fuga del talento y la masa crítica de artistas, intelectuales y científicos que emigraron. Como los fragmentos anotados de los filmes de Francesc Tosquelles, revolucionario y progresista psiquiatra de la República recuperado por la reciente exposición del CCCB (ahora en el Reina Sofía), comisariada por Carles Guerra, que en este ensayo visual aporta material inédito. "Llevó su método antiautoritario, que transformó la práctica de la psiquiatría, que en la época era especialmente represivo con las mujeres, triunfó en su exilio en el hospital francés de Saint-Alban", recalca el artista. 

En primera línea, 'Lo oscuro del espejo', una de las instalaciones de Concha Jerez, realizada en 1994 con testimonios de presos en la cárcel de Carabanchel.

En primera línea, 'Lo oscuro del espejo', una de las instalaciones de Concha Jerez, realizada en 1994 con testimonios de presos en la cárcel de Carabanchel. / FERRAN NADEU

Destacan también temas como el maltrato a la mujer, cuyas voces se alzan en imágenes de manifestaciones históricas y en los textos de escritoras como Mercè Rodoreda, Carmen Laforet o Anna Murià; la represión a quienes no encajaban en la ‘normalidad’ de las relaciones sexoafectivas tal como las entendía el nacionalcatolicismo, misógeno y homófobo (lo destaca en dos piezas Antoni Hervàs; la represión de la lengua -que denuncian los poemas visuales de Guillem Viladot-; el trabajo esclavo -"¿qué sabemos de las empresas enriquecidas con su sangre que aún hoy cotizan en el Ibex 35?", se pregunta Ancarola-; o los testimonios silenciados de tortura y los obtenidos en 1994 de presos de Carabanchel por la premiada artista Concha Jerez, que participa con tres instalaciones de arte conceptual.

Poema de Brossa

Todos, junto con Alán Carrasco, Domènec, Marcelo Expósito, Dora García, Lola Lasurt, Marco Noris, Ndong Obama, Filiberto Obama Nsué, Ana Teresa Ortega y María Ruido, visualizan EL RESTO del título de la muestra: lo criminalizado, invisibilizado y desterrado por el franquismo. Para entender el significado de ‘Otro fin’ solo hay que escuchar, como Ancarola, el tango de Miguel Poveda sobre el poema de Joan Brossa ‘Havies d’haver fet una altra fi’.