Sónar + ISEA: la mejor cultura digital del mundo toma Barcelona

Barcelona será durante casi 10 días la capital mundial del arte electrónico. Por un lado, la ciudad acoge desde este viernes y hasta el 16 de junio la 27ª edición del itinerante Simposio Internacional de Arte Electrónico (ISEA), que también riega proyectos en L'Hospitalet, Amposta, Balaguer, Berga, Girona, Lleida, Mataró, Reus, Tarragona y Vic.

Por otro lado, los días 16, 17 y 18 de junio Fira Montjuïc y Fira Gran Via serán las sedes de la 29ª edición del Sónar, festival que este año acentúa la apuesta por su apartado +D, esto es, la confluencia entre arte, tecnología y ciencia, integrándolo de pleno en el núcleo espectacular de la cita, y al parecer solo es un anticipo de lo que vendrá en 2023, año del 30 aniversario de la muestra. Asimismo, el ZIP, festival que potencia nuevos formatos escénicos, estará en el Teatre Nacional de Catalunya (TNC) del 15 al 19 de junio.

Arts Santa Mònica, La Capella, el Recinte Modernista de Modernista de Sant Pau y el CCCB, entre otros espacios, acogen parte de la apabullante programación del ISEA. El arte del futuro ya está aquí. Y trae espectáculos para masas singulares. Como el primer 'show' de drones en el cielo barcelonés y un ‘mapping’ en Sant Pau. La oferta de actividades, en su mayoría abiertas a los ciudadanos, es brutal. "Barcelona será estos días la capital planetaria de las artes electrónicas", augura el director del ISEA 2022, Pau Alsina, profesor de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC).  

Es la primera vez que la capital catalana se convierte en anfitriona de este certamen que desde 1988 itinera por todo el mundo y que vuelve a Europa tras una década sin celebrarse en el continente. La última vez que se celebró físicamente fue en Corea en 2019. Más de 1.100 propuestas llegaron a los organizadores de la presente edición; de ellas, más de 600, piezas artísticas en diferentes formatos. La cita catalana cuenta con la implicación de unas 50 entidades, "con un carácter muy social y público y una pequeña parte académica restringida a especialistas de más de 40 países", dice Alsina. 

Campo de batalla social

"Retomando el espíritu del modernismo como movimiento transversal que integró diversas disciplinas -prosigue Alsina-, el encuentro explorará la intersección entre el arte, el diseño, la ciencia, la tecnología y la sociedad". No porque sí sino para afrontar retos contemporáneos como el cambio climático, el consumo energético desmesurado, la inteligencia artificial, el poder de los algoritmos y las grandes corporaciones o la biotecnología y los cambios éticos que supone. 

Sin pronunciarse sobre si más o menos que en otros territorios artísticos, Antònia Folguera, comisaria del Sónar+D, certifica que en el arte digital abundan los creadores con fuerte conciencia social y política. Las implicaciones éticas, sociales, políticas y culturales del uso y el acceso a la tecnología, señala, son por ejemplo un campo de batalla para bastantes artistas.

Ecosistema ya existente

El aterrizaje del ISEA en Barcelona se beneficia de la preexistencia de una ecosistema "muy proclive a la intersección entre el arte, el diseño, la ciencia, la tecnología y la sociedad", en palabras de Alsina. Con el Sónar a la cabeza, pero sin olvidar la Bienal de la Ciudad y Ciencia, fábricas de creación como Hangar, centros como el CCCB, el Canòdrom o el Arts Santa Mònica, ni numerosos creadores locales con prestigio internacional.

El arte electrónico en realidad se remonta a los años 90. Sus inicios son objeto de la exposición 'Orígens', muestra de la Beep Collection que acoge el Centro de Arte Cal Massó de Reus. Quien quiera ponerse al día sobre lo que se lleva hoy en el mundo del arte digital puede sumergirse en las variadas propuestas en este campo que ofrece Santa Mònica en 'La irrupció', la exposición más grande de ISEA en Barcelona con 32 obras de artistas diversos.

Integrado en el espectáculo

De hecho el arte digital lleva años mucho más integrado en el mundo del espectáculo de lo que se puede pensar. Alba G. Corral es artista visual residente en el Palau de la Música Catalana y volverá crear en directo el próximo día 14 en 'Bach & forward', junto al pianista Marco Mezquida y el organista Juan de la Rubia. El arte digital le permite interactuar con ambos músicos pintando desde su computadora, jugando con proyecciones que le sirven para "añadir una capa más, aunque parezca imposible, a un edificio tan recargado como el Palau", apunta. Transformarlo sin lastimar el centenario edificio, aportando una representación visual a la música de Mezquida y De la Rubia, improvisando, como ellos, a partir de Bach.

"Tengo muchas ganas de volver al Palau con la experiencia adquirida el año pasado", señala la artista, que en lugar de pinceles utiliza números y algoritmos. Ella, que vive en La Ràpita (Tarragona), colabora también con ISEA con un 'mapping' en la Casa Navàs de Reus, finca modernista diseñada por Lluís Domènech i Montaner, el mismo arquitecto del Palau. "Construir algo sobre un edificio es pura artesanía", destaca. Y los coleccionistas lo valoran, basta ver los 1,3 millones de euros alcanzados en subasta por 'Casa Batlló: Living Arquitecture', el reciente NFT viviente creado por Refik Anadol.

Para G. Corral uno de los 'highlihts' del simposio es la presentación de Google DALL.E, que permite crear imágenes a partir del texto de la búsqueda. "Es una herramienta revolucionaria", comenta. Sus creadores tenían interés en participar en ISEA para conectar con el colectivo artístico. Su 'feedback' es clave para seguir investigando y mejorando nuevas versiones.

Tras Barcelona, París tomará el año próximo el relevo como sede del ISEA.

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