Videojuegos

La escasez de componentes para Xbox Series X y PS5 podría extenderse hasta 2023

Las consolas de última generación de Sony y Microsoft están sufriendo escasez de stock desde que fueron lanzadas

Las consolas de última generación de Sony y Microsoft están sufriendo escasez de stock desde que fueron lanzadas

Elric Ruiz / Elsotanoperdido

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Desde la misma fase de lanzamiento de PlayStation 5 y Xbox Series X|S a finales del pasado año, los usuarios están sufriendo dificultades para encontrar cualquiera de los dos sistemas de nueva generación en los mercados de varios países del mundo, situación que se mantiene a poco tiempo para cumplirse un año desde su estreno comercial. Y lo peor: la falta de provisión de consolas de nueva generación puede estar lejos de terminarse. Al menos, esto indica un informe de Toshiba.

El fabricante con sede en Minato, Tokio, es uno de los mayores productores mundiales de los chips de potencia que se utilizan en diversos productos cotidianos, desde la electrónica de nuestros automóviles hasta la mayoría de electrodomésticos que encontramos en casa. La falta de componentes es el principal causante de la masiva ralentización en la producción de muchos de estos dispositivos electrónicos.

La escasez de chips, principales culpables

Takeshi Kamebuchi, director de Toshiba, afirma en Bloomberg que el suministro de chips estará restringido hasta, al menos, septiembre de 2022, y en el mejor de los casos, algunos clientes de la empresa japonesa tendrán que esperar a 2023 para recibir la totalidad de sus pedidos. “Consideramos qué cliente se enfrenta a una situación más grave, como el riesgo que interrumpa toda la línea de producción o se destruya el negocio sin el suministro de chips. Los fabricantes de consolas de videojuegos se encuentran entre los clientes que presentan más demanda y lamento sinceramente su frustración, ya que ninguno de ellos estará 100% satisfecho”, advierte Kamebuchi.

El director de Toshiba, deja patente con estas declaraciones que la empresa ha estado analizando las demandas y necesidades cliente a cliente, con la intención de que ninguna empresa corra el riesgo de perder su negocio empujado por la escasez actual de componentes. Hay varios tipos de productos electrónicos que demandan reguladores de potencia y probablemente en opinión de Toshiba, sus necesidades se encuentran por delante de los fabricantes de videoconsolas, de manera que todo parece indicar que no será hasta 2023 cuando se comience a regularizar la producción de los sistemas de nueva generación.

La escasez de videoconsolas de nueva generación continuará

Las consolas, por tanto, terminarán siendo prisioneras de la disponibilidad del preciado componente ya que, a pesar de abrirse la posibilidad de buscar otros proveedores, existen varias certificaciones de seguridad que se exigen para montar estos chips, algo que les obliga a depender de los fabricantes que cumplen con todas las regulaciones. Y no son tantos.

Actualmente en nuestro país, la única consola que se puede encontrar con cierta facilidad es Xbox Series S, mientras que PlayStation 5 suele lanzar algunas unidades todos los meses, abasteciendo la demanda pausadamente; pero si te propones hacerte con una Xbox Series X, lo vas a tener realmente muy complicado, porque en estos momentos es un artículo tecnológico realmente demandado y deseado.