Acción

Borrón y cuenta nueva Iron man 3

Javier Cámara y Candela Peña, en una escena.

Javier Cámara y Candela Peña, en una escena.

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Secuela tanto deIron man 2(2010) como deLos vengadores(2012), esta tercera entrega rejuvenece la serie a la que pertenece jugueteando con las convenciones de su héroe y del género. De hecho, Shane Black a ratos parece más interesado en homenajear su obra previa -el guion deArma letal(1986); la comedianoir Kiss Kiss Bang Bang(2005)- que en construir una historia coherente.

Pese a esas florituras, y a lo bien que Black se lo pasa manejando asuntos como la ingeniería genética, el terrorismo y la manipulación mediática, el triunfo deIron man 3 está en cómo se despoja de ciertos excesos, sobre todo ofreciendo una versión más desnuda de su protagonista: Tony Stark es un tipo vulnerable, que ha perdido su armadura, al amor de su vida y su voluntad para salvar el mundo.

Puede que, en última instancia, la exploración de su psique no vaya muy lejos, y que los esfuerzos por aludir tanto aEl caballero oscuro -aunque las referencias al mundopos-11-Sson solo un chiste- como a losactionersde los 80 como al concepto deblockbustermoderno hacen que la película, como el nuevo traje de su héroe, resulte un mero conjunto de piezas no siempre bien encajadas. Pero en todo caso el resultado combina inteligencia, espectáculo e ingenio de un modo nunca antes visto en la serie. NANDO SALVÀ

Shane Black