Oryzon se refuerza con una sede en EEUU

La catalana Oryzon ha dado un nuevo salto en su trayectoria al estrenar sede en la ciudad de Cambridge, Massachusetts, EEUU, la capital biotecnológica de ese país. La compañía creó la filial estadounidense en julio pasado y espera que en el primer trimestre del año que viene, con las instalasciones a pleno rendimiento emplee entre el 15% y el 20% de toda la plantilla.

El consejero delegado del grupo, Carlos Buesa, asegura que este salto «es el paso natural en el proceso de maduración de la compañía», así como en su internacionalización. Oryzon, líder en epigenética (lo que influye en cómo se regulan los genes), cuenta con fármacos propios en fases clínicas. La compañía, fundada en el 2000 por Buesa y Tamara Maes, se convirtió en una historia de éxito en la biotecnología española tras sellar en abril pasado un acuerdo con la farmacéutica suiza Roche. El pacto incluye la comercialización de fármacos para combatir el cáncer a partir de las investigaciones de la firma catalana.

Dos sociedades

Este acuerdo dio un fuerte impulso a la compañía catalana. La apertura de la sede en EEUU, desde donde impularán su negocio en el continente americano, consolida una firma que decidió desdoblarse en dos sociedades: una dedicada al diagnóstico, actividad para la que resulta más fácil atraer inversión; y otra en las terapias.

Buesa no descarta recurrir a la bolsa internacional en el futuro, aunque aún no hay nada decidido sobre esta cuestión. Todo dependerá de la evolución de los mercados.

Además de los fundadores, Buesa y Maes, la empresa biotecnológica tiene como accionistas al fondo Najeti Capital, con más del 30%; y otros socios en su capital como la farmacéutica Ferrer, Laboratorios Ordesa y Josep Maria Echarri, socio director de Inveready.