Este es el verdadero culpable de que el olor a nuevo de los coches desaparezca

La certeza de que un coche es nuevo no solo se obtiene a través de los ojos. Si bien es cierto que el brillo de las piezas que recubren el chasis y un interior impoluto son claros indicadores de que un vehículo acaba de salir del concesionario, no hay nada como percibirlo a través del olfato. El "olor a nuevo" del que tanto se habla.

Este aroma, como cualquier otro, no es más que el resultado de un cúmulo de sustancias químicas liberadas por los materiales recién estrenados del automóvil. Así lo establece el portal 'How Staff Works', que atribuye esta fragancia a pinturas, plásticos y otros componentes del coche.

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¿De dónde sale el 'olor a nuevo'?

Según el citado medio, el aroma tan característico que desprenden los coches nuevos proviene de los entre 50 y 60 compuestos orgánicos volátiles (COV) que alberga el vehículo en su interior. Tolueno, estireno, xileno o trimetilbenceno son algunos de los hidrocarburos de esta clase que menciona el artículo en cuestión, y que se hallan en pinturas, combustibles y otros disolventes presentes en las piezas que configuran el automóvil.

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¿Por qué desaparece?

Tan cierto es que este intenso olor es agradable para la mayoría de gente como que su efecto es de lo más efímero. Más que a factores externos, esta decaída se debe esencialmente al proceso de rápida degradación que experimentan los COV con el paso del tiempo. "Los propietarios de automóviles nuevos pueden esperar un deterioro de alrededor del 20% cada semana", informan desde el citado medio. Asimismo, la entrada de aire a la cabina (si bajamos las ventanillas, por ejemplo) suele acelerar este proceso.

Así pues, en este caso, podríamos decir que los COV son tan responsables de la aparición de 'olor a nuevo' como culpables de su rápida desaparición.