Investigación

Las depuradoras contaminan los mejillones de río, alerta un estudio

Los tejidos y los caparazones de estos bivalvos reflejan todo lo que hay en el cauce, incluso partículas radiactivas, microplásticos y compuestos químicos

Ejemplares de mejillón de río.

Ejemplares de mejillón de río. / Paz Ondina

Ramón

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Viven enterrados en lechos de ríos y arroyos y rara vez se mueven durante su vida. Los mejillones de río, también conocidos como náyades o almejas de agua dulce, son biomonitores: revelan el estado de su entorno. Los tejidos internos y los caparazones de estos bivalvos, que se alimentan de materia orgánica y filtran el agua que los rodea, reflejan todo lo que hay en el cauce, incluso partículas radiactivas, microplásticos, compuestos químicos sintéticos y otros contaminantes

Un grupo de investigadores de la Universidad de Pensilvania, en Estados Unidos, analizó la composición de los mejillones que viven aguas abajo de una instalación depuradora que había filtrado durante al menos dos décadas aguas residuales de una fábrica del sector del petróleo y el gas.

Los científicos descubrieron que, incluso años después, el tejido y las conchas de los mejillones, entre otros contaminantes, contenían radio y otras sustancias procedentes de esa industria. Ello a pesar de que las plantas de tratamiento eliminan los principales contaminantes, incluido el radio, antes de devolver el agua a los ríos.

En teoría, el agua devuelta al cauce por las estaciones depuradoras de aguas residuales está limpia. En la práctica no es así, según refleja esta investigación.

Porque incluso años después de cerrada la industria, el agua tratada todavía contiene trazas de contaminantes y es de cinco a diez veces más salada que la del océano. "Con una salinidad mucho mayor que la del entorno circundante, el agua descargada tiene una huella química diferente a la que están acostumbrados los mejillones", apunta Nathaniel Warner, autor del estudio.

Mejillón de agua dulce.

Mejillón de agua dulce. / Westcott Phillip

"Los mejillones que estaban más cerca de los vertidos de agua murieron. Más abajo, los mejillones encontraron una manera de tolerar la salinidad y los materiales radiactivos y los absorbieron en sus conchas y tejidos", añade el científico.

Microplásticos y otros contaminantes

Aunque otras aguas residuales depuradas no contienen generalmente muchas partículas radiactivas, sí que presentan microplásticos y otros contaminantes, que están afectando a la fauna y la flora acuáticas.

"Junto con los nutrientes, los mejillones también filtran contaminantes presentes en la columna de agua, como metales, microplásticos, compuestos químicos sintéticos y otros contaminantes emergentes preocupantes", destaca Katharina Pankratz, primera autora del estudio, publicado en la revista "Science of the Total Environment’.

Los biólogos autores del experimento identificaron las especies estaban presentes en el río y a continuación recolectaron al azar mejillones de cuatro lugares a lo largo del cauce. 

Descubrieron que medio kilómetro aguas abajo de la estación de tratamiento de aguas residuales, estas depuradoras naturales de los hábitats acuáticos tenían aproximadamente el doble de niveles totales de radio que los que residían aguas arriba del sitio de descarga. Los mejillones que vivían cinco kilómetros aguas abajo del lugar de descarga tenían menos radio que los mejillones más cercanos al lugar, pero aun así tenían una cantidad mensurable de este elemento radiactivo.  

Almejas de agua dulce.

Almejas de agua dulce. / Joel Berglund

La exposición a la radiación se mide en unidades de dosis conocidas como micro-Seiverts (μSv). Los investigadores compararon la radiactividad de los mejillones muestreados con las nueces de Brasil, que absorben la radiación del suelo en el que crecen.

Una porción de 28 gramos de nueces de Brasil contiene entre 0,47 y 0,80 μSv, mientras que el valor máximo calculado para un solo mejillón recogido por los investigadores en el estudio fue de 63,42 μSv. El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) recomienda que las personas limiten su exposición anual a no más de 1.000 μSv. Cualquier exposición adicional puede provocar problemas de salud.  

Impacto en la cadena alimentaria

"Dependiendo del contaminante y su química, si es lo suficientemente pequeño como para pasar a través de las branquias del mejillón, tiene el potencial de acumularse en su tejido o precipitarse dentro de la estructura de cáscara dura", subraya Pankratz. 

Un problema añadido: las especies más grandes que residen o actúan a lo largo de los ríos, como las aves acuáticas o las nutrias, comen regularmente mejillones de agua dulce, lo que significa que la contaminación puede pasar a la cadena alimentaria, alerta Pankratz.

"Esto genera preocupación sobre los posibles impactos en otras formas de vida acuática, particularmente en las especies en peligro de extinción más vulnerables a los contaminantes", destaca la científica. Algunos estudios señalan que las náyades suponen el 90% de la biomasa de los lechos de ríos y lagos.

"Esta información puede ayudar a dar forma a futuras regulaciones para la eliminación de aguas residuales en aguas superficiales, especialmente en regiones donde se recolectan mejillones como alimento para el ser humano. Espero que este estudio inspire más investigaciones sobre las consecuencias ecológicas de los desechos en los ríos todo el mundo", indica Pankratz.

Mejillón de agua dulce.

Mejillón de agua dulce. / Francisco Welter Schultes

Los mejillones de río, que tienen una esperanza de vida de más de un siglo, están presentes en todos los continentes. Existen unas 900 especies diferentes, muchas de ellas amenazadas por la degradación de sus hábitats, el cambio climático y la sobreexplotación.

En España solo se encuentran densidades importantes de estos animales en Galicia y en Asturias. Casi han desaparecido por completo en la cuenca del Duero. Uno de los problemas de los mejillones de río es que dependen de la existencia de salmones o truchas, únicos hospedadores de sus larvas. Y las poblaciones de truchas y salmones han descendido drásticamente en las últimas décadas.

Informe de referencia: https://linkinghub.elsevier.com/retrieve/pii/S0048969724022940

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