Juegos Olímpicos

¿Y tú qué hacías con 15 años? Naia Laso se va de París con un diploma olímpico

La 'skater' de Bermeo, la más joven de la delegación española, termina en el séptimo puesto en la final de 'park' pese a lesionarse en los clasificatorios: "He competido infiltrada"

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Lo normal con 15 años es ganar un diploma de cinturón azul de karate, de algún concurso de ciencia en el instituto o de haber superado satisfactoriamente el B2 de inglés de la escuela de idiomas. Pero no un diploma olímpico. No, no es normal, por mucho que Naia Laso, la deportista más joven de la delegación española en estos Juegos, haya demostrado este martes que es posible. La ‘skater’ vizcaína de Bermeo ha conseguido la séptima posición en la modalidad de park, en el corazón de París, con la Torre Eiffel y el Grand Palais vigilando desde el fondo como espectadores de lujo.

En una disciplina que abraza como ninguna la precocidad adolescente, que se estrenó en Tokio con el oro de una japonesa de 13 años llamada Momiji Nishiya, que este martes coronó en París a la australiana de 14 años Arisa Trew, Laso ha cumplido el sueño que tenía desde que a los 11 años, hace apenas cuatro, participó en su primera competición. Desde entonces, con esos calcetines de Baby Yoda que le regaló su madre y que le sirven como amuleto, un crecimiento bajo la etiqueta de niña prodigio que ha encontrado su clímax olímpico en París.

Laso, la séptima mejor del mundo

“¿Qué hacías tú con 16 años?”, fue la frase que se popularizó durante la Eurocopa de fútbol a cuenta de la explosión meteórica de Lamine Yamal en el torneo ganado por España. Naia Laso ve la apuesta y la sube. Ella con 15 años, aunque ni siquiera tenga todavía página en la Wikipedia en español (faltan horas para que suceda), apenas cinco párrafos mal contados en la versión en euskera, podrá presumir de que unos meses atrás consiguió coronarse como la séptima mejor 'rider' del mundo.

Naia Laso compitió lesionada en la final de skate park.

Naia Laso durante la competición. / EFE

"Oso ondo" ("muy bien" en euskera), le dijo el seleccionador, Alan Goikoetxea, por la mañana, cuando consiguió la clasificación para la final en su segundo intento. Clasificarse para la final de la tarde ya fue un éxito para la pupila de Danny León, que este miércoles buscará la medalla en esta misma modalidad de 'park', en las que los 'riders' tienen tres intentos de 45 segundos para hacer sus mejores acrobacias en el 'bowl' sin caerse de su patín. La mejor puntuación de los tres intentos es la que cuenta para el resultado final.

Ha competido infiltrada

El problema de la matinal fue que Laso sufrió una lesión en la espalda que le iba a condicionar en la final. "Sé que podría haber hecho más, pero en las clasificatorias me ha dado un tirón en la espalda. Me han infiltrado y estaba algo mejor, pero me dolía bastante", decía luego la chica, risueña y sobre todo feliz por haber alcanzado su primera final olímpica.

En la final, Laso falló su primera tentativa cuando apenas quedaban siete segundos para que se agotara su tiempo. Apenas duró 11 sobre la tabla en el segundo. En el tercero, dio la sensación de no arriesgar demasiado, de querer irse de París con un ejercicio completo, aun cuando eso no le sirvió para sacar medalla. "He ido a asegurar, a por un puesto, a hacer una ronda para quedarme contenta", confirmó después. Al final, lo consiguió con una puntuación de 86,28 que le sirvió para acabar séptima, misma posición que en la clasificación.

Naia Laso, en plena competición.

Naia Laso, en plena competición. / EFE YOAN VALAT

Una difícil puesta a punto

Un gran resultado y más teniendo en cuenta que, en mayo, su preparación sufrió un revés. Durante unos entrenamientos, Laso se rompió la clavícula. Su participación en París no estaba a priori en riesgo, pues su condición de cuarta en el ránking mundial le garantizaba el billete olímpico sin necesidad de tener que hacer más méritos. Tenía, no obstante, que participar en la serie de clasificación olímpica de Shanghai para validar el pasaporte. Y allí se presentó la vizcaína, con el brazo en cabestrillo, para subirse a su tabla y darse una vuelta por el ‘park’.

Con esto fue bastante para estar en La Concorde, este parque temático de los nuevos deportes olímpicos que concentra el baloncesto 3x3, el ciclismo BMX, el breaking y el skate, pero la lesión complicó su puesta a punto. Las molestias en la zona lumbar que ha arrastrado en los últimos días tampoco le han ayudado a pelear por la medalla. Pero se va de París con un diploma. Al fin y al cabo, ¿qué estábamos haciendo los demás con 15 años? Competir en unos Juegos Olímpicos seguro que no.