Judo

Mosakhlishvili y Ai Tsunoda acarician más medallas para España

El hispano-georgiano se clasifica para las semifinales (-90kg) y la ilerdense aún opta al bronce por la vía de la repesca

Mosakhlishvili, de azul, en su triunfo contra Sherov en París.

Mosakhlishvili, de azul, en su triunfo contra Sherov en París. / EFE

Francisco Cabezas

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El Campo de Marte de París podría ser nueva tierra prometida. La delegación española está centrando su atención en el judo en estos Juegos Olímpicos. Después del primer bronce que se colgó Fran Garrigós (-60kg), quienes optarán en la tarde de este miércoles a nuevos metales serán el hispano-georgiano Tristani Mosakhlishvili (-90kg) y Ai Tsunoda, nacida en Lleida, de padre japonés y madre francesa.

Mosakhlishvili, a quien llaman Tato, nacionalizado español por carta de naturaleza en enero de 2022, se clasificó para las semifinales en una matinal en la que venció sus tres combates con una notable superioridad. Tras vencer al tayiko Komronshoj Ustopiriyon, al kirguís Erlan Sherov (vigente bronce mundial) y al brasileño Rafael Macedo, Tato, residente en Vigo, se clasificó para las semifinales de la tarde del jueves (a partir de las 16.00h) en el pabellón prefabricado del Campo de Marte.

Allí, en el paso previo a la medalla, se enfrentará, sí, a otro judoca nacido en Georgia, Lasha Bekauri. No lo tendrá sencillo. Bekauri es el vigente campeón olímpico, oro en los pasados Juegos de Tokio. Para Tato, en cambio, son los primeros Juegos.

La judoca ilerdense Ai Tsunoda, en su combate con Matic en París.

La judoca ilerdense Ai Tsunoda, en su combate con Matic en París. / Ap

El camino de Ai Tsunoda

También continúa luchando por las medallas Ai Tsunoda, cuya determinación obliga a seguir teniéndole en cuenta. La deportista de 22 años, con su característica cabeza rapada, ha tenido una vida marcada por el judo. Su padre, Go Tsunoda, hijo de otro judoca, dirigió al equipo británico en los Juegos de Londres, además de a Portugal y a judocas rusos. Su madre, Céline Roustant fue campeona de España en 2011. Ai, criada en el 'dojo' que sus padres abrieron en Lleida, aún aspira a bronce. Aunque por la vía de la repesca.

Tras vencer a la polaca Pogacnik en octavos (lo que le aseguró la repesca), perdió en cuartos contra la croata Barbara Matic, doble campeona del mundo. Para lograr el bronce, Tsunoda tendrá que ganar dos combates, el primero ante la japonesa Saki Niizie, campeona del mundo en 2023. De salvar el primer obstáctulo, podría enfrentarse a una de las grandes ídolos locales, la francesa Marie-Ève Gahié, triple medallista mundial.