Entrevista

Ambros Martín, seleccionador de balonmano femenino: "Shandy es la líder sonriente del equipo"

El seleccionador pide a las Guerreras que afronten los Juegos con responsabilidad, pero con las mochilas vacías de presión

Ambros Martín está satisfecho con el trabajo realizado

Ambros Martín está satisfecho con el trabajo realizado / EFE

David Rubio

David Rubio

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Ambros Martín llegó al banquillo español el pasado mes de septiembre con el objetivo de lograr una clasificación olímpica que no se pudo sellar en el Mundial de diciembre y que sí se consiguió con muy buena nota en el Preolímpico disputado en la localidad alicantina de Torrevieja.

En aquella cita mundialista, el grancanario apenas llevaba dos meses al frente del equipo. Ahora valora muy positivamente la evolución que ha tenido el equipo como colectivo y el trabajo para ensamblar las nuevas piezas con otros referentes históricos como Shandy Barbosa.

España ya vela armas en París de cara a un torneo en el que debutarán un día antes de la Ceremonia Inaugural en un duelo ante Brasil que podría determinar su futuro en un grupo de seis equipos en el que los cuatro primeros accederán a cuartos. El seleccionador español conversó con SPORT sobre sus sensacionales y las opciones de las 'Guerreras'.

Uno de los motivos por los que dijo ‘sí’ a la Federación fue su deseo de estar en unos Juegos Olímpicos… Pues faltan

Si, muy cerca. Estoy contento, porque se ha podido conseguir entre todos el objetivo de estar en los Juegos. El otro día hablaba con las jugadoras que a veces olvidamos lo afortunados que somos por poder estar en estos Juegos después de que no lográsemos clasificarnos en el Europeo y ni en el Mundial. Lo vamos a coger con más ganas todavía. Van a estar los mejores de todas las disciplinas y queremos ser parte de esos mejores. Nos hemos preparado a conciencia y ya estamos en la rampa de salida con ilusión por el buen trabajo realizado.

En el Mundial me di un golpe de realidad importante

¿Llegó a tener dudas después del Mundial?

Dudas no, pero me dio un golpe de realidad importante. Sé cómo funciona esto. Teníamos muchísimas expectativas, porque estábamos entrenando muy bien y creíamos que podríamos llegar lejos, pero en el partido clave contra la República Checa no tuvimos el día. Fallamos, pero en el Preolímpico contra el mismo rival dimos un recital. Nos falta regularidad, estamos sentando la base de nuestro juego con jugadores que han sido, son y serán importantes y con jóvenes con cierta inexperiencia. El objetivo es seguir asentando esas bases para sacar adelante los partidos incluso no teniendo un buen día.

¿Está satisfecho con la evolución del equipo?

Sí, veo ganas y hambre de poder hacer algo grande sin ponernos límites. Sabemos que hay equipos superiores que nos llevan años de ventaja, pero veo cada día cómo entrenamos y nos veo capaces de competir cara a cara contra cualquiera. Lo estamos poniendo todo para poder hacer gran papel.

¿El nivel de los primeros 45 minutos del Preolímpico contra Países Bajos se acerca a lo que quiere conseguir?

Aquel día ya estábamos clasificados y se ofreció ese gran nivel porque competimos sin ningún tipo de presión. Ese tiene que ser siempre nuestro verdadero nivel y para eso necesitamos muchísimos entrenamientos conjuntos y repetidos que no tenemos. Estas tres semanas y media han sido muy importantes y hemos visto un avance notable no solo de cara a los Juegos, sino también pensando en el futuro. Algunas que no irán a los Juegos han adquirido una experiencia que nos servirá para ir acortando su tiempo hasta estar entre las mejores.

Alicia Fernández es un ejemplo silencioso para todo el que quiera estar en el equipo nacional

¿Cómo está Alicia Fernández?

Es una pena, porque es un ejemplo silencioso para todo el que quiera estar en el equipo nacional. Lo tengo que decir, ha sacrificado buena parte de sus cuatro o cinco semanas de vacaciones y mucho tiempo en su club para ir a un centro especial en Madrid y poder estar en los Juegos. Es una desgracia que se lesionó en un mal gesto. Con este tipo de jugadoras vamos a contar siempre por lo que sacrificado para ayudar al equipo y por lo importante que es. Además, podrían ser sus últimos Juegos. Estará aunque sea sin piernas o sin brazos. Lamentablemente no al nivel físico que ella y todos querríamos, pero sigue trabajando para estar lo mejor posible.

Debutan el jueves contra Brasil (11.00 horas) en un partido que podría ser clave.

Es posible que sí y también que no. Al principio todos estamos muy igualados y con las fuerzas muy parejas. Brasil y Angola son rivales muy peligrosos sobre todo al principio, que es cuando nos ha tocado jugar contra ellas. Brasil puede ser clave, pero creo que muchos equipos perderemos partidos. El resultado podría no depender de lo que pase en ese partido.

Supongo que están trabajando el tema de las pérdidas…

Sí, desde el primer momento, porque es clave. Lo hemos hablado, pero no solo para intentar corregirlo. También para que si las tenemos, sepamos hacer algo en defensa para contrarrestarlas. Está hablado, trabajado y la gente está muy concienciada de que hay que limitarlas y que también hay recuperar en defensa esas posesiones perdidas.

¿Cuál es el objetivo?

El objetivo es Brasil. Llegar bien y competir contra todos los rivales, empezando por Brasil y acabando por Francia. No pongo ningún objetivo de máximos a un equipo que tiene que estar feliz por estar en los Juegos. Es nuestra fuerza, ninguna presión añadida. Sabemos cómo hacer el mejor balonmano que podemos hacer y nuestra intención es brindárnoslo a nosotras y a todos a los que nos sigan.

A mis jugadores les pediría que vayamos con las mochilas cargadas de equipaje y que no llevemos ningún peso extra

¿Qué les aporta Shandy Barbosa?

Es la alegría personificada. Es más que una jugadora, es una líder sonriente que aporta experiencia, calidad y asume los momentos importantes con naturalidad. El simple hecho de tenerla nos hace estar más tranquilos a todos.

¿Qué pediría a sus jugadores?

Que vayamos con nuestras mochilas cargadas de zapatillas, de equipaje y que no llevemos ningún peso extra. Que seamos capaces de mostrar nuestro mejor juego. Que todos desde mí hasta el último del cuerpo técnico o de los aficionados en la grada seamos capaces de competir a nuestro máximo nivel, que quizá no lo hemos alcanzado todavía. Si nos liberamos, lo conseguiremos.