Relaciones entre Pekín y Washington

China critica la millonaria ayuda estadounidense al Ejército de Filipinas

El secretario de Defensa de EEUU, Lloyd Austin (izquierda), y el secretario de Estado, Antony Blinken (derecha)

El secretario de Defensa de EEUU, Lloyd Austin (izquierda), y el secretario de Estado, Antony Blinken (derecha) / Europa Press/Contacto/Chris Kleponis - Pool via CN

Adrián Foncillas

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Estados Unidos no es parte del Mar del Sur de China y carece de derecho para intervenir en los asuntos de los que lo son. La precisión geográfica ha llegado el miércoles del Ministerio de Exteriores chino tras la lluvia de millones que ha recibido Filipinas, última bofetada que ha sufrido Pekín en la febril campaña diplomática de funcionarios de la Casa Blanca por Asia Oriental.

Washington concederá 500 millones de dólares a Manila para que modernice su Ejército y su Guardia Costera en un contexto de crecientes choques con China. Lo ha desvelado en la capital el secretario de Estado, Antony Blinken, y el secretario de Defensa, Lloyd Austin, tras reunirse con el presidente filipino, Ferdinand Marcos Junior, y sus homólogos, Enrique Manalo y Gilberto Teodoro.

"La mayor inversión en toda una generación", ha precisado Austin. "Carece de precedentes y envía un claro mensaje de apoyo de la Administración Biden-Harris, del Congreso y del pueblo americano", ha añadido. "Cada dólar o peso invertido en fortalecer nuestras capacidades para defendernos y disuadir a las agresiones ilegales son un plus contra China o cualquier otro país", se ha congratulado Teodoro. Washington destinará otros 128 millones de dólares este año para mejorar sus nueve bases militares de Filipinas. Es irónico que un país de pobreza dolorosa, sin infraestructuras imprescindibles y devastado recientemente por un tifón, reciba cientos de millones para su Ejército.

Fin del eqquilibrio a tres

La subida al poder de Marcos, el hijo del sátrapa y ladrón, ha finiquitado el tradicional equilibrio de Manila entre Washington y Pekín. La escasa delicadeza china en sus disputas marítimas también ha ayudado. Son frecuentes los choques cuando Manila abastece a las decenas de sufridos marineros que permanecen en un viejo buque sobre un banco de arena para evitar que China lo ocupe. Tras el último, un abordaje de marineros chinos con cuchillos a una lancha neumática, muchos se preguntaron en Filipinas si era ya hora de invocar el Tratado de Defensa Mutua firmado con Estados Unidos.

Pekín defiende las negociaciones bilaterales sin molestas presencias ajenas y, de hecho, un par de semanas atrás se comprometió a permitir aquellos abastecimientos. Sobre las agravadas escaramuzas en las aguas en disputa existen versiones opuestas. Para Manila, nacen en el matonismo chino; para Pekín, el apoyo estadounidense ha envalentonado a Filipinas. Un experto chino le advertía a Manila de que Estados Unidos suele sacrificar a sus pequeños aliados como peones cuando ya no le sirven para sus intereses geopolíticos. No es un recordatorio irrelevante; tampoco lo es que la pulsión china por la vía de los hechos consumados en aguas en disputa genera una comprensible inquietud en sus vecinos y facilita la estrategia estadounidense.

Vietnam, Laos y Japón

Blinken y Austin se acercan al fin de su periplo de diez días por Asia Oriental para afianzar los vínculos que ha trabajado la administración Biden. Empezaron por Vietnam, un destino neutral, y Laos, inclinado a Pekín, y siguieron en Japón. De ahí salió el compromiso de reforzar la cooperación militar para contrarrestar al "mayor reto de Asia y el mundo entero". La cumbre del QUAD, una organización apadrinada por Washington que cuenta con Japón, Australia e India, aludió un día después a la "seria preocupación por las acciones unilaterales que intentan cambiar el statu quo por la fuerza".El miércoles, Filipinas y el jueves acaban en Singapur.

La lectura diaria de la prensa china sugiere un cabreo catedralicio. Pekín, al fin y al cabo, no firma alianzas en el patio trasero estadounidense con Venezuela, Cuba u otros países afines. "Aunque dice Estados Unidos que promueve la paz regional y el orden internacional, en realidad forma bloques, fomenta las asociaciones excluyentes, manipula los juegos políticos y genera confrontaciones", señala un editorial del diario 'China Daily'. "Ya que nada le gusta más a Estados Unidos que las aventuras militares, a pesar de su tendencia a acabar en desastre, no hay buenos augurios en la región a menos que sus aliados lo mantengan controlado", termina.