Kamala Harris consolida los apoyos y acaricia la nominación demócrata

Con la sonrisa que Donald Trump usa para insultarla y exudando confianza, la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, ha participado este lunes en la Casa Blanca en el primer acto público desde que la víspera el presidente Joe Biden anunció su renuncia a ser candidato demócrata para las elecciones de noviembre y la señaló como su favorita para tomar el relevo en esa carrera contra el expresidente republicano.

No era para menos. Harris, que ha pasado 24 horas trabajando sin descanso para afianzar el camino hacia esa nominación, ha tenido éxitos considerables en este momento decisivo. Este lunes lograba uno de los respaldos más importantes, el de la expresidenta de la Cámara de Representantes Nancy Pelosi, una de las figuras más poderosas e influyentes entre los demócratas que inicialmente había propuesto un proceso competitivo, una especie de miniprimarias, para decidir el relevo de Biden.

Pelosi abandonaba esa idea. Y no solo daba su apoyo a Harris, sino que lo hacía con “inmenso orgullo y optimismo ilimitado”. “Mi entusiasta apoyo es oficial, personal y político”, dijo en su comunicado. “Tengo plena confianza de que nos llevará hasta la victoria”.

A la hora de escribir estas líneas faltaba que se sumaran a esa unidad Chuck Schumer y Hakeem Jeffries, los líderes demócratas en, respectivamente, el Senado y la Cámara Baja. A mediodía emitian un comunicado diciendo que querían respetar la voluntad expresada el domingo por Harris de "ganarse la nominación" y hablaban un proceso "de bases y transparente". Por la tarde tenían previsto mantener una reunión con Harris, que también realizaba una visita a la sede central en Delaware de una campaña dsde el domingo oficialmente rebautizada "Harris para presidenta".

En la lista de pesos pesados de la formación falta el expresidente Barack Obama, y lo mismo sucede con algunos megadonantes que insisten en que prefieren una competición.

Energía

La trifecta del Congreso era la guinda de 24 horas fundamentales para Harris, que se ha subido a una ola de entusiasmo y energía. La situación aún es muy compleja y son complicadas tanto sus opciones contra Trump como las de los demócratas frente a los republicanos en el Congreso, pero la sacudida ha sacado a la formación de la parálisis y agónica crisis que llevaba viviendo tres semanas desde que estalló el pánico por la continuidad del octogenario y debilitado Biden.

La campaña de Harris anunciaba que ha recaudado 81 millones de dólares para la candidata en esas primeras 24 horas, fondos que llegaban también a ActBlue, un grupo que recauda para los demócratas y que además de para la vicepresidenta acumulaba 30 millones en donaciones para otros candidatos.

Varias delegaciones estatales que debían trasladar a la convención de Chicago o a una votación telemática previa los votos que Biden logró en primarias autorizaban traspasar esos votos a Harris.

Harris, además, acumulaba respaldo de gobernadores y otros líderes y organizaciones demócratas estatales y locales, así como apoyos de grupos sindicales y activistas. Con muchos de ellos ha hecho un esfuerzo por hablar personalmente desde el domingo, cuando pasó 10 horas al teléfono.

Camino despejado

Fundamental también: todos los grandes nombres que sonaban como potenciales alternativas a Biden daban un paso al lado en sus aspiraciones y se unían también tras la vicepresidenta, despejando su camino. Si el domingo ya lo hicieron el gobernador de California, Gavin Newsom; el de Pensilvania, Josh Shapiro, y el secretario de Transporte, Pete Buttitieg, este lunes se sumaban el senador de Arizona Mark Kelly y los gobernadores de Michigan (Gretchen Whitmer), Kentucky (Andy Beshear), Illinois (J.B. Pritzer), Carolina del Norte (Roy Cooper). Maryland (Wes Moore), Wisconsin (Tony Evers) y Minnesota (Tim Waltz).

La mayoría de esos nombres, y especialmente los de Shapiro, Beshear, Cooper y Kelly, se barajan ahora como potenciales compañeros de ticket en la candidatura de Harris, y es señal de la práctica certeza que rodea a la nominación de la vicepresidencia que buena parte del escrutinio se ha vuelto hacia esos potenciales aspirantes a vicepresidente.

Loas a Biden

Todo ayuda a entender cómo apareció Harris en el acto de la Casa Blanca, en el que ha desempeñado el papel que habría jugado Biden si no siguiera en su casa en Rehoboth Beach (Delaware), donde se ha aislado desde su contagio de covid el miércoles pasado. Y en esa aparición, la vicepresidenta no ha hecho mención directa a la nueva situación y ha optado por solo cumplir con su papel oficial en un acto ceremonial, aunque todos los focos están puestos en ella en un momento en que cada uno de sus pasos y sus palabras son oportunidad de volver a presentarse ante los ciudadanos estadounidenses.

Su breve intervención en la recepción para los campeones de deporte universitario, no obstante, se enmarca obligatoriamente en los movimientos sísmicos de las últimas horas. Y ahí Harris, además de dar una actualización de la situación de salud de Biden, que ha dicho que "se encuentra mejor” y “se recupera rápidamente”, ha hecho un encendido elogio del mandatario, tanto personal como político.

“Su legado de logros en los últimos tres años no tiene parangón en la historia moderna”, ha asegurado Harris, que luego ha entrado en la loa de las cualidades que, ha dicho, ha visto “cada día” en Biden.

Específicamente ha mencionado “su honestidad, integridad, compromiso con su fe y su familia, gran corazón y profundo amor por el país”.  Y ha concluido: “Soy testigo de primera mano de que cada día nuestro presidente, Joe Biden, lucha por el pueblo estadounidense, y estamos profundamente agradecidos por su servicio a nuestra nación”.

Mensajes entre líneas

Cuando se ha dirigido a los atletas, también se ha hecho inevitable leer mensajes entre líneas. “Sé que no ha sido fácil llegar a este momento. Cada uno habéis enfrentado retos y obstáculos y habéis perdurado. Habéis peleado. Y al hacerlo habéis demostrado que la verdadera grandeza requiere más que habilidad, requiere determinación y coraje”, ha dicho Harris, que ha alabado también el trabajo en equipo. “Nos recordáis a todos que lo que se puede lograr con trabajo duro y ambición y, por supuesto, ninguno habéis llegado aquí solo”.