Entender más

México se convierte en la plataforma del espionaje ruso en el continente americano

Tras el inicio de la guerra de Ucrania, la turística Cancún es la base de la numerosa y discreta comunidad rusa en México, entre quienes se encuentran prominentes propagandistas pro-Kremlin en lengua hispana como Daniel Estulin

Mientras las autoridades mexicanas aceptan sin problemas incrementar el número de diplomáticos rusos, decenas de miles de rusos, algunos de ellos agentes de los servicios secretos, intentan entrar ilegalmente en EEUU desde el vecino del sur

Claves de la elección en México: todo (o casi todo) el poder para Morena

Turistas rusos en dificultades para retornar a su país desde el Caribe mexicano. // Efe MEX7367. MONTERREY (MÉXICO), 05/03/2022.- Turistas de origen ruso a la espera de abordar un avión de regreso a su país de origen hoy, en el aeropuerto internacional del balneario de Cancún, estado de Quintana Roo (México). Más de 400 turistas rusos salieron esta tarde del aeropuerto Internacional de Cancún, Caribe mexicano, con destino al aeropuerto Sheremetyevo de Moscú, la mayoría de ellos tuvieron que permanecer más tiempo del esperado en el destino debido a la cancelación de vuelos por el conflicto armado entre Rusia y Ucrania que ya cumple poco más de una semana. EFE/Lourdes Cruz

Turistas rusos en dificultades para retornar a su país desde el Caribe mexicano. // Efe MEX7367. MONTERREY (MÉXICO), 05/03/2022.- Turistas de origen ruso a la espera de abordar un avión de regreso a su país de origen hoy, en el aeropuerto internacional del balneario de Cancún, estado de Quintana Roo (México). Más de 400 turistas rusos salieron esta tarde del aeropuerto Internacional de Cancún, Caribe mexicano, con destino al aeropuerto Sheremetyevo de Moscú, la mayoría de ellos tuvieron que permanecer más tiempo del esperado en el destino debido a la cancelación de vuelos por el conflicto armado entre Rusia y Ucrania que ya cumple poco más de una semana. EFE/Lourdes Cruz / EFE/Lourdes Cruz

Marc Marginedas

Marc Marginedas

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Residencial Aqua es una vasta urbanización de modernas y funcionales casas de dos pisos en forma de cubos superpuestos. Radicada al suroeste de Cancún, dotada de anchas avenidas bien asfaltadas y acicalada con vistosos parterres y fuentes, el acceso al complejo está restringido únicamente a los residentes gracias a una pléyade de inflexibles vigilantes que escrutan a conciencia los documentos de todo vehículo que se aproxima a la entrada principal, sita en la avenida Huayacán. El complejo residencial, además, cuenta con una particularidad adicional: concentra al grueso de la comunidad rusa asentada en la capital de la Rivera Maya, convertida en los últimos años en la principal puerta de acceso al continente americano para decenas de miles de ciudadanos rusos, muchos de los cuales ni siquiera se detienen en México y prosiguen, por razones diversas, camino a EEUU, el gran antagonista de su país de origen.

La discreción es la regla fundamental a seguir entre los miles de ciudadanos del Estado de Vladímir Putin residentes en Cancún. Se dejan ver en sus playas de aguas turquesas y en los grandes almacenes del centro comercial Wallmart, pero poco más: evitan los hoteles, y sobre todo, relacionarse con los locales. Tampoco son amigos de debatir entre ellos o con extranjeros acerca sus vidas privadas, en particular las razones de haberse instalado en esta lejana orilla del trópico caribeño, según admiten a EL PERIÓDICO residentes locales. Aunque muchos de ellos vienen huyendo del reclutamiento forzoso o de la represión desatada contra la disidencia por el régimen de Vladímir Putin, está muy extendida la convicción de que entre ellos se encuentran agentes rusos enviados por el Kremlin para realizar labores de inteligencia, no solo en tierras mexicanas, sino también estadounidenses. Una realidad que constató hace dos años ante el Senado de EEUU el jefe del Comando Norte estadounidense, Glen VanHerck, quien declaró entonces que la agencia del espionaje militar de Rusia, más conocida por su antiguo acrónimo GRU, a la que se atribuyen los envenenamientos de Serguéi Skripal y Alekséi Navalni, tenía más operativos en el país latinoamericano que en ningún otro país del mundo. "La mayor parte de los efectivos del GRU están en México", y se hallan a la búsqueda "de oportunidades para influir en EEUU", sentenció entonces.

Desde el inicio del conflicto, los responsables norteamericanos de inmigración han tenido que gestionar una oleada sin precedentes de migrantes procedentes de Rusia buscando penetrar en su territorio desde el vecino del sur. Entre enero de 2022 y abril de 2024, 166.000 rusos entraron en México, 73.000 de los cuales continuaron viaje de forma ilegal a EEUU, según datos de Aduanas y Protección Fronteriza citados por la publicación mexicana Eje Central, una cifra que contrasta con los cerca de 400 que lo hicieron dos años antes, en 2020. Este aluvión humano viene aparejado de graves problemas de seguridad: Vera Mirónova, investigadora rusa basada en EEUU, publicó el pasado año, citando a fuentes sin identificar del Departamento de Seguridad Interna (DHS) norteamericano, que 13 rusos fueron confinados y repatriados al comprobar las autoridades de EEUU que sus relatos de huida no se correspondían con la realidad, certificándose que en verdad se trataba de agentes del Estado ruso. Desde entonces, esta cifra ha crecido.

Daniel Estulin

Uno de los rusohablantes más prominentes instalados en Cancún es Daniel Estulin, bloguero, escritor y teórico de la conspiración mundial, nacido en Lituania en los años 60 aunque con pasaporte canadiense y residencia en España. Estulin, quien se vanagloria públicamente de haber trabajado en el pasado para la KGB soviética sin que ninguna fuente rusa oficial haya desmentido tal extremo, llegó a colaborar con la cadena propagandística RT y ha sido entrevistado por consolidados propagandistas prorrusos en España como el coronel Baños. Vivir en esta parte de México implica necesariamente llevar un lujoso estilo de vida y, según se deduce de su cuenta de Twitter, ha entablado una potente relación con el cantante Miguel Bosé, principal promotor del movimiento antivacunas español, una narrativa de gran potencial desestabilizador en Europa y EEUU durante la pandemia de Covid 19 y cuyo origen sitúan los expertos en desinformación en el año 2014 en Rusia, siendo impulsada posteriormente por decenas de miles de cuentas falsas radicadas también en el país de Vladímir Putin.

Daniel Estulin , durante una entrevista con EL PERIÓDICO en 2015.

Daniel Estulin , durante una entrevista con EL PERIÓDICO en 2015. / FERRAN NADEU

Ante semejantes circunstancias favorables, no es de extrañar que las autoridades rusas hayan puesto el grito en el cielo y arremetido contra sus homólogos turcos por su decisión de no aceptar ya pasajeros con pasaporte ruso en el vuelo diario de Turkish Airlines que permite una fácil conexión con escala en Estambul entre Moscú y Cancún, una vía de transporte utilizada por el 90% de los rusos que entraron en el país latinoamericano tras el inicio de la guerra. "Fue una decisión de seguridad nacional, no solo política, para EEUU, para Turquía y para México", declaró Martha Bárcena, exembajadora de México en EEUU, a la periodista mexicana Dolia Estévez. "Si hay un abuso de esos flujos y de ese tránsito de turistas para otros fines, entonces se tienen que tomar las medidas pertinentes", continuó.

Más allá de los problemas de seguridad que genera una comunidad extranjera numerosa y poco regulada procedente de un país enfrentado con buena parte del mundo, muchos funcionarios en las cancillerías de EEUU y la UE arquearon las cejas cuando trascendió, hace un año, que el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) había autorizado doblar el número de diplomáticos acreditados de la embajada rusa hasta alcanzar los 86, superando incluso al personal de la legación norteamericana en Ciudad de México, de acuerdo con el directorio diplomático público de la cancillería mexicana, pese al reducido nivel de las relaciones comerciales y políticas entre ambos países. Según fuentes diplomáticas occidentales, un buen número de estos funcionarios, que llegaron tras la masiva expulsión de personal ruso en las legaciones de países occidentales tras el inicio de la guerra, trabajan en el enorme y vigilado complejo de la legación, que ocupa toda una manzana entre las calles Gral. Benjamin Hill, Carlos B Zetina y Chicontepec, se dedican a "gestionar a sus informadores en EEUU" desde esta privilegiada posición y a "ser entrenados" en costumbres e idioma español antes de ser enviados a otro país de América Latina.

Nada más conocerse los resultados de las elecciones presidenciales y legislativas en el país, la legación anunció la apertura de los que denominó Centro de Rusia y América Latina, destinado a "promover un entorno de cooperación equitativa y sostenible" entre México, Latinoamérica y Rusia, en palabras de la propia misión diplomática. En contraste con las facilidades que encuentra Rusia para fortalecer su presencia en el país, exfuncionarios mexicanos de seguridad críticos con AMLO denuncian el laberinto burocrático que deben afrontar los nuevos agentes de la DEA, la agencia antinarcóticos de EEUU, que deben "esperar meses" para recibir acreditaciones.

Prioridad nacional: evitar la infiltración de yihadistas en EEUU

Al margen de la lucha contra el narcotráfico, la inteligencia de México ha tenido tradicionalmente como una de sus prioridades de seguridad evitar que extremistas radicales de Oriente Próximo se introduzcan en EEUU desde su territorio a través de la enorme y porosa frontera común. "En mi época, investigábamos" a los pasajeros con apellidos de nombres árabes o asiáticos recién llegados de otros países latinoamericanos y de Europa "y cotejábamos" los datos con listados de agencias de inteligencia de EEUU y otros países, rememora para EL PERIÓDICO Guillermo Valdés, al frente de los servicios secretos durante la presidencia de Felipe Calderón. "Cuando (el viajante) coincidía con las listas de sospechosos no se les permitía la entrada; llegamos a deportar" a militantes de Hizbulá", explica.

La situación se ha modificado radicalmente durante el sexenio de AMLO. El antiguo Centro de Investigación y Seguridad Nacional (CISEN) ha pasado a llamarse Centro Nacional de Inteligencia (CNI) y a ser supervisado por militares, eliminando todo vestigio de autoridad civil sobre el organismo y cayendo un tupido velo sobre sus actividades. "No sabemos nada de lo que sucede allí", subraya Valdés. Eso sí. En su (supuesta) función de prevenir infiltraciones de extremistas de EEUU, la agencia no está siendo del todo exitosa. El pasado 11 de junio fueron arrestados en Nueva York, Los Ángeles y Filadelfia 11 militantes tayikos de Estado Islámico en Jorasán, la organización extremista responsable del atentado de Moscú en abril y en el que murieron 145 personas. Habían entrado ilegalmente en EEUU desde México.

Suscríbete para seguir leyendo