Starmer consuma su acercamiento a la UE en una cumbre marcada por la inmigración y por el apoyo a Ucrania

El primer ministro británico, Keir Starmer, ha salido victorioso de su primer gran examen como anfitrión de una cumbre internacional. Su voluntad de acercar posturas con la Unión Europea tras su victoria en las elecciones generales del pasado 4 de julio ha sido bien recibida por los principales líderes europeos este jueves en el cuarto encuentro de la Comunidad Política Europea, que ha reunido a cerca de 50 representantes de países del continente en el palacio de Blenheim, en la localidad inglesa de Woodstock. Un encuentro que ha servido como carta de presentación del nuevo primer ministro y que ya ha dado sus primeros frutos con nuevos acuerdos en materia migratoria.

“Estamos ampliando la presencia británica en la sede de la Europol en La Haya para desempeñar plenamente nuestro papel en el Centro Europeo contra el Tráfico de Inmigrantes. Hemos cerrado nuevos acuerdos de cooperación con países como Eslovenia y Eslovaquia para acabar con el crimen organizado y vamos a trabajar con nuestros socios europeos para compartir inteligencia, datos y experiencia”, ha asegurado Starmer al terminar la cumbre. El primer ministro ha confirmado su intención de dar un giro a las políticas del Reino Unido en materia migratoria, con la creación de un Comando de Seguridad de Fronteras y con una mayor cooperación con los países europeos en seguridad y defensa. 

Starmer busca un acercamiento con la UE pero insiste en mantener los pilares del Brexit

Nuevas relaciones

El primer ministro quiere reiniciar las relaciones con Bruselas tras los años convulsos del Brexit liderados por Gobiernos conservadores, algo que ha sido muy bien recibido por los principales líderes del continente, incluidos el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, y por el Alto Representante para Asuntos Exteriores de la UE, Josep Borrell. “Acogemos con satisfacción el nuevo tono del Gobierno británico y esperamos colaborar con él. Estamos dispuestos a reforzar nuestra cooperación en política exterior y de seguridad”, ha dicho Borrell. Los participantes han coincidido en señalar que el carácter informal de la cumbre –exenta de la publicación de un comunicado conjunto– ha sido un factor a favor a la hora de sentar las bases de la nueva relación entre Londres y Bruselas.

Poco antes de la sesión de clausura, el primer ministro británico ha mantenido un encuentro bilateral con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. En la reunión, de unos 30 minutos de duración, Sánchez ha destacado las estrechas relaciones que unen a los dos países y se ha abierto a iniciar encuentros bilaterales periódicos con el Reino Unido, del mismo modo que ya ocurre con otros países estratégicos para España. Los dos líderes también se han mostrado optimistas de cara a un acuerdo a corto plazo sobre el futuro de Gibraltar, aunque ninguna de las dos partes ha querido fijar fechas. El presidente español considera que la buena sintonía entre los dos Gobiernos, de la misma familia política, ayudará a poner punto y final a unas conversaciones que ya tuvieron importantes avances bajo el anterior Gobierno conservador. 

Apoyo a Ucrania

Sánchez también ha mantenido un encuentro con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, y se ha sumado a los principales líderes europeos en su compromiso con Ucrania en la guerra contra Rusia. El propio Zelenski ha destacado la unión de los países europeos en esta materia, a pesar de la presencia en la cumbre del primer ministro húngaro, Viktor Orbán, quien ha mantenido una posición cercana a Rusia en el conflicto. “Europa es un continente que no se rendirá ni se venderá a los tiranos. Estamos actuando juntos, lo cual significa que Putin ha perdido su objetivo principal”, ha dicho Zelenski en el pleno de la cumbre. El líder ucraniano ha agradecido a sus socios europeos el apoyo recibido desde que comenzó el conflicto y ha destacado los avances logrados en la cumbre de la OTAN celebrada la semana pasada en Washington. 

Además de los debates en materia migratoria y sobre la guerra en Ucrania, los asistentes a la cumbre han discutido sobre la desinformación y sobre los riesgos que las noticias falsas suponen para las democracias. Un asunto en el que ha intervenido Sánchez, quien ha defendido sus planes de regeneración democrática para lograr una mayor transparencia en los medios de comunicación. Los líderes europeos se han emplazado a la próxima cumbre de la Comunidad Política Europea, que se celebrará en Hungría este mismo año, para seguir trabajando en unos asuntos que serán decisivos para el futuro del continente en los próximos años.