Presentación del pacto

La izquierda francesa unida plantea subir el salario mínimo y abolir la polémica reforma de las pensiones

¿Qué está pasando en Francia? Claves de la convulsión política a derecha e izquierda

El dirigente de La Francia Insumisa Manuel Bompard interviene, este viernes, en la rueda de prensa conjunta organizada por los partidos del nuevo Frente Popular.

El dirigente de La Francia Insumisa Manuel Bompard interviene, este viernes, en la rueda de prensa conjunta organizada por los partidos del nuevo Frente Popular. / MOHAMMED BADRA / EFE

Leticia Fuentes

Leticia Fuentes

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Este viernes, el nuevo Frente Popular formado por las izquierdas francesas ha presentado su hoja de ruta cara a las elecciones legislativas adelantadas que tendrán lugar el 30 de junio (primera vuelta) y el 7 de julio (segunda), mostrando una imagen de unión poco habitual en una izquierda que hasta ahora permanecía fragmentada.

"Vamos a apagar la llama de Reagrupación Nacional. (...) Os doy un consejo; jamás bajéis los ojos, jamás bajéis la cabeza, jamás bajéis los brazos", ha afirmado Marine Tondelier, secretaria nacional de los ecologistas, ante decenas de periodistas en la Maison de la Chimie de París. Tras un pequeño discurso que ha dado pie al inicio de esta campaña express, la izquierda ha presentado su programa electoral: eliminar la polémica reforma de las pensiones, que retrasa la edad mínima de jubilación de 62 a 64 años; parar el proyecto de ley sobre una reducción de la ayuda del paro, que endurece las condiciones para poder recibir el subsidio, o eliminar la reciente ley de inmigración, todas ellas muy contestadas en las calles. Otra de las propuestas clave es el aumento del salario mínimo de los 1.398,69 euros netos actuales a los 1.600 euros. Asimismo, plantean restablecer el impuesto a las grandes fortunas que suprimió el Gobierno. Estas medidas suponen "una ruptura total con la política de Emmanuel Macron", ha surayado el coordinador nacional de La Francia Insumisa (LFI), Manuel Bompard.

Con este anuncio, el nuevo Frente Popular llega unido a unas elecciones legislativas adelantadas y con un acuerdo sobre el reparto de las circunscripciones: LFI podrá presentar 229 candidaturas, frente a 328 en 2022, y el Partido Socialista y Plaza Pública, 175. Ecologistas y comunistas conservan las mismas, 92 y 50 candidaturas respectivamente.

Horas más tarde de presentar su programa, el Nuevo Frente popular anunció su candidato: Aurélien Rousseau. Este político abandonó el Gobierno de Élisabeth Borne en diciembre tras la aprobación de la ley de inmigración. Una decisión que ya ha despertado algunas reacciones, como la del ministro de justicia, Eric Dupont-Moretti, quien afirmó: "Rousseau tendrá que explicar por qué debe abolirse la reforma de las pensiones que negoció meticulosamente". 

Asperezas limadas

"Macron ha conseguido que las izquierdas francesas se unan. Al final tendremos que darle las gracias", se ha escuchado entre risas en la Maison de la Chimie. Las izquierdas francesas superaron este jueves sus divisiones, especialmente en temas como la guerra de Ucrania o de Gaza. El Nuevo Frente popular condena las "masacres terroristas de Hamas" del 7 octubre. 

"Lo esencial es que se haya podido hacer la unión. Tengo las divergencias conocidas, pero hay un momento en el que se va más allá de las divergencias, se va a lo esencial", ha subrayado el expresidente François Hollande, socialista moderado.

Mientras, la izquierda se une, la derecha tradicional parece que no consigue salir de la crisis, a la que les ha llevado el destituido presidente, Éric Ciotti, tras anunciar su deseo de aliarse con Reagrupación Nacional. Este viernes, el Tribunal de París ha revocado la expulsión de Ciotti como líder acordada por los barones.