Macron llama a la unión frente a los "extremos" y asume "parte de la responsabilidad" del auge de la ultraderecha

El presidente francés, Emmanuel Macron, ha lanzado este miércoles su campaña para las elecciones legislativas que tendrán lugar el 30 de junio, en primera vuelta, y el 7 de julio, en segunda, tras su debacle en las elecciones europeas frente a la ultraderecha de Marine Le Pen, que se alzó el pasado domingo con una victoria histórica (32%), con un llamamiento a sumar fuerzas frente a los "extremos" de derecha e izquierda. Asimismo, también ha asumido "parte de la responsabilidad" por el fuerte varapalo sufrido en las urnas el pasado domingo.

"Llegado el momento, antes o después, deseo que se unan los hombres y mujeres de buena voluntad que habrán sido capaces de decir 'no' a los extremos", ha declarado Macron tendiendo la mano a las fuerzas políticas moderadas, al mismo tiempo que ha atacado las propuestas de Reagrupación Nacional y el proyecto de coalición de los partidos de izquierda que incluye a La Francia Insumisa de Jean-Luc Mélenchon. 

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El mandatario francés ha considerado que son "alianzas contra natura" y que "no están listas para aplicar ningún programa". Sobre el posible acuerdo anunciado por el líder de Los Republicanos (LR), la derecha tradicional, con el partido de Le Pen, Macron ha evocado a los fundadores de LR. "Es un pacto con el diablo (...) que da la espalda a la herencia del general De Gaulle, de Jacques Chirac y de Nicolas Sarkozy", ha afirmado.

Ante tal crisis política, el mandatario ha prometido trabajar en una alianza de centristas, socialistas, conservadores y ecologistas para derrotar a la extrema derecha, porque no piensa darles "la llave del poder en 2027". También ha señalado a la izquierda por su decisión de aliarse con la extrema izquierda: "Acaba de aliarse con una extrema izquierda responsable estas semanas de (actitudes de ) antisemitismo y antiparlamentarismo".

En el apartado de autocrítica, ha interpretado que la falta de "respuestas" suficientes a las "inquietudes" de la ciudadanía se encuentra detrás del auge de los ultras de Reagrupación Nacional. "Sí, tengo una responsabilidad, tengo una responsabilidad en el hecho de que sin duda no he ofrecido respuestas lo suficientemente rápidas y radicales a las inquietudes legítimas de nuestros compatriotas", ha señalado, antes de poner como ejemplos de estas inquietudes "el malestar que existe en el campo", "el sentimiento de pérdida de control, de desposesión, los miedos que hay, y el sentimiento de degradación que hay en algunos de nuestros barrios".

La de este miércoles ha sido la primera vez en que el presidente ha aclarado su decisión de disolver la Asamblea Nacional y convocar elecciones legislativas. Una decisión que no convence a todo el mundo entre sus propias filas. 

Los sondeos hablan y Macron niega

Macron está convencido de que la ultraderecha no ganará las legislativas, y así lo ha manifestado en la comparecencia de prensa. Aunque, las encuestas no dicen lo mismo.

Los primeros sondeos sobre las próximas elecciones legislativas adelantadas dan como clara vencedora a la extrema derecha de Le Pen con un 33%-34% de apoyos, seguido de la izquierda con un 22%, y en un tercer puesto queda relegada la mayoría presidencial (19%). En estos comicios, Reagrupación Nacional conseguiría la mayoría relativa con 235 escaños, y aunque no es absoluta, es una importante victoria, ya que ganaría 146 escaños de golpe. En 2022, obtuvieron 88.

Ahora, los diputados y partidos tienen hasta el 13 de junio para depositar las candidaturas y empezar la campaña express para convencer al electorado. 

Cambios en las prioridades políticas

Según su análisis, la victoria del RN en las europeas, en las que consiguió un 31,4% de los sufragios, frente a solo un 14,6% su partido, Renacimiento, se explica por un voto de "enfado" que ha dicho haber entendido, y que se va a traducir en una serie de cambios en sus prioridades políticas, y sobre todo en una aceleración en su política de seguridad.

De hecho, ha destacado que el primer eje del programa que va a defender su mayoría es "la protección" de los "valores republicanos" con "más autoridad", lo que se va a traducir en acciones para "reducir la inmigración ilegal". Igualmente un mayor control de los menores inmigrantes no acompañados, que ha admitido que generan problemas de inseguridad en algunos lugares, "más firmeza con la violencia de los menores" y "responder al sentimiento de impunidad" con "penas más rápidas y más comprensibles".

Ha insistido en que los principios del laicismo tienen que ser centrales de forma que "nunca una religión permita salirse de las reglas de la República", en una clara alusión al islam.

Para los problemas de integración de la población de origen inmigrante, ha manifestado que la respuesta es "el universalismo republicano efectivo y exigente".

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"No hay recetas milagro"

Para el presidente francés, RN "no tiene una respuesta milagro" para la inseguridad, sino que se limita a ser "la encarnación del no".

Otros de los ejes de la campaña de su bloque, en la que ha afirmado que no tiene intención de seguir interviniendo una vez que ha fijado la línea y el método, son "la ambición ecológica y económica", "el progreso y la lucha contra las desigualdades", "vivir mejor en el día a día" o una política exterior centrada en su voluntad de seguir teniendo un papel central en Europa.

En el terreno económico, ha defendido la reforma de las pensiones que retrasa la edad de jubilación mínima a los 64 años, que sacó adelante el pasado año, y que es uno de los principales puntos de ataque de la oposición de izquierdas y de la extrema derecha, que han anunciado su intención de anularla.

Preguntado sobre cómo revertir los resultados del domingo en las legislativas, dentro de sólo tres semanas, Macron ha reconocido que no hay "recetas milagro", pero que ha presentado "elementos de apertura" y que confía en que los franceses tomen conciencia de lo que está en juego: "En las elecciones legislativas, no basta con decir no. Hay que decir quién va a gobernar".