Guerra en Ucrania

Bruselas estudia prorrogar hasta diciembre los vetos a las importaciones de cereal de Ucrania

El comisario de agricultura, Janusz Wojciechoski, apuesta por mantener hasta finales de año la prohibición de importar grano a los países fronterizos europeos y subsidiar el transporte del cereal hacia puertos europeos

Campo de cereales.

Campo de cereales. / pixabay

Silvia Martinez

Silvia Martinez

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

En dos semanas -el próximo 15 de septiembre- expira el acuerdo que permite a cinco países de la Unión Europea -Polonia, Hungría, Bulgaria, Rumanía y Eslovaquia) vetar de forma temporal la entrada en sus respectivos territorios de trigo, maíz, colza y semillas de girasol procedente de Ucrania, salvo que los envíos tengan como destino otros Estados miembros o países terceros, y la Comisión Europea estudia ya fórmulas para encontrar una solución. La propuesta personal que plantea el comisario de agricultura, Janusz Wojciechoski, tal y como quieren los cinco países fronterizos afectados, es prorrogar la prohibición hasta finales de año y subsidiar al mismo tiempo -con 30 euros por tonelada- el tránsito del cereal hacia puertos europeos para su exportación a otros países.

“Estamos ante un problema muy complejo y tenemos que encontrar una solucion que sea solidaria con los productores, los países fronterizos y con Ucrania”, ha explicado este jueves Wojciechoski, de nacionalidad polaca, durante un debate ante la comisión de agricultura del Parlamento Europeo. Cuadrar el círculo no es sencillo. Países como Polonia exigen a la UE que renueve la prohibición, aprobada el pasado 15 de abril, y advierten que de lo contrario introducirán medidas a nivel unilateral para impedir que el grano entre en sus respectivos territorios y hunda los precios de sus productores locales causando una crisis en sus mercados. 

El Gobierno de Volodimir Zelenski, por su parte, considera “absolutamente inaceptable” la prórroga de la prohibición y las restricciones comerciales y denuncia que una decisión así vulneraría el acuerdo de asociación entre la UE y Ucrania. Resolver la situción es, en todo caso, urgente dado que la principal vía de exportación del grano, el Mar Negro, sigue bloqueada por Rusia que, pese a la mediación de Naciones Unidas y de Turquía, mantiene bloqueada la iniciativa desde el pasado 17 de julio en que rompió el acuerdo. Esto significa que la única forma que tiene Kiev de sacar del país su producción es a través de los corredores solidarios promovidos por la UE que, desde mayo del año pasado, han permitido exportar 45 millones de toneladas de grano y han supuesto un enorme salvavidas económico para el país.

Presión de los 5 países

“No tenemos decisión de la prolongación o no de esta prohibición temporal de la importación pero si no se prorroga, y es mi opinión, se va a reproducir el problema que ya tenían estos cinco países”, ha alertado en la Eurocámara. Su postura, por tanto, es que la prohibición debe mantenerse y paralelamente establecer un mecanismo europeo de ayudas para subsidiar el tránsito hacia puertos del norte de Europa, en los países bálticos y Alemania. “El coste de la operación no es muy elevado en comparación con otras soluciones alternativas. El coste sería de 30 euros por tonelada, unos 600 millones de euros”, ha cuantificado el comisario que ha estimado que con esta ayuda Ucrania podría exportar 20 millones de toneladas de cereal.  

Según el político polaco, el grano ucraniano se encuentra actualmente sin compradores fuera de la Unión Europea. “Únicamente el 2 o 3% sale de la UE. No hay compradores porque los costes del tránsito del grano son más caro, Los cereales rusos son más baratos y el resultado es que los cereales ucranianos se quedan en Polonia porque son más baratos que los polacos. Quizás se envien a Alemania pero no más allá porque no resulta económico enviarlos a Africa. Estas ayudas ayudaría a rebajar los costes”, ha insistido sobre una fórmula que entiende haría viable que fuera comprado en la UE y también fuera. Y la solución “solo tiene sentido si se amplían las prohibiciones temporales a estos cin o países porque si no todas las exportaciones van a terminar en estos países”, ha subrayado.

Wojciechoski ha asegurado que la propuesta cuenta con el apoyo tanto de los cinco países fronterizos como de Ucrania aunque la portavoz de la Comisión, Miriam García Ferrer, ha dejado claro que el planteamiento del comisario es “su opinión” y “no refleja la posición de la Comisión Europea” que todavía tiene que tomar una decisión. “Trabajamos con los países afectados, con Ucrania y Moldavia para encontrar soluciones y reforzar los corredores de solidaridad y eliminar los cuellos de botella”, ha explicado aludiendo al análisis de rutas alternativas para la exportación de grano.