Aumenta la preocupación por la salud del presidente depuesto de Níger

El presidente nigerino, Mohamed Bazoum, depuesto en el golpe de Estado militar del pasado 26 de julio, y su familia están privados desde hace algunos días de agua, comida fresca y electricidad en el Palacio Presidencial en Niamey, donde desde entonces se encuentran en arresto domiciliario, según explicó este viernes a la agencia EFE un exconsejero del derrocado mandatario. Aún así, según recoge AFP, un familiar del dirigente aseguró que "está bien", pero que las condiciones en las que viven son "muy difíciles". La preocupación por su estado de salud ha reavivado los esfuerzos internacionales por conseguir su puesta en libertad y este sábado volverán a reunirse los mandatarios de los países que conforman la Comunidad Económica de Estados del África Occidental (Cedeao) en una nueva cumbre en Ghana.

Según el exconsejero, que pidió el anonimato, Bazoum, su esposa y su hijo viven de "comida seca" y añadió que hace días se impidió a su médico personal acceder a la residencia presidencial. La junta militar no quiso dar ninguna información al respecto. Esta situación preocupa enormemente a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y Estados Unidos, que expresaron su temor a que la salud y la "seguridad personal" del presidente electo de Níger se haya visto afectada tras más de dos semanas de arresto domiciliario. El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, lamentó este jueves las "deplorables condiciones de vida" en las que se encuentran el líder nigerino y su familia.

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El presidente de la Comisión de la Unión Africana, Moussa Faki Mahamat, expresó su "profunda preocupación" por el "deterioro de las condiciones de detención" del presidente y denunció en un comunicado que el trato que se le reserva es "inadmisible". Mahamat expresó su "firme apoyo a las decisiones de la Cedeao", la Comunidad Económica de Estados de África Occidental.

Fuera de África, la preocupación es igualmente notoria. El Alto Representante para la Política Exterior de la Unión Europea (UE), Josep Borrell, denunció el deterioro de la situación de Bazoum y, de nuevo, reclamó su puesta en libertad. "Bazoum ha dedicado su vida a mejorar la vida coitidiana de la población de Níger. No hay justificación para semejante trato", afirmó en un mensaje publicado en las redes sociales. Tal es la situación que el Alto Comisionado de la ONU por los Derechos Humanos, Volker Türk, aseguró este viernes que existen "informaciones creíbles que indican que las condiciones de su detención podrían ser consideradas tratamiento inhumano y degradante, en violación de las leyes internacionales de derechos humanos", señaló en un comunicado.

La oenegé Human Rights Watch (HRW) acusó este viernes a los líderes militares golpistas que depusieron a Bazoum de someterle a él y a los suyos a un "trato abusivo, inhumano y cruel en violación del Derecho Internacional". "Todas las personas detenidas arbitrariamente deben ser liberadas de inmediato y recibir alimentación adecuada, servicios básicos y acceso a médicos, abogados y familiares", declaró la subdirectora de la organización en África, Carine Kaneza Nantulya.

Dimisión o guerra

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Estas denuncias llegan en un momento de especial tensión en el Sahel. La Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (Cedeao) advirtió este jueves a la junta militar golpista de Níger que tenían hasta el domingo de plazo para dimitir. De no hacerlo, la alianza africana podría llevar a cabo una intervención militar del país para resolver la crisis política generada con el golpe de Estado.

Ante la movilización de las tropas de reserva, el Ministerio de Exteriores de Rusia, cuya influencia es cada vez mayor en el Sahel, reiteró este viernes su rechazo a una intervención militar en Níger ante la posibilidad de que ello conduzca a una "fuerte desestabilización" de la región. "Creemos que una vía militar para resolver la crisis podría conducir a una confrontación prolongada en el país africano, así como a una fuerte desestabilización de la situación en la región del Sáhara y del Sahel", indicó en un comunicado.

La respuesta llega apenas unas horas después de que la cumbre de la Cedeao decidiera movilizar de forma "inmediata" su fuerza de reserva "para restablecer el orden constitucional en la República de Níger". "No se descarta ninguna opción, incluido el uso de la fuerza como último recurso", declaró el presidente de Nigeria, Bola Tinubu. Aun así, el bloque de 15 países africanos insistió en que sigue comprometida en encontrar una forma de "restaurar el orden constitucional a través de medios pacíficos", priorizando el diálogo.

Los golpistas bien podrían ignorar ese ultimátum, como ya hicieron con las últimas exigencias de la Cedeao. Este mismo jueves, la junta militar anunció la formación de un nuevo gobierno transitorio compuesto de 21 ministros, seis de los cuales son militares.