Quintos comicios en tres años

Netanyahu vuelve al poder: 4 claves para entender los resultados de las elecciones en Israel

Un nuevo Israel nace gracias a la Kneset más derechista de su historia, con una mayoría del bloque religioso de derecha de Netanyahu aupado por los ultraderechistas

El ex primer ministro israelí Binyamin Netanyahu saluda a sus simpatizantes tras conocer los resultados electorales, este miércoles.

El ex primer ministro israelí Binyamin Netanyahu saluda a sus simpatizantes tras conocer los resultados electorales, este miércoles. / MENAHEM KAHANA

Andrea López-Tomàs

Andrea López-Tomàs

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Con casi la totalidad de votos escrutados, Israel embarca su viaje al pasado. El ex primer ministro Binyamín Netanyahu, 'Bibi' como se le conoce popularmente, se ha hecho con la mayoría en los quintos comicios en tres años y medio. Después de 16 meses como líder de la oposición, el político más popular de Israel logra sumar los apoyos necesarios para formar gobierno. A continuación, cuatro claves para entender los resultados electorales en Israel.

El rey Bibi

El rey Bibi

Ni meses sentado en el banquillo durante sus juicios por corrupción, soborno y fraude, ni sus amistades anunciadas con la ultraderecha, ni la polarización que ha dejado tras de sí han detenido al implacable Bibi. A sus 73 años, el primer ministro más longevo de la historia de Israel, con 15 años en el poder, vuelve para un sexto mandato que supere sus propios récords. "El pueblo quiere que devolvamos el orgullo nacional y un Gobierno estable", anunciaba de madrugada al conocerse los sondeos a pie de urna. Precisamente la polémica presencia de Netanyahu ha condenado a la sociedad israelí a volver repetidamente a las urnas. Ahora, el líder del Likud cuenta con 65 diputados que le apoyarán en sus intentos de escapar de la justicia.

Victoria de la extrema derecha

Victoria de la extrema derecha

El más claro ganador de los comicios ha sido Itamar Ben Gvir. Junto a su aliado Bezalel Smotrich, ambos políticos ultrarreligiosos, racistas y homófobos han asegurado 14 escaños con su Sionismo Religioso en la Kneset más derechista de la historia. Como tercera fuerza en la Cámara, darán apoyo a Netanyahu a cambio de posiciones en el gobierno. Ben Gvir ha pedido estar a cargo de la cartera de Defensa o de Seguridad Pública, que controla la policía israelí. Sus posiciones implican fortalecer la identidad judía del Estado y promover el judaísmo ortodoxo, a través de una interpretación dura del nacionalismo. Quieren la anexión de la Cisjordania ocupada, alterar el sistema judicial y se niegan a otorgar cualquier concesión territorial a los palestinos

Izquierda casi extinta

Izquierda casi extinta

Meretz, el icónico partido izquierdista israelí, se ha quedado fuera de la Kneset. La elevada participación (71,3%) ha elevado el umbral electoral, dejando a las puertas a las formaciones más pequeñas que podían alejar a Netanyahu de la mayoría. El Partido Laborista, la única representación de la izquierda en toda la Kneset, apenas ha conseguido los cuatro escaños mínimos para superar la barrera electoral. Esta formación gobernó sin apenas oposición durante las primeras décadas del Estado de Israel y tuvo un rol clave en el desarrollo de la nación. Ahora, en cambio, ha perdido toda relevancia en la arena política.

Un nuevo Israel

Un nuevo Israel

Los israelís han hablado en masa y han pedido representantes a la derecha. También han expresado su renuncia a tener palestinos en las instituciones, después de la única experiencia con el partido islamista en el llamado "Gobierno del cambio" que colapsó en junio. Preocupada por el costo de vida, la sociedad israelí deposita su confianza en líderes conocidos –casi un millón de personas han dado su voto a Netanyahu– y otros que no les asusta conocer –420.000 han optado por el Sionismo Religioso-. Los resultados electorales vienen a confirmar la existencia de un nuevo Israel basado en el supremacismo judío y los discursos violentos contra palestinos, izquierdistas o liberales.

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