EL IMPACTO DEL CRUDO BARATO

Prisioneros del oro negro

La caída del precio del petróleo tiene efectos devastadores en los países productores con riesgo de inestabilidad política

Un hombre camina junto a una oficina de cambio de moneda donde se muestra información del valor del rublo en Moscú, el 21 de enero.

Un hombre camina junto a una oficina de cambio de moneda donde se muestra información del valor del rublo en Moscú, el 21 de enero. / periodico

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La caída del precio del petróleo, que nuestros bolsillos de consumidores europeos tanto agradecen y aplauden grandes economías emergentes como India y China, tiene efectos devastadores en los países productores, sobre todo en aquellos cuyos ingresos dependen casi en exclusiva del oro negro (Venezuela). Y el riesgo de una sacudida recorre de nuevo la inestable región del Golfo.

RUSIA

DOS AÑOS ELECTORALES TRASCENDENTALES CON DESCONTENTO CRECIENTE

Rusia se acerca, en opinión de numerosos observadores, a lo que podría llamarse una tormenta perfecta. Los bajos precios del crudo en un país que, aparte de armas, fundamentalmente exporta petróleo y gas al mercado mundial, están erosionando las bases en las que se asentaba la estabilidad del Gobierno presidido por Vladímir Putin, una suerte de pacto no escrito entre la ciudadanía y la oficialidad por el que aquella se inhibía de interferir en los asuntos del Kremlin a cambio de prosperidad.

El país afronta elecciones legislativas en septiembre del 2016 y presidenciales en el primer trimestre del 2018. La oposición extraparlamentaria, privada del acceso a los medios de comunicación, ya ha adelantado que intentará aprovechar la oportunidad que le concede la combinación de ambas citas electorales con el poso de descontento que va asentándose entre un creciente segmento de población. Mijaíl Jodorkovski, el exmagnate de la petrolera Yukosque pasó un decenio en la cárcel y convertido ahora en disidente, ha pedido, desde su exilio, "una nueva revolución pacífica" que debe arrancar lo antes posible "porque la decadencia ha entrado en su fase final". También ha anunciado que apoyará financieramente y con recursos a candidatos opositores mediante su fundación Rusia Abierta.

Pese a la creciente asertividad opositora, las autoridades rusas cuentan todavía con mecanismos para aliviar el malestar que genera el crudo barato en una economia rentista como la rusa. En especial, los dos fondos soberanos de inversión, el Fondo de ReservaFondo de Reserva y el Fondo Nacional de Inversión Ruso, mecanismos de los que se ha proveído el Estado ruso para amortiguar cualquier volatilidad en los precios del mercado de hidrocarburos. Con la crisis, el primero ha sido el instrumento que han empleado las autoridades rusas para cubrir los déficits presupuestarios causados por los menores ingresos procedentes del petróleo. El segundo ha sido empleado para financiar proyectos de inversión y subsidiar a empresas estatales en apuros

Pero las reservas tambien tienen ún límite. En noviembre, antes del nuevo derrumbe de los precios del petróleo, el ministro de Finanzas, Anton Siluanov, ya advirtió, en declaraciones recogidas por TASS, que si las condiciones macroeconómicas no mejoraban, a finales del 2016 solo quedarían alrededor de 15.000 millones de dólares 15.000 millones de dólares, después de haber gastado 31.500 millones de dólares en tapar agujeros en las arcas públicas. -- MARC MARGINEDAS

IRÁN

REGRESO AL MERCADO DEL CRUDO EN EL PEOR MOMENTO

Irán tiene la reserva de gas más importante del mundo y la cuarta de petróleo. Con el levantamiento de las sanciones internacionales que asfixiaban su economía, después de que la ONU certificara que había cumplido la primera parte del acuerdo sobre su programa nuclearTeherán puede volver a exportar petróleo al máximo nivel.

Su regreso a alto rendimiento a un mercado de crudo ya con exceso de producción ha provocado una mayor caída del precio.

Las sanciones habían reducido las ventas de petróleo iraní en unos dos millones de barriles al día (bdp) y el régimen de los ayatolás, miembro de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), ordenó el lunes pasado incrementar su producción en 500.000 bdp.

Los expertos auguran que Irán podrá exportar estas cantidades pronto por el petróleo que almacena, pero no creen que la actual infraestructura estatal les permita aumentar la exportación a gran velocidad. No obstante, Teherán calcula que a final del 2016 podrá añadir un millón bdp a su volumen de producción actual.

Proyecciones del Banco Mundial consideran que las exportaciones de hidrocarburos se acelerarán con la reincorporación total de Irán al mercado, aunque el precio del barril de petróleo siga a mínimos históricos.

Irán recuperará miles de millones en ingresos por la venta de crudo, pero la caída de los precios reducirá sus ingresos potenciales cuando necesita recuperar su economía a marchas forzadas.

Irán ha resultado perjudicado por la estrategia de su rival en Oriente Próximo, Arabia Saudí, de bombear crudo por encima de la demanda para hundir los precios y expulsar del mercado a competidores. Los saudís, árabes y musulmanes sunís, han ganado la partida en este punto a sus adversarios persas y musulmanes chiís.

No obstante, con el levantamiento de sanciones, la recuperación económica de la República Islámica es cuestión de tiempo. La exportación de crudo era su primera fuente de ingresos, pero si algo ha aprendido Teherán de las sanciones es a alimentar su economía con fuentes alternativas al petróleo. -- ANA ALBA

ARABIA SAUDÍ

EL IMPULSOR DE UNA ESTRATEGIA QUE EMPIEZA A PASAR FACTURA

Arabia Saudí ha liderado, dentro de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), la estrategia de bombear crudo por encima de la demanda para hundir los precios.

Los saudís pretendían dañar a sus máximos competidores y echar del mercado a los productores de crudo no convencional, como el obtenido por fracking (fractura de esquistos) y arenas bituminosas. Uno de sus grandes objetivos era perjudicar a Irán, su gran rival en Oriente Próximo.

Arabia Saudí, el principal productor de petróleo del mundo junto a EEUU y Rusia, y que cuenta con las segundas reservas del planeta, incrementó la producción en el 2014 alegando que la demanda aumentaría.

La estrategia de Arabia Saudí está deteriorando la unidad en la OPEP, donde algunos necesitan un barril más caro. Pero los miembros más ricos, como los saudís, pueden aguantar más con un petróleo barato y quieren seguir presionando a los competidores que solo ven rentable extraer crudo si el precio está alto porque sus costes de producción son mayores.

La crisis que ha provocado en buena parte Arabia Saudí está afectando a su propia economía. Riad ha congelado el gasto público porque el déficit acumulado se ha disparado por la caída de ingresos por venta de crudo.

En diciembre, Riad decidió aumentar los precios de la mayor parte de los productos petroleros -la gasolina un 50%- y otros combustibles, además de reducir los subsidios. La electricidad también subirá algo para los hogares y el 25% para el sector comercial y agrícola. Además, introducirá el IVA. Otros países de la zona como Catar, Omán, Emiratos Árabes Unidos, Baréin y Kuwait han tomado medidas similares.

Los saudís han anunciado que estudian privatizar parcialmente la mayor petrolera del mundo: Saudi Aramco, cuyas reservas son de 261.000 millones de barriles de petróleo y que bombea 10 millones de barriles diarios (bdp), el 11% de la producción mundial.

Si se gestiona con filosofía privada, aún podría derrumbarse más el precio del barril y algunos países productores se verían muy perjudicados. -- ANA ALBA

EEUU

LA BONANZA DEL FRACKING, UNA BURBUJA CON RIESGO DE PINCHAR

El petróleo barato ha supuesto tradicionalmente un espaldarazo para la economía de Estados Unidos, comparable a una bajada de impuestos. Lo que el conductor se ahorraba en la gasolinera, acababa gastándolo en restaurantes o en ropa y, aunque la industria local de hidrocarburos sufría, el coste para el país era asequible porque importaba del extranjero la mayor parte del petróleo que consumía. Ese paradigma, sin embargo, está cambiando. Gracias a la revolución del fracking (fracturación hidráulica), EEUU ha doblado su producción de crudo en los últimos cinco años, un boom que se ha traducido en cientos de miles de empleos e ingresos multimillonarios para numerosas regiones del país. Esa bonanza está ahora en entredicho y la burbuja corre peligro de pinchar dejando un reguero de damnificados.

Los analistas de JP Morgan calcularon en enero del año pasado que los bajos precios del petróleo añadirían 0,7 puntos al crecimiento del país durante el 2015, pero hace solo unos días corrigieron la predicción, asegurando que en realidad lo habían reducido un 0.3%. Solo el año pasado se perdieron más 200.000 empleos en la industria de hidrocarburos, mientras la inversión en capital caía en torno al 5%, más de cinco puntos menos que en el 2014, cuando el precio del barril superaba los 100 dólares. Para este se prevé que se aceleren las quiebras entre los productores de esquisto -el crudo que se extrae mediante el fracking- más endeudados, lo que podría poner en peligro a algunos bancos que financiaron el boom en los años de euforia. La caída de los precios también ha contribuido a la depresión de las bolsas. En lo que va de año el índice Standard & Poor’s ha perdido el 10% de su valor.

Todos esos factores han hecho que el petróleo barato ya no sea un motivo de celebración en EEUU, que es, gracias al fracking, el segundo productor del mundo por detrás de Arabia Saudí y solo importa el 27% del crudo que consume, el porcentaje más bajo desde 1985. Goldman Sach calcula que su impacto en el PIB del país será este año “cercano al cero”. -- RICARDO MIR DE FRANCIA

VENEZUELA

UNA DEBACLE QUE AMENAZA CON ARRASTRAR AL CHAVISMO

Con el rostro demacrado, el presidente Nicolás Maduro informó en la noche del pasado martes que el precio del barril de petróleo venezolano se  ubicaba en 21,63 dólares. Y, efectivamente, para el Gobierno bolivariano, la noticia tiene alcances desastrosos. El PIB de ese país que depende un 95% de la exportación de crudo ha caído 15 puntos en los últimos tres años. La inflación, de acuerdo con el FMI, ha sido en el 2015 del 275% y cerrará el presente año en un 720%. 

La escasez de alimentos y reservas internacionales, las restricciones para importar bienes esenciales, todo, insisten las autoridades, es culpa de este derrumbe inimaginable. La extrema dependencia de los precios internacionales ha llevado a Venezuela, según Maduro, a una “verdadera encrucijada histórica”. El presidente decretó el estado de emergencia económica para iniciar un proceso de diversificación y, sobre todo, salvar “la estabilidad social y los logros sociales que hemos construido en los últimos 10, 15 años”. La oposición, que es mayoría en el Congreso, cree que el chavismo ofrece más de lo mismo y por eso le ha dado la espalda. 

El ministro de Petróleo y Minería, Eulogio Del Pino, estimó en 60 dólares el precio del barril para que Venezuela pueda atravesar su crisis de proporciones. “No se puede seguir vendiendo el crudo por debajo de los costes de producción”, dijo. El alto precio del petróleo de la Venezuela saudita ha sido determinante en la construcción de los liderazgos políticos. Le ocurrió a Carlos Andrés Pérez entre 1974 y 1979 y también favoreció de manera extraordinaria a Hugo Chávez. Cuando este, en el 2004, ganó la consulta popular a través de la cual la oposición intentó revocar su mandato, el barril estaba cerca de los 50 dólares.

Chávez fue reelegido en el 2006 con un barril a 51 dólares que le permitió repartir panes y peces dentro y fuera de Venezuela. En el 2012, año de su última reelección, el crudo trepó a los 109,45 dólares. Fue otra vez imbatible. A Maduro, en cambio, no solo le ha tocado heredar un modelo económico cuya eficiencia estaba bajo severo cuestionamiento. La caída internacional de los precios del oro negro amenaza ahora con arrastrar a su Gobierno. -- ABEL GILBERT