L’Hospitalet licita la limpieza de sus calles por un valor de más de 500 millones de euros y una vigencia de 10 años

El Ayuntamiento de L’Hospitalet de Llobregat (Barcelonès) ha licitado el servicio de limpieza viaria y recogida de residuos de la ciudad, el mayor contrato del municipio, que cuenta con un valor estimado de más de 500 millones de euros —569.300.289,81, para ser concretos— y que contempla una duración de 10 años, una vez el servicio empiece a prestarse.

En la segunda ciudad con más habitantes de Catalunya, el actual contrato de limpieza, en manos de Fomento de Construcciones y Contratos (FCC), empezó en enero de 2011. Agotadas ya las prórrogas, el 30 de diciembre de 2022 la Junta de Gobierno Local aprobó la continuidad del servicio para los años 2023 y 2024 y el ejecutivo municipal prevé que el nuevo contrato empiece a rodar en enero del 2025.

Además del cuantioso valor económico que supone, la limpieza es, del mismo modo que ocurre en la mayoría de municipios, una de las principales preocupaciones de los vecinos de L’Hospitalet, tal y como reflejan año tras año los distintos barómetros municipales publicados.

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En esta ocasión, las cláusulas de la licitación remarcan que el contrato no podrá ser prorrogado. De este modo, la prestación solo podrá alargarse en el supuesto de que, una vez vencida, “no se hubiera formalizado el nuevo contrato que garantice la continuidad de la prestación a realizar”, siempre que haya incidencias “resultantes de acontecimientos imprevisibles” y que existan razones de interés público “para no interrumpir la prestación”. En ese supuesto, se podrá prorrogar hasta que empiece a ejecutarse el nuevo contrato y “por un periodo máximo de nueve meses”.

El nuevo contrato, en el que también se incluye la limpieza de los contenedores y el alcantarillado, entre otros, salió a licitación el pasado viernes 17 de mayo y, ahora, las empresas interesadas en hacerse con el servicio tienen margen para presentar sus ofertas hasta el 5 de agosto de este mismo año. Para determinar el ganador, los criterios objetivos —vinculados al precio ofertado y a la correcta determinación del presupuesto— y los subjetivos —entre los que se incluyen elementos como los criterios medioambientales de los vehículos o un proyecto de economía circular del residuo textil— tendrán un peso prácticamente idéntico al evaluar las ofertas.

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Puerta a puerta

En los pliegos del contrato, el consistorio hospitalense afirma que “es necesario avanzar en los modelos de recogida, en la tecnología empleada, en los sistemas de comunicación con la ciudadanía”, entre otros, con el objetivo de “alcanzar progresivamente un mejor nivel de recogida selectiva”. Pese a ello, fuentes municipales L'Hospitalet apuntaban hace unos meses a este diario que, a causa de la realidad urbanística de la ciudad —el municipio con los dos kilómetros cuadrados más densamente poblados de Europa—, "no es viable técnicamente realizar la recogida de residuos puerta a puerta".

De este modo, la recogida está prevista que sea en contenedores ubicados en la vía pública, como hasta ahora. Aun así, las cláusulas ya prevén que haya tratamientos que, aunque no se exijan desde un inicio, se estudien para implementar a lo largo de la duración del contrato y que sí que irían en esa línea del puerta a puerta.

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Por ejemplo, se contempla en el caso de nuevos edificios que cuenten con una cámara de contenedores en su interior realizar un puerta a puerta en la comunidad. "Se prevé que puedan ser unas 1.200 viviendas las que tengan este tipo de servicio de recogida", dicen desde el Ayuntamiento de L'Hospitalet, desde donde explican que actualmente cuentan también con 15 contenedores inteligentes aún en fase de pruebas.

También se prevé la recogida puerta a puerta de residuos comerciales, concretamente, de la fracción papel-cartón que generen “las actividades económicas consideradas grandes productoras de estos residuos”.

Mejoras y mayor control

Con el nuevo contrato, el Ayuntamiento explica que la ciudad pasará a destinar a limpieza y recogida de residuos 43,5 millones de euros al año frente a los 28,6 de la anterior contrata. Así, con la nueva licitación se prevé la renovación de los 130 vehículos del parque móvil del servicio, así como los 4.200 contenedores específicos de las cinco fracciones —orgánica, envases ligeros, papel y cartón, vidrio y resto de residuos— a los que se añadirá, en algunos puntos de la ciudad, un contenedor para textil.

En cuanto a las innovaciones tecnológicas para el seguimiento y mejora del servicio, se introducen elementos nuevos y "se mantienen aquellos elementos que han demostrado su efectividad", apunta el consistorio. De este modo, se apuesta por la instalación de tecnología RFID en los contenedores, que implica la identificación con radiofrecuencia y que permite conocer en tiempo real el historial de actuaciones como el vaciado y limpieza de estos recipientes; la instalación de sensores de llenado en algunos contenedores, para analizar situaciones puntuales de desbordamientos; el cierre en los contenedores de orgánica para grandes productores; o se mantiene el GPS en los vehículos de limpieza, con el objetivo de "conocer en tiempo real su ubicación y recorridos efectuados".

Una vez adjudicado el contrato, los pliegos también contemplan la posibilidad de que la empresa vencedora pueda subcontratar los tratamientos de recogida y transporte de residuo textil a empresas de inserción y a centros especiales de empleo de iniciativa social, así como a entidades que promuevan la “reinserción sociolaboral” o que realizan otras actuaciones relacionadas con el “bienestar social o mediambiental”.

Para los demás servicios, la empresa que se lleve el servicio de limpieza hasta 2035 podrá también subcontratar a terceros para que lleven a cabo algunos tratamientos de limpieza viaria, la recogida de residuos y la recogida selectiva o la limpieza del alcantarillado, así como el alquiler de vehículos, maquinaria o servicios.