Jamie Lee Curtis dedica la estatuilla a su hija trans

Sin duda, Jamie Lee Curtis es una madre orgullosa. Dos días después de llevarse a casa su primer Premio de la Academia, a la Mejor Actriz de Reparto, en los Oscar 2023, Curtis, de 64 años, llamó al programa 'Today' este martes y habló sobre su nuevo trofeo, y la forma en la que lo ha dedicado a una de sus hijas.

"La he llamado simplemente 'ellas/ellas' en apoyo a mi hija Ruby", explicó la actriz de 'Everything Everywhere All at Once', sosteniendo con orgullo su estatuilla dorada junto a su rostro.

Ruby, que se casó con su pareja Kynthia en mayo de 2022, se declaró trans y se lo confesó a sus padres en 2020. "Fue aterrador, solo el hecho de contarles algo sobre mí que no sabían", dijo Ruby a 'People' en una entrevista en octubre de 2021 junto a su madre. "Era intimidante, pero no estaba preocupada. Me habían aceptado toda mi vida".

Sin embargo, cuando Ruby intentó decirles a sus padres por primera vez que era trans, no pudo hacerlo en persona y les envió un mensaje de texto después de una visita a la casa de la familia en Los Ángeles en 2020.

"La llamé de inmediato. No hace falta decir que hubo algunas lágrimas involucradas", reveló Curtis al citado medio en octubre de 2021.

La intérprete, que ofició la boda de su hija, se ha pronunciado siempre a favor de Ruby y ha condenado en varias ocasiones la transfobia.

En su discurso de aceptación el domingo por la noche en el Dolby Theatre de Los Ángeles, Curtis destacó a los "cientos de miles de personas" que la ayudaron en su camino hacia el escenario de los Oscar.

"¡Acabamos de ganar un Oscar juntos!" dijo, además de agradecer a su marido, a sus hijas Ruby y Annie Guest; a agentes y directores de 'Everything Everywhere All at Once', Daniel Scheinert y Daniel Kwan.

"Estoy un poco llorona", admitió Curtis al ver un vídeo de su discurso. Se echó a llorar y explicó que "no había visto eso", dijo, sosteniendo su Oscar con orgullo. "Así que es la primera vez que lo he visto".

Inmediatamente después de ganar el Oscar el domingo por la noche, "no llamé a nadie", explicó, "porque me parece de mala educación estar hablando por teléfono en una ceremonia de premiación". "Me parece de mala educación estar en tu teléfono en cualquier lugar", agregó la actriz. "Lo que hice fue darme cuenta de que, dado que ganamos, no me iría a casa de inmediato. Así que, literalmente, le envié un mensaje de texto a un amigo que me ayuda a pasear a [mi perro] Runi cuando yo no puedo", detalló.