Fútbol

LaLiga es un lujo para los aficionados visitantes: entradas más caras que en la Champions

El 'efecto Mbappé' sitúa el precio mínimo de los billetes para ir al Bernabéu en 75 euros frente a los 60 de la máxima competición de clubes, que se reducirán hasta los 50 la próxima temporada

Aficionados disfrutan de un partido del Real Madrid en el Santiago Bernabéu.

Aficionados disfrutan de un partido del Real Madrid en el Santiago Bernabéu. / EP

Denís Iglesias

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Más de 70.000 espectadores vieron el pasado domingo a Kylian Mbappé estrenarse como goleador en el Santiago Bernabéu. Como mínimo, los no abonados pagaron 75 euros para el partido contra el Betis. Es más de lo que costará la entrada más cara de la Champions en la temporada que comienza, después de que la UEFA haya reducido el límite máximo de 70 a 60 euros. Por tanto, un partido ordinario de Liga tendrá un precio mayor que una vuelta en el Bernabéu de semifinales frente al Manchester City, por poner un ejemplo de primera fila.

El fútbol ha superado todos los límites en cualquier dimensión. Las camisetas se han encarecido un 55% en la última década hasta alcanzar los 150 euros de media. El precio medio anual que cada español deberá gastar para ver el fútbol por televisión supera los 2.000 euros, lo que supondría un gasto mensual de más de 180 euros en los que se incluiría Liga, Copa o Champions. Más allá de las entradas ocasionales, los abonos de Primera División cuestan de media 350 euros. De ahí que el único modo efectivo de frenar la escalada es con topes.

El acuerdo de los 30 euros para visitantes en LaLiga

La UEFA anunció este lunes un límite que llega después de años de lucha de las asociaciones de aficionados como Football Supporters Europe. A partir de la temporada 2024/2025, las entradas para los aficionados visitantes será de 60 euros en la Champions League, 40 euros en la Europa League y 20 en la Conference League. Para la campaña 2025/2026, el importe máximo para los hinchas desplazados se fijará en 50 euros en Champions, 35 euros en Europa League y de 20 euros en la Conference (más barato que partidos de Segunda en España).

"La decisión supone otro paso clave para reafirmar el compromiso de la UEFA con la mejora de la experiencia de todos los aficionados el día de partido", declaró Alexander Ceferin, presidente de la UEFA, quien abogó por "un deporte inclusivo en el que se valore y se reconozca a los seguidores que viajan por toda Europa para seguir a sus equipos". Porque detrás de un desplazamiento que va más allá del ticket, con viaje y hospedaje. La declaración de Ceferin, que no se presentará a la reelección de 2027, hay que entenderla en la tensión que se ha generado el organismo y el proyecto interrumpido de la Superliga que ha abierto una dicotomía de intereses entre clubes y aficionados o competitividad y reparto de beneficios.

El nuevo tope de la Champions a la vez que estrena un formato que incluye más equipos y más partidos. En consecuencia, aumentan la recaudación y también las recompensas. En LaLiga no existe una regulación al respecto, pero los clubes han tomado sus propias decisiones para satisfacer la demanda de los seguidores. Hasta 16 de los 20 clubes de Primera División han firmado un acuerdo para que las entradas de intercambio de las que gozan las aficiones visitantes no cuesten más de 30 euros. El Real Madrid, Villarreal, Rayo y Espanyol son los únicos que no se han suscrito a un pacto que permitió la temporada pasada vender 60.000 entradas en 271 encuentros.

Día del club, una fórmula para hacer caja en partidos grandes

Esta alianza ha sido promovida por Aficiones Unidas, organización que agrupa a federaciones de peña de todo el país. A este proyecto, llamado Grada Visitante, se unieron en 2023 el FC Barcelona y el Getafe después de cambiar su decisión inicial. La medida ha regulado el mercado, pero no ha moderado las subidas. Además, las entidades se guardan una bala con la fórmula del Día del Club, concebido como un formato de ayuda en el que incluso los abonados pasan por caja. Sucede cuando reciben a rivales grandes o hay derbis. Esta temporada se ha vivido, por ejemplo, en el UD Las Palmas - Real Madrid, donde las entradas para no socios arrancaron en 35 euros (el precio más alto fue de 55). Los que carecían de carné de abonado pagaron desde 70 hasta 325 euros.

Todos estos precios, en el cauce legal. En la reventa se dispararon hasta los 500 euros, a pesar de las reiteradas advertencias por parte del club amarillo de que las entradas son nominativas. No respetar estas reglas implica un delito. En ocasiones existen auténticas tramas organizadas. En la previa al partido de vuelta de semifinales de Champions entre el Real Madrid y el Bayern de Múnich se requisaron 138 carnets revendidos. El proceso concluyó con la "expulsión inmediata" de los socios titulares. Este encuentro puso en evidencia las diferencias entre el modelo de LaLiga y la Bundesliga. Mientras que en la ida de Allianz las entradas más baratas partieron de 19 euros, ir al Bernabéu costó como mínimo para el público general 125 euros.

Precios dinámicos que aumentan según la demanda

Hay que diferenciar entre los precios que nacen de acuerdos para favorecer los desplazamientos y las entradas que puede cualquier persona a través de las webs oficiales de los equipos. Ahí algunos clubes están utilizando tarifas dinámicas, tal que si se tratase de una aerolínea. Así lo expresaba el Valencia CF en vísperas de recibir al FC Barcelona, uno de los partidos de altas demanda de la temporada: "Siguiendo la tendencia global en espectáculos, eventos deportivos y entretenimiento, el club se suma a esta práctica, que cuenta con el respaldo y la tecnología de LaLiga. De este modo, las entradas saldrán a la venta con un precio base y este podría aumentar en la medida que avanzan los días, siempre sujeto a distintos parámetros como la ocupación de la zona del estadio y la proximidad de la fecha, entre otros".

De ahí que los topes y los acuerdos son un mecanismo de defensa en un mercado que encuentra nuevas fórmulas para incrementar los precios, salvo que existan normativas nacidas de las patronales del fútbol. De acuerdo a los datos procesados por organizaciones como FASFE, los 35,13 euros de media que pagan actualmente las hinchadas visitantes de España son el techo europeo. Por detrás está la Premier, que tiene topado el precio máximo desde 2019 en 30 libras esterlinas (34,89 euros al cambio actual). Prácticamente, el doble de los 15,62 euros de media de la entrada para las aficiones a domicilio que tiene la Bundesliga o la Eredivisie de los Países de Bajos, con un límite de 15 euros. Todavía es inferior el precio de la Ligue 1 francesa, delimitado en 10 euros. El fútbol es un 'juego' que se paga cada vez más caro.