Michel pretende que el histórico Girona sea aún mejor

Llegó a la cima el Girona la pasada campaña, su cima, detrás de los dos grandes y clasificado por primera vez para una competición europea en su historia, la Champions League nada menos, y Míchel Sánchez pretende que su equipo "lo haga mejor". Mejor respecto al curso anterior, se supone. El técnico desea evitar las referencias -"lo que se ha hecho, ya está hecho", subrayó-, pero sabe que las comparaciones serán inevitables.

El estreno de la Liga conduce al Girona hasta Sevilla (21.30 h.), donde le espera un Betis que también aspira a superar el séptimo puesto, pese a que obtuvo una plaza europea, uno de sus objetivos. El club verdiblanco anda remodelando la plantilla, como su rival, pero por motivos distintos. Los ajustes económicos le obligan a prescindir de las fichas más altas y busca fichajes sustitutivos sin perder nivel.

Mala pretemporada

El Girona se enfrenta a un reto mayúsculo para atender dos competiciones. Ha perdido a cinco titulares (Yan Couto, Eric Garcia Aleix Garcia, Dovbyk y Savinho) y ha compensado esas bajas con siete refuerzos (los defensas Alejandro Francés y el checo Ladislav Krejci, el recuperado Oriol Romeu, los holandeses Donny van de Beek y Gabriel Misehouy y los delanteros Bryan Gil y Abel Ruiz), pero Míchel pide más. Un portero, un centrocampista con "un perfil un poco más dinámico" de los que ya tiene, un extremo que sirva para las dos bandas y otro delantero. De paso, sugirió a Quique Cárcel, el director técnico, que no reprima si ve alguna oportunidad de mercado. El delantero macedonio Bojan Miovski, del Abeerdeen, se perfila como la incorporación más inmediata.

Los malos resultados de la pretemporada avalan las demandas de Míchel. El Girona solo ha ganado uno de los siete partidos de preparación: el 0-2 al Nápoles. Había empatado los tres primeros (Olot, Montpellier y Espanyol) y perdió de los cuatro últimos, entre ellos sendos 0-4 con el Toulouse y el Newcastle y un 2-3 con el Bournemouth. "En la pretemporada hemos recibido nueve goles en pérdidas, pero no cambiaremos", adelantó Míchel, que mantiene su ambición de que el Girona sea el protagonista de cualquier partido que dispute y eso pasa por tener la posesión y "recuperar el balón pronto cuando se pierde".

Honrar la camiseta

A Míchel lo que le preocupa es no haber podido cuajar al equipo en un verano con la influencia de la Eurocopa y los Juegos Olímpicos. "El club, la dirección deportiva y yo estamos en la misma manera de ver las cosas y de hacer la plantilla y el equipo. El objetivo que tenemos es el crecimiento del club y el objetivo es que honremos la camiseta, siempre", manifestó, después de enfatizar que la temporada pasada "está olvidada".

Un proceso vírico que afectó a la plantilla durante la estancia en Inglaterra deja como secuela tras bajas para el estreno del Villamarín: Valery, Viktor Tsygankov y Manu Vallejo. Las dificultades se multiplican para visitar a un Betis que disfruta de "una plantilla top". "He visto todos sus partidos de pretemporada y deberemos dar nuestra mejor versión para ganar", observó Míchel.

El Betis se encuentra en una tesitura parecida. Manuel Pellegrini ha tenido que prescindir de Juan Miranda, Guido Rodríguez, Wllian José, Abner y Chadi Riad por la necesidad de la necesidad de hacer caja. Podría haber algún traspaso más, como los de Nabil Fekir y William Carvalho, hombres clave del equipo, pero el técnico chileno no les reservará para evitar que se debilite aún más el equipo, que desea presentarse a lo grande en el Benito Villamarín, que rozará el lleno.