Abro hilo

La semana de las celebraciones bizarras: 'Gibraltar español', el racismo de Enzo, la venda de Trump

Los deslices de la exaltación patriótica en España y Argentina y el atentado en EEUU, protagonistas en las redes

Dani Carvajal y Álvaro Morata, durante la celebración de la Eurocopa en Cibeles.

Dani Carvajal y Álvaro Morata, durante la celebración de la Eurocopa en Cibeles. / AFP7 vía Europa Press

Daniel G. Sastre

Daniel G. Sastre

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

De la alegría a la vergüenza ajena

Qué alegría sintió la gran mayoría de españoles por la victoria de la selección en la Eurocopa. El equipo jugó un torneo perfecto, brillante de principio a fin. De los siete triunfos en siete partidos, cuatro fueron sobre países que han sido campeones del mundo: Italia, Alemania, Francia y, en la vibrante final, Inglaterra. Hacía tiempo que no había una unanimidad semejante: España ha hecho el mejor fútbol y ha sido un campeón merecidísimo.

Para completar la felicidad, la selección ha unido por unas semanas a culés y madridistas, a andaluces y vascos, a todo el país en torno al incomprensible talento de Lamine Yamal y Nico Williams, al sentido del ritmo de Rodri, al empuje de Cucurella y Carvajal. Españoles de una generación y de cincuenta, altos y bajos, niños y viejos, todos estaban ahí representados mientras rodó la pelota por los estadios alemanes.  

Como los sueños de una noche de verano, cuando los jugadores llegaron a España todo se desvaneció. Mucha gente pasó de la alegría a la vergüenza ajena en un día con los desplantes de varios jugadores al presidente del Gobierno, con los extemporáneos cánticos de 'Gibraltar español', con algunos vivas de Morata, que por otro lado en la mayor parte del acto de Cibeles ejerció como solvente maestro de ceremonias. "Mezclar una victoria deportiva con un cántico que glorifica la política dictatorial de un asesino en masa como Franco, y el intento de su régimen fascista de usurpar un territorio vecino, es peor que repugnante", reaccionó enseguida el ministro principal de Gibraltar, Fabian Picardo. Con toda la razón, y para regocijo de los pocos que no se habían alegrado por la victoria de la Roja.

Ver en las redes sociales a cientos de chavales vociferando el 'Lamine Yamal come jamón' volvió definitivamente a guardar en un cajón (al menos hasta el Mundial de 2026) la fraternidad que había estimulado este equipo, y desempolvó la crispación.

Celebración de la selección española en Madrid

Celebración de la selección española en Madrid / Daniel González

El cántico que empaña la Copa América

Todo el 'cringe' que dio Carvajal al salir sin camiseta al escenario de Cibeles, toda la temeridad política que rezumaban los 'Gibraltar español' que se entonaron, palidecen frente a lo que pasó con la selección argentina. Además de la Eurocopa, estos días se ha disputado la Copa América, que la selección de Leo Messi se ha llevado con justicia pero no con una superioridad tan insultante como la de la Roja en Alemania. Así que, más que las victorias albicelestes, lo que ha llegado a Europa, o al menos a las redes sociales que se consumen aquí, es la celebración de los jugadores. Un vídeo en concreto: el que grabó Enzo Fernández, centrocampista del equipo, en directo. En él, los campeones están cantando una canción racista contra la selección francesa, que fue rival de Argentina en la final del Mundial del año pasado. "Juegan en Francia pero son todos de Angola", dice uno de sus versos.

Las consecuencias fueron inmediatas. Compañeros de Enzo el Chelsea, como el francés, Wesley Fofana, lo dejaron de seguir en redes sociales. "Fútbol en 2024: racismo desinhibido", comentó el jugador. Hubo también protestas de la federación francesa e incluso del Elíseo. Enzo Fernández se tuvo que disculpar. "La canción incluye un lenguaje muy ofensivo y no hay absolutamente ninguna excusa para estas palabras. Me opongo a la discriminación en todas sus formas y me disculpo por quedar en medio de la euforia de nuestros festejos de la Copa América. Ese video, ese momento y esas palabras no reflejan quién soy. Perdón de verdad", escribió.

Pero desde Buenos Aires, capital de Júpiter, Enzo y el resto de jugadores recibieron un espaldarazo inesperado del Gobierno argentino. "Ningún gobierno puede decirle qué comentar, qué pensar o qué hacer a la selección argentina campeona del mundo y bicampeona de América", publicó, henchido de nacionalismo, el Ejecutivo que preside Javier Milei en redes sociales.  

Enzo Fernández durante la celebración de un gol

Enzo Fernández durante la celebración de un gol / Enzo Fernández

La moda de la venda orejera

El atentado contra Donald Trump sigue de actualidad una semana después de que se produjera. Parece increíble que el candidato republicano pudiera escapar con vida, y estos días proliferan los análisis que muestran lo cerca que estuvo de que una bala le destrozara el cráneo. La mayoría coinciden en que un giro de cabeza en el último segundo fue lo que propició que el tirador solo acertara a hacerle un rasguño en la oreja, aparatoso pero superficial. Bastó con un vistoso vendaje para que Trump pudiera presentarse en plena forma en la convención de Milwaukee para ser aclamado casi como un prócer mítico e inmortal.

Como si el tiroteo no hubiera ya deparado suficientes imágenes para la historia –Trump, con innegable instinto político, acertó a levantar el puño momentos después de ser herido para protagonizar una foto que ganará todos los premios–, los republicanos de Milwaukee encontraron una forma bizarra de subrayarr el heroísmo de su líder. Muchos de esos congresistas acudieron al evento con un apósito o con un papel doblado en la oreja. En teoría lo hicieron para solidarizarse con el candidato, pero lo que han conseguido de momento es reventar los 'freakómetros'. "La llevo por patriotismo y en solidaridad porque le dispararon y tiene que llevar una venda", dijo a Efe uno de ellos. Según medios locales, esperan que se convierta en una tendencia. Buena suerte.

Pero siempre hay gente que está atenta a las tendencias. Quizás demasiado atenta. La pastelería Escribà de Barcelona, famosa por reproducir la actualidad en sus monas de pascua, hizo una oreja de chocolate, e incluso colgó en Instagram un vídeo alegórico del atentado. Lo acompañó con un mensaje: «Si tienes problemas con tus orejas, ¡tenemos la solución más dulce!: ¡orejas de chocolate!". Hubo polémica, y tuvo que retirarlo. Pero sigue vendiendo la oreja de chocolate.

El expresidente estadounidense Donald Trump

El expresidente estadounidense Donald Trump / Europa Press/Contacto/Annabelle Gordon