El intento de magnicidio en Eslovaquia dispara la 'conspiranoia' en Twitter

A X, antes Twitter, solo le faltaba un intento de magnicidio. Es de por sí una red complaciente con cualquier 'magufada', así que el tiroteo de un primer ministro de la Unión Europea ha disparado la imaginación y las especulaciones hasta límites muy locos. La principal línea de los comentarios más conspiranoicos ya ha dictado sentencia: la OTAN está detrás del ataque al líder eslovaco Robert Fico. Y lo está porque es un político prorruso que en su discurso de toma de posesión dijo que a Europa no se le ha perdido nada en la guerra de Ucrania. "El tirador que disparó al Primer Ministro de Eslovaquia Robert Fico participó en manifestaciones a favor de Ucrania y su mujer que ya fue arrestada ha resultado ser refugiada ucraniana. Y ahora es cuando viene la OTAN a contarnos que el agresor actuó en solitario. Claro que sí…", escribió @liusivaya, que es una tuitera de gran éxito que se proclama en su perfil "voz del pueblo", que tiene la bandera rusa frente a su nombre y que solo escribe mensajes propagandísticos del régimen de Vladímir Putin.

Pero en el intento de magnicidio del dirigente eslovaco han metido cucharada también los antivacunas. Cuentas con un nombre tan sospechoso como 'El gran despertar' (@destapandolose1) han atribuido directamente los disparos a una conspiración de la Organización Mundial de la Salud: "La semana pasada, el Primer Ministro de Eslovaquia, Robert Fico, pronunció este discurso. RECHAZA el acuerdo sobre pandemia propuesto por la OMS. Oren por su supervivencia y necesitamos muchas personas valientes como Robert Fico". Pero hay usuarios que consiguen meter un tercer elemento en el cóctel: su oposición al islam. "El primer ministro eslovaco aprobó una legislación para impedir que el Islam obtenga estatus oficial como religión en el país. El año pasado, dejó de enviar el dinero de los impuestos de su nación a Ucrania. Y aquí es un acérrimo crítico de las vacunas", escribió @MichaelASwing en un memorable 'agárrame el cubata'.

Un hombre llamado Óscar Díaz, que al parecer es traductor y 'concursólogo' –es decir, que está más o menos especializado en participar en concursos, desde 'Saber y ganar' hasta '¡Boom!'– se llevó el miércoles por la noche el bote de 'Pasapalabra'. Son 1.816.000 euros, que ganó, en última instancia, por responder cuál es el apellido del arquitecto que diseñó la Villa Wenhold, en la ciudad alemana de Bremen (es Fahrenkamp, como sabe todo el mundo). Su imagen llevándose las manos a la cabeza, la felicitación de su dignísimo oponente (llamado Moisés Laguardia, en este caso) y las entrevistas del día posterior a la gesta son ya un clásico cada vez que alguien consigue terminar el rosco. Que alguien se lleve el bote de Pasapalabra despierta una expectación parecida al Gordo de Navidad, con la ventaja que puede suceder en cualquier día del año.

Las preguntas que los periodistas hacen en esas charlas al ganador constituyen ya también clásicos de este tipo de situaciones: qué vas a hacer con el dinero, cómo lo vivió tu familia, vaya palo te va a pegar Hacienda. Pero sobre esta última cuestión Díaz ha resultado tener un discurso poco convencional. «No me duele, porque esa es la manera de tener unos servicios, una sanidad y una educación adecuados. Y ojalá pudiéramos aportar más. Eso significaría que ganaríamos todos un poquito más», dijo por ejemplo en la entrevista que le hizo EL PERIÓDICO.

Esa manera de ver las cosas ha provocado que el ganador de 'Pasapalabra' se haya convertido en poco menos que un héroe para los tuiteros de izquierdas. «Qué importantes son estos mensajes, el ganador del bote de 'Pasapalabra' orgulloso de pagar los impuestos que le tocan. A este no lo entrevistarán Ana Rosa y Susana Griso, por lo que sea», escribió @josevico4 sobre este nuevo Robin Hood de nuestros días.

Si el bote de 'Pasapalabra' siempre despierta expectación, también lo hace el sorteo de las mesas electorales que trae consigo cada votación. En Catalunya, por ejemplo, con las europeas del mes que viene los ciudadanos habrán tenido que pasar en el último año tres veces por el duro trance de saber que su nombre está en ese bombo, que en vez de premiarte te pone a trabajar por la democracia un domingo. Aunque el Estado paga –unos 70 euros en el caso de las europeas–, son pocos, a juzgar por la reacción general de los agraciados en las redes sociales, quienes se alegran de que les toque esa lotería.

En general, la gente se lo toma con todo el humor que puede, y proliferan los memes. "Cuando el horóscopo me dijo que me iba a llegar un dinero inesperado no pensé que iba a ser en la forma de presidenta de mesa electoral", escribe por ejemplo en X @yunnubin. "Me es muy grato (por los cojines) anunciar que he sido agraciada con la presidencia de mi mesa electoral!!! Cagoento... su frutamadre!! Ea, lo novedoso y que me ilusiona es que nunca he estado en las europeas... Seguro que es una nueva y enriquecedora experiencia", abunda con resignación @AceroAnaM.

También lo afrontan bien en general los que son suplentes y cruzan los dedos por que no se lesione el titular. Como @19mariajose4: "Pues nada, no me libré este año de que me llamaran, suplente de presidencia de mesa electoral. Así estoy. Espero no me falle el titular".️ Pero siempre hay algunas personas que no son capaces de encontrar el lado bueno de las cosas, gente a la que se le cae el mundo encima con cada pequeña piedra que la democracia pone en el camino. "Trabajar de lunes a sábado hasta las 10 de la noche y que te toque mesa electoral el domingo debería estar prohibido. Estoy harta", se queja @duermeveIa.