Morten Borg, el padre del polémico hijo de la princesa Mette-Marit también tuvo un pasado oscuro

Las últimas noticias escandalosas sobre Marius Borg, el primogénito de la princesa Mette-Marit de Noruega, han resucitado el fantasma de la -también- turbulenta juventud de la esposa del heredero noruego, Haakon Magnus, y lo difícil que lo tuvo hace más de dos décadas para ganarse las simpatías de la opinión pública del país nórdico.

Y es que el hecho de que Mette-Marit fuera una plebeya (nació el 19 de agosto de 1973, en el seno de una familia sin ascendencia noble: sus padres, un periodista y una empleada de banca, se divorciaron cuando la niña tenía 11 años); y que, además, fuera madre de un niño pequeño cuyo padre era un hombre encarcelado por tráfico de drogas, no le ayudó mucho a la hora de presentar sus credenciales en palacio. Y si a esto le sumamos que, estando embarazada de Marius, se presentó a un 'reality' televisivo de TVNorge en busca de novio, tenemos todos los ingredientes para un cóctel explosivo e indigesto.

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Mette-Marit había conocido a Morten durante su adolescencia. Iniciaron una relación y, en 1997, ya separados, nació Marius Borg. Seis años antes Morten había estado preso por traficar con cocaína.

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A finales de los 90, Mette-Marit asistió al Festival Quart en Kristiansand, el mayor certamen de rock en Noruega, y allí conoció al príncipe heredero Haakon Magnus. Ambos tenían amigos en común que les hicieron de celestinos.

Los noruegos vivieron con pasmo que el príncipe heredero se echara por novia, una madre soltera con la que, poco después, se iría a vivir sin pasar por el altar (algo demasiado 'revolucionario' incluso para la casa real nórdica).

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La decisión posterior de unirse en matrimonio levantó polémica y su posible entrada en la familia real fue considerada por la policía noruega como un riesgo para la seguridad de la realeza. Los periódicos sacaron a la luz cada detalle del tumultuoso pasado de Mette-Marit, y Haakon estuvo a punto de renunciar al trono por amor. 

Para empeorar aún más las cosas, los medios revelaron que el padre de la novia del príncipe se había casado con una 'stripper' a la que doblaba la edad. En definitiva, un cuadro de familia.

A tan solo tres días del enlace, Mette-Marit reconoció públicamente en la televisión que había tenido "algunos inconvenientes en el pasado", y se disculpó públicamente y entre lágrimas por su pasado.

Por su parte, Morten, el empresario y padre de su primer hijo, se quitó del medio para no causar más problemas a Mette-Marit, y nunca ha querido comerciar con fotografías íntimas de su época como pareja.

En 2004 se casó con la modelo de origen libanés Celine Maktabi, de la que se divorció 15 años después, tras haber sido padres de un hijo, a la postre medio hermano de Marius.