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"Vox puede retirar las banderas arcoíris, pero nunca podrá con el arcoíris del cielo"

Manifestación LGTBI contra la transfobia el Día del Orgullo, en Barcelona.

Manifestación LGTBI contra la transfobia el Día del Orgullo, en Barcelona. / Ricard Cugat

Es muy importante celebrar el Día del orgullo LGTBI+. Hemos conseguido mucho, y aún falta más por conseguir. El 28 de junio fue una fecha que marcó la diferencia, fue cuando la comunidad LGTBI+ plantó cara por primera vez, defendiéndose de la policía corrupta de Nueva York, en los años 60.

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Curiosamente, las primeras en encararse fueron las personas trans negras e hispanas, aunque de una manera triste se silencia muchas veces este acto. En el cielo hay nubarrones que amenazan con acabar con lo conseguido, más ahora que partidos como Vox van teniendo poder por sí solos o con la ayuda del PP.

Esto pensaba mientras paseaba con mi pareja. Dos hombres paseando tranquilamente, con las manos entrelazadas, disfrutando de un paseo, a veces se nos escapa una caricia en la cara o un beso. Dos hombres que nos miramos a los ojos y recordamos que nuestro amor no siempre fue fácil, pero juntos superamos muchos obstáculos.

Nadie nos va a sustraer ese romanticismo, ni siquiera esos de la ultraderecha que con sus mensajes avalan que si nos insultan o agreden durante el paseo por ser dos hombres enamorados, lo tenemos merecido.

Dos hombres paseando juntos, disfrutando del amor que se tienen y celebrando ese amor cada segundo, cada minuto, cada hora. Y a veces, cuando en el cielo aparece un arcoíris, nuestros cuerpos se emocionan y le pedimos que nunca vuelvan esos tiempos de represión, de cárcel, de psiquiátricos, de tortura, de asesinatos impunes.

Los de Vox pueden quitar los arcoíris de las plazas, de los ayuntamientos, pero el arcoíris del cielo, ese no pueden quitarlo. Somos dos hombres que se aman paseando por la ciudad o entre las sábanas. También podríamos ser dos mujeres paseando juntas. Podríamos ser todo el abanico de posibilidades que tiene el género humano, todas ellas fruto del amor, del romanticismo, de la conciencia y de la lucha diaria defendiendo el derecho de amar.

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