Contenido de usuario
Este contenido ha sido redactado por un usuario de El Periódico y revisado, antes de publicarse, por la redacción de El Periódico.
Como amante del arte y la cultura, siempre encuentro un domingo al mes para visitar alguna colección temporal en museos y galerías de la ciudad. Lo que queda expuesto, sin embargo, es la ausencia de público joven en las salas de exposición.
Escribe un 'post' para publicar en la edición impresa y en la web
Una explicación plausible podría ser la necesidad humana de buscar significados, autonomía y reconocimiento que los museos de hoy en día, meros lugares de almacenaje y exposición de obras de arte, no satisface. Y si no logran complacer este apetito general, mucho menos podrán satisfacer los anhelos de los seres más exigentes y preocupados por seguir las tendencias sociales, para quienes el museo se ha convertido en sinónimo de aburrimiento y carece de interés social.
En estos últimos años, las instituciones del sector han llevado a cabo actividades para atraer y promover las inquietudes culturales del público juvenil. Sin embargo, todos estos intentos han sido en vano. Ni siquiera están interesados en el arte moderno o contemporáneo, más actual y alejado de las reliquias del pasado. Así pues, se deberían implantar nuevas medidas más allá del concepto de museo tradicional que inspiren a los jóvenes a apostar por ir al museo.