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Antes de valorar favorablemente o no esta decisión debería experimentar estos 30 decibelios para saber a qué ruido me enfrento. De día, posiblemente, 30 decibelios no sean nada, pero mucho me temo que de noche y cuando intentas dormir seguro que es molesto. De todas maneras, y una vez experimentado esto, podría decantarme en estar a favor de esta medida.
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Lo que es imprescindible es que nadie pueda molestar a sus vecinos en las horas de descanso. Si algún bar en un futuro incumple dichas normas debería, según mi parecer, ser cerrado automáticamente sin ninguna dilación