La Guardia Urbana inicia una campaña intensiva de control de patinetes y bicicletas

La Guardia Urbana de Barcelona mantendrá durante toda la semana central de este mes de agosto un dispositivo especial de control de los llamados vehículos de movilidad personal (VPM), bicicletas y patinetes, principalmente, para garantizar que respetan las normas de circulación y no menoscaban la seguridad de los peatones. En el caso del Eixample, de hecho, esa fue una de las conclusiones que se extrajeron de la auditoría realizada en los ejes verdes al cao de un año de su estreno, que los conductores de VPM, por ejemplo, no siempre viajan a una velocidad adecuada.

Los agentes, según los objetivos de esta campaña, vigilarán los estacionamientos inadecuados, la circulación por las aceras, la ignorancia de las señales de tráfico y las infracciones que ponen en peligro a los peatones. Y también, y de un modo especial, una práctica muy frecuente aunque parezca incomprensible, el uso del teléfono móvil y de auriculares mientras se circula.

A largo medio y largo plazo, el Ayuntamiento de Barcelona pretende reducir un 50% las víctimas mortales y los heridos graves en las calles de la ciudad y que en 2050 esa cifra sea cero.