OPA TALGO

Magyar Vagon desafía al Gobierno tras el veto a comprar Talgo y abre la puerta a una 'guerra' judicial

El consorcio húngaro afirma que "la oferta cumple con todos los requisitos legales vigentes"

Magyar Vagon tomará "acciones legales" para defender la OPA sobre Talgo

Alejandro Martínez Vélez / Europa Press

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El consorcio húngaro Magyar Vagon iniciará acciones legales contra el Gobierno tras el veto a su oferta pública de adquisición (opa) sobre el fabricante de trenes español Talgo. La Junta de Inversiones Extranjeras (JINVEX) y el Consejo de Ministros ha tomado esta decisión, según han hecho público, para "proteger los intereses estratégicos y la seguridad nacional de España".

En un escueto comunicado, Magyar Vagon asegura que su oferta "cumple con todos los requisitos legales vigentes", la cual ha sido elaborada por el departamento de banca de inversión de Lazard y el despacho de abogados Garrigues. Por este motivo, planean abrir una guerra judicial. "Vamos a iniciar todas las acciones legales a nuestro alcance, tanto en España como la Unión Europea, para defender la legitimidad de nuestra oferta voluntaria por Talgo".

Por el momento, ningún ministro del Ejecutivo ha querido dar explicaciones públicas sobre esta decisión, justificando que Talgo es una empresa cotizada y las comunicaciones deben hacerse con el mercado cerrado (a partir de las 17.30 y hasta las 9.00), en palabras de Pilar Alegría, portavoz del Gobierno, tras el Consejo de Ministros. Sin embargo, solo media hora después, el Ministerio de Economía y Comercio ha enviado un comunicado señalando que autorizar la opa "conllevaría riesgos para garantizar la seguridad nacional y el orden público". Además, el Consejo de ministros ha tomado la decisión de declarar todo el expediente como información "clasificada", es decir, secreto de Estado.

Defensa de la oferta

En una rueda de prensa en Madrid hace unas semanas, András Tombor, el empresario que lidera la opa sobre Talgo, defendió el plan industrial que tenían preparado para impulsar al fabricante español. "Nuestro plan es convertir a Talgo en una empresa más fuerte dentro del sector ferroviario, pasando de ser un nivel tres a un nivel dos. Talgo se enfrenta a una falta de capacidad industrial, algo que podemos ofrecer en Hungría. Tenemos la capacidad de incrementar la producción drásticamente para que la empresa llegue a superar los 1.000 millones en ingresos al año. Talgo tiene una fantástica tecnología que utiliza en sus trenes, que no tenemos en Hungría, donde sí tenemos la capacidad de desarrollarla", señaló.

Además, Tombor desvinculó su oferta de los intereses rusos, una de las principales sospechas del Gobierno: "No tenemos nada que ver con Rusia. No es un secreto que, en el pasado, manteníamos relaciones industriales con una empresa rusa, la cual se disolvió después del inicio del conflicto bélico. Fuimos una de las primeras empresas en dejar de colaborar con los empresarios rusos". Actualmente, el único vínculo es un proyecto ferroviario en Egipto, el cual deben rematar por compromisos legales.