Aerolíneas

Bruselas aprueba con condiciones la compra de la italiana ITA por Lufthansa

Aviones de la compañía Lufthansa.

Aviones de la compañía Lufthansa. / KAI PFAFFENBACH / REUTERS

Silvia Martinez

Silvia Martinez

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La Comisión Europea acepta la compra del 41% de la aerolínea italiana ITA (surgida tras la quiebra de Alitalia) por parte de la alemana Lufthansa, aunque la operación de fusión estará sujeta a condiciones y solo se completará cuando ambas aerolíneas cumplan con los remedios ofrecidos para evitar problemas de competencia tanto en varias rutas de corta distancia como de larga distancia. “El paquete de soluciones propuesto responde plenamente a nuestras preocupaciones en materia de competencia garantizando que se mantenga un nivel suficiente de presión competitiva en todas las rutas pertinentes”, ha concluido la vicepresidenta de la Comisión, Margrethe Vestager.

Durante la investigación en profundidad llevaba a cabo por la Comisión Europea, los servicios de la competencia identificaron la existencia de varios problemas que ponían en cuestión. En primer lugar, en un cierto número de rutas de corta distancia que conectan Italia con países de Europa Central mediante vuelos sin escalas y con una escala. Se trata de rutas en las que Lufthansa e ITA compiten entre sí o en las que probablemente lo habrían hecho pronto. También rutas en las que la competencia es limitada y procede principalmente de compañías de bajo coste, como Ryanair.

En segundo lugar, Bruselas también identificó problemas en rutas de larga distancia entre Italia, Estados Unidos y Canadá. Dado que Lufthansa y sus socios en la empresa en participación United Airlines y Air Canada se coordinan en materia de precios, capacidad y programación, y comparten ingresos, la Comisión considera las actividades podrían derivar en una competencia “limitada”. Por último, la operación, tal cual fue planteada hubiera, reforzado la posición dominante de ITA en el aeropuerto de Milan-Linate en detrimento de otras compañías rivales.

La autorización de la Comisión Europea a esta operación ha sido recibida con optimismo por parte de la aerolínea española Iberia, que cree que la decisión allana la compra de Air Europa. Fuentes de Iberia afirman que el "completo y ambicioso" paquete de medidas para garantizar la competencia ('remedies') propuesto a Bruselas "da todas las garantías a los consumidores", por lo que no ven "ningún motivo" para que su operación no reciba "la misma luz verde que la de Lufthansa/ITA". "Consideramos que la consolidación de aerolíneas es imprescindible para que Europa tenga empresas más fuertes que puedan competir en el mercado global y, entre otros retos, afrontar con solvencia las imprescindibles inversiones en sostenibilidad", añaden las mismas fuentes.

Por otra parte, la organización europea de consumidores (BEUEC) ha advertido sobre la "falta de claridad" del Ejecutivo comunitario en torno a las condiciones impuestas a la operación entre Lufthansa e ITA puede hacer que los consumidores "paguen el precio de esta fusión con tarifas más altas, menos rutas y servicios degradados". "La Comisión Europea debe resistir la presión política para permitir una mayor consolidación en todos los mercados, protegiendo así los intereses de los consumidores en lugar de los de las corporaciones más grandes, particularmente a la luz de su propio informe reciente que destaca el daño causado por una competencia insuficiente en Europa", añade la asociación que representa los intereses de los consumidores en 31 países europeos.

Remedios propuestos

Para resolver las dudas, la Comisión Europea, Lufthansa y el Estado italiano -propietario de ITA- elaboraron una serie de remedios. Para empezar, poner a disposición de una o dos aerolíneas rivales los activos necesarios para que puedan iniciar vuelos sin escalas entre Roma o Milán y determinados aeropuertos de Europa Central. Estas aerolíneas tendrían que operar en esas rutas durante un periodo mínimo determinado y se les garantizará acceso a la red nacional de ITA para ofrecer “conexiones indirectas” entre determinados aeropuertos de Europa Central y algunas ciudades italianas distintas de Roma y Milán.

Para solventar problemas de competencia en las rutas de larga distancia, el compromiso ofrece a la competencia acuerdos para mejorar su competitividad como intercambio de franjas horarios. “Esto conducirá a un aumento de las frecuencias de los vuelos sin escalas y a una mejora de las conexiones de los vuelos con una escala en cada una de las rutas”, sostiene Bruselas. En su evaluación, la Comisión ha tenido en cuenta que ITA conservará una participación de control tras la transacción y seguirá teniendo incentivos para competir con los socios de la empresa en participación de Lufthansa en Norteamérica, al menos hasta que ITA se integre en la empresa en participación.

Aeropuerto de Milán-Linate

Por último, para resolver los potenciales problemas en el aeropuerto de Milán Linate: la empresa resultante se compromete a cederá franjas horarias de despegue y aterrizaje en el aeropuerto milanés a los adjudicatarios de las rutas de corta distancia. “El número de franjas horarias que se cederán supera lo necesario para explotar las rutas de corta distancia, así como el número de franjas horarias que la transacción habría añadido a la cartera de ITA” lo que “permitirá a la adjudicataria establecer una base sostenible en el aeropuerto de Linate y ofrecer potencialmente sus propias conexiones de una escala entre Italia y Europa Central”, concluye la Comisión.

“En un momento en que los consumidores se enfrentan a precios cada vez más elevados en el transporte aéreo, es muy importante preservar la competencia en el sector. Por eso hemos evaluado muy cuidadosamente si la adquisición de una participación de control en la nueva compañía aérea de bandera italiana ITA por parte de Lufthansa, la mayor compañía aérea de red de Europa, plantearía problemas de competencia. Teníamos que evitar que los pasajeros acabaran pagando más o tuvieran menos servicios de transporte aéreo y de menor calidad en determinadas rutas dentro y fuera de Italia”, ha destacado Vestager.