Galderma pone en marcha su nuevo centro de capacitación global y consuma su aterrizaje en Barcelona

Buscaban un sitio donde abrir un centro en el que se hiciera investigación, desarrollo, tareas de marketing y gestión de operaciones que sirviese a las múltiples filiales que tienen repartidas por el mundo. Y ganó Barcelona. “Seré honesto, viajé y estudié otras cuatro localizaciones –ha confesado este martes su consejero delegado, Flemming Ørnskov–, pero lo que buscaba realmente, aparte del ‘mood’ adecuado y un buen clima, era que hubiese educación de calidad, profesionales de alto nivel, diversidad y gente con visión a futuro, y todo eso se encuentra en Barcelona”. Año y medio después de tomar la decisión, el ‘centro de capacidad global’ de Galderma abre sus puertas con 114 trabajadores y 40 vacantes por cubrir.

En el acto de inauguración, quien ostenta la máxima responsabilidad de este espacio, Raphael Camargo, y el propio Ørnskov, han explicado que la oficina que tiene en Madrid esta compañía cosmética suiza seguirá siendo la que concentre todo lo relacionado con las operaciones en España y Portugal, y que este nuevo centro situado en plena Avenida Diagonal de Barcelona servirá para desarrollar tareas de las que se beneficie el grupo al completo.

Galderma, la compañía tras medicamentos dermatológicos como Benzac, las cremas y geles Cetaphil y algunos inyectables de medicina estética, maneja un volumen de negocio anual de 4.000 millones de dólares actualmente y tiene presencia en un centenar de países. La idea es que el centro de Barcelona, el único de su estilo que tiene en marcha la compañía y una de las mayores inversiones que han hecho hasta la fecha en infraestructura, funcione como centro neurálgico de determinadas funciones como el i+D o el marketing, por ejemplo.  

Puig como referente

“Esto es un hito gigante”, ha asegurado el consejero delegado. “Hemos abierto unas cuantas oficinas, pero esta en concreto fue una gran apuesta para nosotros”, ha añadido el directivo, quien ha confesado que la idea de traer a Barcelona una parte importante de la compañía supuso muchos debates y discusiones con el consejo de administración. Fue clave, en este sentido, “ver que otros habían hecho un buenísimo trabajo”, ha admitido, mentando directamente al gigante catalán de la cosmética Puig.

Hoy en día ya trabajan en estas oficinas 114 personas, mitad procedentes de España, mitad de otra veintena de nacionalidades, aunque el plan es terminar 2024 con 150 profesionales en activo (de los más de 6.000 que tiene repartidos por todo el mundo), algo que se ha ofrecido a alimentar, en la medida que pueda, la Generalitat de Catalunya.

A través del director ejecutivo de Acció, Joan Romero, también presente en el acto de inauguración, el Govern catalán ha tendido su mano a Galderma para que pueda crecer todo lo que necesite. “El sector de las ciencias de la vida es muy estratégico, si bien Catalunya representa el 7,5% del territorio español, concentra el 50% de este sector”, ha destacado Romero. “Queremos a los mejores jugadores, y en dermatología necesitábamos a Galderma”, ha celebrado quien también ha sacado pecho de que la comunidad ya albergue más de 9.200 multinacionales. “Muchas vienen por nuestra localización estratégica, porque tienen al alcance todas las partes de la cadena de valor, por su ecosistema de investigación, educación y ‘startups’, pero, sobre todo, las compañías vienen por los profesionales que tenemos en Catalunya y por el talento que somos capaces de atraer”, ha concluido.