Diálogo social
El CES hace público su "profundo malestar" con el Gobierno por dar entrada sin aviso a Pimec
El Gobierno abre a Pimec la puerta del diálogo social con la entrada en el Consejo Económico y Social
La CEOE estalla contra el Gobierno por abrir el diálogo social a Pimec y le acusa de ser "afín a sus intereses"
El Periódico
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El Comité Económico y Social (CES) ha expresado su "profundo malestar" con el Gobierno por la reciente reforma de su composición interna, aprobada el pasado 22 de mayo por el Ejecutivo sin consulta previa. Esta reforma busca incluir a patronales con representación autonómica, siendo la principal beneficiada la patronal catalana Pimec. La entidad presidida por Anton Costas ha emitido un comunicado este jueves en el que alerta del socabo que esta reforma, sin consulta previa, ocasiona en la "lealtad institucional" para con los agentes sociales.
La reforma tiene como objetivo dar entrada a organizaciones empresariales autonómicas dentro del CES, un organismo consultivo del Gobierno en materia socioeconómica y laboral y constituido por patronales y sindicatos. La inclusión de Pimec, que representa a pequeñas y medianas empresas de Catalunya, marca un cambio significativo en la estructura del CES y da voz a esta entidad por primera vez en el diálogo social a nivel estatal.
La CEOE, que históricamente ha sido el único representante de las empresas españolas en el CES, resulta la principal damnificada con esta modificación. La entidad presidida por Antonio Garamnedi aspira a retener el papel predominante en el ámbito empresarial que hasta ahora ha venido jugando y ya cargó duramente contra el Gobierno, llevando a un punto casi de no retorno su relación con el mismo durante esta legislatura.
El CES ha criticado que esta decisión gubernamental se tomó "sin haber realizado con anterioridad ningún tipo de consulta con el propio Consejo y las organizaciones que lo conforma". Este hecho ha generado descontento entre los miembros del comité, tanto entre patronales como entre sindicatos, que consideran que la falta de comunicación socaba la colaboración entre el Gobierno y los agentes sociales.
"Las formas en las que se aborde su modificación legislativa resultan especialmente relevante a la hora de garantizar el nivel de lealtad institucional que siempre ha presidido la labor de este Consejo", ha manifestado en un comunicado.
Por su parte, el Gobierno ha defendido la reforma, argumentando que busca una representación más diversa y equitativa dentro del CES, adaptándose a la realidad económica y empresarial del país, donde las organizaciones regionales tienen un papel cada vez más relevante. La composición que finalmente quedará en el CES, que debe concretarse antes de final de año, aún está por verse, pero ha avivado el debate sobre la representatividad y el papel de las distintas organizaciones empresariales en España.
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