Hacienda advierte sobre la fianza de los contratos de alquiler

El mercado del alquiler es un negocio donde las irregularidades a la hora de firmar contratos y la posterior declaración de la vivienda a la Agencia Tributaria abundan. La intención del propietario de cobrar en efectivo o la voluntad del inquilino de declarar el inmueble como primer domicilio son solo dos de los puntos donde pueden surgir discordancias entre ambas partes, muchas veces motivadas por el hecho de pasar desapercibidas ante la vigilancia de Hacienda.

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Esto, a su vez, puede suponer un impedimento a la hora de recibir bonificaciones o llevar a cabo trámites como el empadronamiento, por lo que es importante prestar especial atención a los contratos, solicitar la declaración del alquiler y, en caso de detectar cualquier tipo de fraude o de que el casero se niegue a negociar, denunciarlo.

Resguardo de la fianza

En caso de no llegar a un acuerdo y recurrir a un proceso judicial, el inquilino puede solicitar los datos de la vivienda para incluirlos en la declarción, entre los cuales se incluye la copia del resguardo de la fianza, uno de los puntos de máximo conflicto entre propietario y arrendatario.

Si el primero de ellos no facilita dicho documento, se llevará a cabo una inspección con una potencial sanción como consecuencia, ya que depositar dicho importe es una responsabilidad que recae sobre el arrendador.