Previsiones macroeconómicas

El Govern desliza una revisión al alza del crecimiento del PIB hasta el 2% para este año

La economía catalana aminora su aceleración con un alza del 1,1% en el primer trimestre

El déficit de Catalunya se multiplicó por cuatro en 2022, hasta el 1,51% del PIB

Natàlia Mas en el Parlament

Natàlia Mas en el Parlament / Maria Pratdesaba / ACN2

Gabriel Ubieto

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El Govern ha escenificado su optimismo sobre la evolución de la economía catalana y abre la puerta a mejorar sus previsiones de crecimiento del PIB para el presente año. La inflación se está moderando a un ritmo superior al previsto hace unos meses y las lluvias de mayo y junio –como la que ha caído este mismo lunes- están restando dureza a la sequía, entre otros. Es por ello que la Generalitat contempla realizar una revisión al alza de las proyecciones de crecimiento del PIB para el presente ejercicio 2023, pasando del actual objetivo del 1,7%, a una cifra que rondaría el 2%.

“La economía catalana resiste y avanza en positivo, pese a la gran diversidad de obstáculos”, ha declarado la ‘consellera’ de Economia, Natalia Mas, en la presentación de este lunes del informe anual de la economía catalana. Un balance de cómo ha ido el año en el que el Govern se ha congratulado de que Catalunya haya recuperado los niveles de PIB y horas trabajadas previos a la pandemia y que el paro se haya ido reduciendo hasta su menor nivel en 15 años.

Catalunya ya vuelve a producir hoy más riqueza de la que producía antes de que estallara el covid y la economía se contrajera. La recuperación ha sido -al igual que en el conjunto de España- más rápida de lo previsto inicialmente, tal como evidencia el vertigionoso crecimiento registrado en el último ejercicio. El PIB catalán creció un 5,5% en 2022, más de un punto por encima de lo aventurado a finales del 2021 por el Govern.

A diferencia de la crisis del 2008, provocada por el 'boom' del ladrillo y el colapso financiero, Catalunya ha salido de este choque relativamente rápido. Si hace 15 años tardó 37 trimestres en recuperar sus niveles de PIB -más tardó el empleo o las tasas de pobreza-, en la crisis del covid -de diferente origen y naturaleza- ha tardado 10 trimestres.

Tras esa efervescente e intensa recuperación, la economía catalana transita ahora hacia un escenario de crecimiento más moderado, si bien por encima de la media europea, según anticipa la Generalitat. Las previsiones y, sobre todo, el efecto menos dañino de lo esperado de las distintas perturbaciones existentes a nivel internacional hacen que el Ejecutivo catalán contemple el corregir al alza sus estimaciones de crecimiento para este año. "Podríamos revisar nuestras previsiones sobre el 2%", ha afirmado la directora general de análisis y perspectiva económica, Marta Curto.

A nivel laboral, la Generalitat ha sacado pecho de los efectos de la reforma laboral, que en apenas unos meses de vigencia ha logrado reducir las tasas de temporalidad en Catalunya hasta una cifra cercana al 14%. Es decir, pasa de líder histórico (al igual que el conjunto de España) de los podios europeos de eventualidad a converger a niveles cercanos a la media. “La temporalidad finalmente se sitúa a niveles europeos”, ha valorado Mas durante su discurso. Un aplauso a los efectos de una norma que contrasta con el voto negativo que el grupo parlamentario de ERC en el Congreso a dicha reforma laboral.