La huelga de inspectores se le complica a Díaz: más sindicatos se suman

La huelga de inspectores y subinspectores de Trabajo se le complica a la vicepresidenta segunda Yolanda Díaz. Más sindicatos se han sumado al ciclo de protestas convocado a finales del año pasado para reclamar más personal, recursos y mejoras salariales para la 'policía laboral'. A la convocatoria de CCOO, CIG, Sitss, Sislass y Usess se han sumado UGT, Csif y Upit. La única central de peso que se mantiene al margen de la huelga es el Sindicato Estatal de Subinspectores de Empleo y Seguridad Social (Seslaess), con fuerte peso entre los subinspectores. El próximo 25 de enero está prevista la segunda jornada de paros, tras la primera celebrada en diciembre.

Es el primer ciclo de huelga que interpela a todos los empleados públicos del cuerpo de la Inspección de Trabajo, tanto inspectores, como subinspectores, como administrativos, en la historia de la institución. Y llega tras un año de malestar laboral latente, que casi termina ya en 2022 con paros. Entonces los sindicatos los desconvocaron en aras de un acuerdo que no llegó y ahora vuelven a la carga. Su principal reivindicación es que el Gobierno les dote de más personal para atender a la creciente carga de trabajo asumida por el cuerpo tras las aprobación de múltiples normativas, desde la última reforma laboral hasta la vigilancia de los planes de igualdad, entre otros.

Según los últimos datos de la propia Inspección de Trabajo, en 2021 el cuerpo disponía de 2.051 inspectores y subinspectores, que deben controlar a una población de trabajadora de 20,2 millones de personas. Es decir, tocan a más de 10.000 trabajadores por agente. Una proporción criticada por las centrales y que se ha visto agravada por el aumento de legislación laboral aprobada en los últimos años. Mientras, y según datos de la propia vicepresidenta segunda, la actividad inspectora ha aumentado el 355% durante su mandato al frente de Trabajo.

Sobre la disponibilidad de recursos, los sindicatos convocantes de los paros critican que en 2022 "se ha desperdiciado más del 20% del presupuesto recogido el pasado año para la Inspección de Trabajo que ha quedado sin ejecutar", según sostienen en un comunicado. "Obteniendo el organismo la peor ratio de su historia en lo que a ejecución presupuestaria se refiere y desaprovechando una oportunidad singular para dotar de cuerpo las medidas comprometidas en el acuerdo de julio de 2021", añaden en el mismo. 

Si los ministerios de Trabajo, como ente responsable de la Inspección, y el de Hacienda, como responsable de función pública, no alcanzan un acuerdo con los sindicatos que permita desconvocar los paros, el próximo 25 de enero habrá otra jornada de huelga. Y el 22 de febrero también están previstos paros en la 'policía laboral'. "El hartazgo de la plantilla es patente", alertan los sindicatos.