Botín pide no subir impuestos si perjudica al crecimiento económico

La presidenta del Santander, Ana Botín, ha reclamado este jueves a las autoridades políticas que no tomen medidas que perjudiquen al crecimiento económico, ya que la ausencia de este es el "mayor riesgo" que afronta el mundo. "Lo que necesitamos de los gobiernos es que cada vez que implementen políticas, aumenten los impuestos, adopten cualquier tipo de cambio en la asignación de fondos, la pregunta clave que se hagan sea: ¿Esto ayudará al crecimiento o no? Para mí esa debería ser la prueba (para adoptarlas o no)", ha sostenido durante la conferencia anual de banca que organiza su entidad.

La banquera, así, ha destacado que en torno a la mitad de los países del mundo -incluido España- registran aún un PIB inferior al que tenían en 2019, el último año prepandemia. Sin crecimiento, ha advertido, no es posible abordar los problemas como "la pobreza, el desempleo, la desigualdad, el cambio climático, y la estabilidad democrática". También es necesaria la expansión de la economía, ha añadido, para que los agentes económicos, públicos y privados, puedan pagar sus altos niveles de deuda. "La prosperidad es la base para un orden global estable y el mejor antídoto contra las tensiones geopolíticas", ha defendido.

Botín, en esta línea, ha sostenido que las leyes tributarias y de competencia han quedado "desfasadas" en el actual mundo digital. También ha advertido de que Europa no tendrá un "euro fuerte" hasta que complete la unión del mercado de capitales y la unión bancaria. Asimismo, ha alertado de que un gran número de pymes en el continente están muy endeudas y los bancos no pueden darles más financiación. Lo que necesitan, ha mantenido, es capital, y los fondos europeos son una oportunidad para aportárselo. 

Rentabilidad y solvencia

La ejecutiva, que también preside las patronales bancarias europea y mundial, ha argumentado también que los bancos deben ser rentables para financiar la inversión que permitirá el crecimiento. "Los bancos hemos sido parte de la solución en esa crisis, somos sólidos. Pero para seguir siéndolo necesitamos ser rentables. Y rentabilidad significa obtener más que nuestro coste de capital. Al ver solo las grandes cifras de beneficio, se puede decir que son ganancias extraordinarias. Pero es necesario ver esas ganancias en el contexto de cuánto capital es necesario", ha sostenido. En Europa, ha destacado, 0,5 puntos más o menos de capital suponen 1,5 billones más o menos de crédito. 

"El mayor riesgo al que nos enfrentamos es la falta de crecimiento. Sin crecimiento, no podemos financiar los programas sociales, educativos y de salud que necesitamos. Como en 2008, estamos en crisis. Pero la de hoy es un tipo diferente de crisis. Es una crisis en la que ya no hay dinero barato y baja inflación, sino tipos más altos y una inflación más alta, una crisis en el contexto de gobiernos que luchan por pagar sus deudas, y debemos enfrentar esta realidad. A medida que cambia el riesgo, las reglas deben cambiar. La regulación no es un fin en sí mismo, no es una tabla de piedra", ha reclamado. 

Pronto acuerdo

En el mismo foro, la vicepresidenta económica del Gobierno, Nadia Calviño, ha defendido la necesidad de un "crecimiento robusto", pero también "sostenible, inclusivo y que no deje a nadie atrás". En este sentido, se ha declarado "orgullosa" de haber alcanzado pactos con la banca en el último año para que las entidades mejoren el acceso a los servicios financiero de los mayores y en la España vaciada, al tiempo que se ha mostrado confiada en alcanzar "pronto" un acuerdo para atender a las familias vulnerables que tengan problemas para pagar la hipoteca por la escalada del euribor.

"Quiero dejar muy claro que el mercado hipotecario español es hoy muy diferente que en el pasado, dado el nivel de apalancamiento, la concesión responsable de crédito hipotecario, el relativamente bajo nivel pendiente de créditos con tipo variable. En este momento no se plantea en modo alguno un problema macroeconómico o riesgo financiero. Los niveles de mora y los riesgos son históricamente bajos. Pero también es cierta que la rápida subida de tipos que puede suponer una preocupación para muchas familias que pueden estar en riesgo de vulnerabilidad. Es importante y es urgente que trabajemos juntos para que el sector bancario proporcione a las familias una confianza que será muy positiva para todos", ha sostenido.