El 17% de las empresas catalanas carecen de sistema de prevención de riesgos laborales

El 17% de las empresas catalanas carecen de un sistema de prevención de riesgos, pese a ser obligatorio por ley. El equipo técnico que debe garantizar la salud laboral en los centros de trabajo y decidir, entre otros, si las mascarillas deben seguir siendo obligatorias o no a partir de ahora está ausente especialmente en las pequeñas empresas. En el resto, mayoritariamente está externalizado, es de carácter genérico y las empresas dedican habitualmente una media de solo 6,5 horas al año a revisar sus infraestructuras y protocolos. Así lo constata un informe publicado este jueves por CCOO, en base a datos de la Generalitat de Catalunya, en el que el sindicato denuncia la los riesgos para la salud laboral de miles trabajadores catalanes.

"Es un sistema que permite a las empresas incumplir fácilmente la normativa", ha criticado la responsable de salud laboral de CCOO de Catalunya, Mònica Pérez. Durante la pandemia las compañías han tenido que asumir el control de la pandemia desde los centros de trabajo y en el actual compás deben decidir si mantienen o no las mascarillas en función de la ventilación, la separación entre trabajadores y el tipo de actividad desempeñada. Dicha decisión corre a cargo del sistema de prevención de riesgos laborales y la calidad del mismo presenta diversos agujeros, según ha denunciado el sindicato. "Hay poca prevención y de baja cualidad", ha aseverado Pérez.

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Tres de cada cuatro empresas tiene el servicio de prevención externalizado, es decir, no lo evalúan y controlan encargados de la propia empresa, sino compañías externas a las que las direcciones subcontratan el encargo. Lo que se traduce en protocolos genéricos y una "prevención meramente documental", según CCOO. Solo una de cada cuatro compañías tiene un plan diseñado específicamente para las necesidades de su actividad, el resto tiene un programa estandarizado. E incluso parte de aquellas empresas que por ley debieran tener un protocolo específico para sus centros no lo tienen. El 15,9% de empresas con más de 500 trabajadores incumplen la obligación de tener un servicio de prevención propio o mancomunado.

Escaso control presencial

El control y actualización de dichos planes es mayoritariamente superficial, pues las horas que anualmente dedican los servicios de prevención a ponerse al día es escaso. De media, las empresas que tienen el servicio externalizado dedican 6,5 horas presenciales a lo largo de todo el año a ello. De ello depende la salud y bienestar de 1,2 millones de trabajadores en toda Catalunya. Y entre aquellas que sí lo tienen internalizado, el número de horas de revisión presencial es superior, pero claramente insuficiente a ojos del sindicato. De media dedican 21,8 horas al año a revisar 'in situ' todas aquellas cuestiones relacionadas con la ergonomía, psicosociología, seguridad, higiene y medicina del trabajo.

Todo ello redunda en unos datos de siniestralidad que cuando repunta la actividad económica repuntan con ella. El número de accidentes de trabajo acaecidos durante la jornada o 'in itinere' y que requirieron de baja médica ascendió en 2021 a 107.673 siniestros, lo que representa un incremento del 21% respecto al 2020. De estos, un total de 85 fueron mortales. "No es azar, es falta de prevención", advierten desde el sindicato. Es por ello que exigen a la Generalitat y al Gobierno que reforme la actual normativa para, entre otros, obligar a las empresas y a las mutuas colaboradoras a mejorar la información en los partes de accidentes, incorporando una perspectiva de género y ampliando la información sobre la causa del siniestro y las condiciones de trabajo en las que operaban el siniestrado y sus compañeros.