35 euros más al mes

Trabajo aclara que su oferta es subir el salario mínimo de 965 a 1.000 euros

El planteamiento coincide con las tesis sindicales y en contra de las de CEOE, que reúne este martes a su cúpula para previsiblemente descolgarse del acuerdo

Yolanda Díaz asegura que le gustaría subir el salario mínimo hasta los 1.000 euros

Yolanda Díaz asegura que le gustaría subir el salario mínimo hasta los 1.000 euros. /

Gabriel Ubieto

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El Ministerio de Trabajo ha planteado subir el salario mínimo interprofesional (SMI) de los actuales 965 a 1.000 euros brutos al mes (en 14 pagas). 35 euros de incremento para este 2022 y con carácter retroactivo a 1 de enero, según confirman fuentes gubernamental. Así se lo ha trasladado el equipo del ministerio liderado por Yolanda Díaz a patronal y sindicatos en la reunión que han mantenido este lunes. Si bien los sindicatos inicialmente habían avanzado que la propuesta era de 996 euros, en coherencia con la senda de incrementos del año anterior, posteriormente fuentes del equipo de Díaz han matizado que su planteamiento es llegar a la simbólica cifra de 1.000 euros.

Ahora los agentes sociales deberán estudiar la propuesta en sus respectivos órganos directivos, el miércoles de esta misma semana vuelven a reunirse las partes para cerrar el dato definitivo de incremento y la intención de Trabajo es llevarlo al Consejo de Ministros del martes que viene. Casi dos millones de trabajadores perciben actualmente el SMI en España, casi el 10% de la población trabajadora.

"Conocen bien el informe de expertos, nos vamos a manejar en ese escenario", fue la respuesta que dio hace una semana la ministra de Trabajo a la pregunta de cuánto subiría el salario mínimo este año en España. Dicho informe marca una senda de incrementos progresivos para el 2023 y, para que la siguiente subida se mantenga en el carril marcado por la del año anterior -que fue de 15 euros-, debiera dejar el SMI en esa cifra de 996 euros. Lo que implicaría un aumento del 3,2%, una décima por encima de la inflación media con la que cerró España el 2021 y casi la mitad del último IPC de enero (6%). Finalmente Trabajo ha optado por redondear y reforzar políticamente la subida llegando a los cuatro dígitos. Un redondeo que, no obstante, no ha trasladado este lunes a los agentes sociales, pues tanto CCOO y UGT insisten en que la cifra que se les ha trasladado durante la reunión ha sido de 996 euros.

Al margen de la divergencia de versiones, Díaz se ubica con los 1.000 euros en las posiciones sindicales, que le exigían llegar a un SMI de 1.000 euros. Y, a su vez, en contra de las pretensiones de la patronal, que le pedía no llegar a los cuatro dígitos. "A mi me gustaría tener un salario de 1.000 euros. [...] Ojalá seamos capaces de encontrar puntos de encuentro", ha declarado la vicepresidenta segunda en la rueda de prensa posterior a la cita con los agentes sociales. Una voluntad de entente que ha remarcado la vicepresidenta primera, Nadia Calviño, en una rueda de prensa este mismo lunes. "Esa es la cifra [los 1.000 euros] que hemos barajado en el Gobierno, pero hemos de dar una oportunidad al diálogo social [para conocer su opinión] antes de tomar una decisión que esperamos adoptar lo antes posible", ha afirmado. Informa Rosa María Sánchez.

La voluntad de acuerdo a tres bandas la ha manifestado el Gobierno en pública, más no condiciones para que la CEOE se sume al mismo. Pues el presidente de los patronos, Antonio Garamendi, ya manifestó la semana pasada que "lo de los 1.000 euros lo veo complicado" y recordó que este suelo salarial ha aumentado el 35% en los últimos cinco años. Trabajo podría intentar atraer a los empresarios al acuerdo bajando en la próxima reunión del miércoles de esa cifra de 1.000 euros, arriesgándose a enojar a las centrales. No obstante, la competencia de subir o no (y cuánto) el salario mínimo es exclusiva del Gobierno y la negociación con los agentes sociales es meramente consultiva. Así que la última palabra la tiene el Consejo de Ministros.

Los sindicatos quieren una subida "con o sin acuerdo"

Las centrales si bien públicamente han urgido al Ejecutivo a llegar a los cuatro dígitos, también quieren acotar temporalmente la negociación y le instan a cerrarlo cuanto antes, aunque ello suponga que los empresarios no estén en la foto. "El miércoles, con acuerdo o sin acuerdo, las negociaciones sobre el salario mínimo quedarán concluidas", ha afirmado la negociadora de CCOO, Mari Cruz Vicente. La CEOE reúne este martes a su cúpula y podría escenificar su rechazo a la propuesta de los 1.000 euros.

Una de las bazas en la negociación -que será corta y que, según ha afirmado Díaz, no pasará del miércoles- es a partir de cuándo empezará a regir el nuevo SMI. "Será con efecto retroactivo", ha afirmado la vicepresidenta, a priori desde el 1 de enero. "La subida tiene que ser con carácter retroactivo desde el 1 de enero", le ha apretado el negociador de UGT, Mariano Hoya. El miércoles a las cinco de la tarde el Ministerio de Trabajo ha vuelto a citar a los agentes sociales para dar carpetazo a la subida del SMI.

Pimec pide ligar salarios a productividad y Foment espera a la CEOE

Las patronales catalanas han salido al paso de la propuesta de Trabajo sobre elevar el salario mínimo a 1.000 euros. Pimec reconoce que es momento de subir ese suelo salarial dada la actual inflación, pero insiste en vincularlo a la productividad. "Pedimos que también se tengan en cuenta medidas para la mejora de la productividad ante la actual situación de productividad negativa. De no hacerlo, supondría un riesgo para la competitividad y la recuperación económica", afirman desde la patronal de las pymes.

Foment del Treball, por su parte, ha publicado una nota tras su junta directiva en la que indica que no se pronunciará hasta que no lo haga la CEOE. No obstante, este mismo lunes y antes de conocerse la propuesta del Gobierno, el director de relaciones laborales de la patronal, Javier Ibars, ha declarado que "no es el momento" de subir el SMI a 1.000 euros.