Sigue los pasos de Amazon

Google cobrará un recargo a sus clientes publicitarios por la 'Tasa Google'

La compañía subirá sus tarifas a partir del 1 de mayo de 2021

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Sara Ledo

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Google repercutirá sobre sus clientes publicitarios el Impuesto sobre Determinados Servicios Digitales (IDSD), conocido popularmente como 'Tasa Google', que grava desde enero a las grandes tecnológicas con un 3% de los ingresos obtenidos por sus servicios digitales en España. La compañía cobrará a partir del 1 de mayo un recargo del 2% a todos sus clientes por los anuncios de Google Ads publicados en este país, según ha anunciado a los usuarios de este servicio este miércoles. La multinacional sigue los pasos de Amazon que anunció en enero que trasladará el impuesto de forma íntegra a todos los clientes de su plataforma desde el 1 de abril.

El recargo se aplicará a los anuncios servidos en España, con independencia del lugar en que el anunciante tenga su sede principal. Es decir, una compañía estadounidense que se publicita en España podría registrar cargos adicionales en su factura. "Los impuestos sobre Determinados Servicios Digitales incrementan el coste de la publicidad digital por lo que hemos informado a nuestros clientes que, a partir del 1 de mayo de 2021, añadiremos un recargo a las facturas relativas a los anuncios servidos en España. Este cargo adicional tiene por objeto cubrir parte de los costes asociados al cumplimiento de los Impuestos sobre Servicios Digitales en vigor en España", ha precisado en un comunicado Google. 

No es la primera vez que la empresa del buscador implementa recargos similares en otros países en los que se establecen tasas adicionales por los servicios digitales. La multinacional americana ha establecido cargos adicionales en Reino Unido (un 2%), Austria (un 5%) o Turquía (un 5%) desde el 1 de noviembre de 2020. 

"Continuaremos pagando todos los impuestos que nos corresponden tanto en España como en el resto de países en los que operamos y alentamos a los gobiernos a nivel global a llevar a cabo una reforma fiscal internacional en lugar de implementar impuestos unilaterales", ha querido aclarar Google. La compañía ha vuelto a insistir en que es partidaria de una reforma fiscal internacional en el marco de la OCDE y no de impuestos unilaterales y específicos de cada país (sobre los ingresos en lugar de los beneficios). "No creemos que un conjunto de impuestos unilaterales y específicos de cada país (sobre los ingresos en lugar de los beneficios) sea la mejor manera de avanzar", ha remachado.

La 'Tasa Google' española, que entró en vigor el pasado 16 de enero, al igual que la de Francia o Reino Unido, grava los ingresos de las compañías por determinados servicios digitales. Un concepto diferente al que se debate en el seno de la OCDE, donde se trabaja en un impuesto indirecto sobre servicios financieros para que las multinacionales (no solo las tecnológicas) tributen por una parte de su beneficio (impuesto de Sociedades) en los países donde hacen negocio digital.