Catalunya perderá 85.000 empleos hasta el 2022 por el covid-19

Catalunya perderá unos 85.000 empleos a causa de los efectos del covid-19 entre el 2020 y el 2021. Se trata de una pérdida que no se podrá recuperar hasta finales del 2022 o principios del 2023, después de que la economía ya haya conseguido mantener un ritmo de crecimiento significativo. La efectividad de las vacunas contra la pandemia en los primeros meses del 2021 será la clave para recuperación económica, considera el BBVA Research en su análisis sobre la economía catalana que ha sido presentado este jueves por el economista jefe para España, Miguel Cardoso y el director territorial de Catalunya, José Ballester.

Hotelería, restauración, comercio y viajes son los sectores más afectados por la pérdida de empleo, puesto que también ha sido los más afectados por las restricciones impuestas como consecuencia de la pandemia, pero también se espera que su recuperación sea intensa cuando "se alcance la inmunidad de rebaño", ha destacado Cardoso.

Según las previsiones de BBVA Research, el empleo podría caer en el 2020 un 3,8%, para crecer un 1,3% en el 2021. Con todo, Catalunya podría cerrar el bienio con una pérdida de 85.000 puestos de trabajo, respecto al nivel de cierre de 2019, lo que supone un aumento de la tasa de paro promedio hasta el 14,4% en el 2021. 

Diferencias respecto al 2008

El informe destaca que el impacto de la crisis ha sido significativo, aunque heterogéneo y con algunas diferencias respecto al 2008. Por edades, la caída del empleo vuelve a ser mayor entre los jóvenes, aunque ahora los mayores de 35 años representan más de la mitad de las personas que han perdido su empleo en España, por efecto del envejecimiento. Por género, esta crisis ha afectado de forma más igualitaria a hombres y mujeres que la del 2008, al afectar más a servicios en los que la presencia de mujeres es mayor, y menos a la construcción. Por sectores, entre febrero y mayo del 2020, la caída de la afiliación fue mayor en la hostelería (un 20,7%) y los servicios de menor teletrabajo (8,3%), afectados de forma más negativa por las restricciones para contener la epidemia.

Desde el punto de vista territorial, la mayor contracción de la afiliación en mayo, momento de máximo impacto, se observó en el Eix Gironí y el Camp de Tarragona, que con  datos a noviembre, mantienen una mayor debilidad. También el ajuste fue notable, aunque en menor medida, en el Eix Metropolità y las Comarques de Muntanya, por el efecto del turismo. Por el contrario, en las Comarques Centrals, el Pla de Lleida y las Terres de l'Ebre, con mayor concentración del empleo en la agricultura y la industria, la evolución de la afiliación sería algo más favorable. 

Caída y recuperación

El BBVA prevé que la economía catalana experimente una caída de entre el 11,5% y el 12% este 2020 para volver a crecer entre un 6% y un 6,5% en el 2021 como consecuencia de la crisis del coronavirus.

De este modo, BBVA Research ha revisado ligeramente al alza sus previsiones para Catalunya para este año debido al impacto de las medidas discrecionales impulsadas por las diferentes administraciones públicas en reacción a la crisis porque considera que contribuirán a amortiguar la caída del PIB catalán.

La segunda ola de contagios y las medidas restrictivas para frenar el avance de la crisis sanitaria mantienen la incertidumbre elevada, destaca el informe. Por ello, los datos del cuarto trimestre apuntan a un menor crecimiento del esperado inicialmente y la expectativa de recuperación de la economía catalana y la de España se modera para 2021. 

La información disponible muestra un ajuste en algunos indicadores desde octubre. En concreto, en noviembre el gasto con tarjeta de BBVA o en TPV del banco, se redujo un 18%. Por sectores, la contracción fue más significativa en alojamiento (-80%), restauración (-63%) y moda (-56%). 

Por otro lado, las exportaciones catalanas se habrían reducido hasta septiembre un 14,% interanual debido a la reducción de las ventas exteriores en el sector automotriz de un 28,5%, así como las de bienes de equipo (-2,7%) y bienes de consumo (-18,4%). 

La desaceleración esperada en la economía española y europea podría afectar a sectores estratégicos para Catalunya, ya que la eurozona es uno de los principales destinos de sus exportaciones (52% del total). Esto, unido a los retos propios del sector automotriz, podría condicionar la velocidad de recuperación de la economía catalana.